La adquirencia es el proceso por el cual un comercio queda habilitado para cobrar con diversas tarjetas de crédito o débito de manera fácil y rápida a través de una plataforma de pagos.
Desde 2019, en la Argentina entró en vigencia la multiadquirencia, que habilita a los comercios a cobrar con cualquier tarjeta, sin importar la empresa de procesamiento contratada.
De esa manera, al igual que ocurrió con muchos otros sectores como el de la telefonía fija y móvil, se abrió el juego para que las entidades encargadas de validar los pagos con tarjetas de crédito y débito, llamadas adquirentes, compitan para ofrecerles a los comerciantes la posibilidad de operar con todos los plásticos.
Y en un contexto donde los pagos electrónicos ganan cada vez más espacio con el mayor desarrollo de herramientas que permiten transacciones en línea y legislación como Transferencias 3.0, un nuevo actor desembarca en este ecosistema para disputarle mercado a las dos firmas líderes: Prisma (que ofrece la red Lapos) y Fiserv (dueño de las marcas Posnet y Clover).
Se trata de Global Processing que trabaja tanto como adquirente como emisor y como parte de su proceso de expansión regional, apunta a transformarse en el tercer jugador en la Argentina.
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Global Processing trabaja tanto como adquirente como emisor
En diálogo con iProUP, Gustavo Ciafardini, CEO de GP, explica que la compañía trabaja con las principales empresas de tarjetas de crédito (Visa, Martercard y AmericanExpress), y revela que antes de estar operativos ya estaban en contacto con numerosas firmas que solicitaban su servicio.
"Si bien el lanzamiento con el primer cliente fue en septiembre -con el cual atravesamos un proceso muy ordenado-, nuestro servicio ya era muy demandado, lo que demuestra que hay una necesidad de alternativas en el mercado local", agrega.
Y en un escenario, donde los grandes comercios no le brindan a los el 100% del negocio a un adquirente, sino que se integran con los grandes procesadores y operan con la misma lógica que ocurre en el mundo, la llegara de nuevas alternativas es clave para fomentar el progreso y la competencia.
Global Processing, el nuevo actor que desembarca en este ecosistema para disputarle mercado a las dos firmas líderes (Prisma y Fiserv)
Cambio de paradigma
El mercado necesita mucho más que únicamente limitar el servicio a la entrega de un POS. Sino que demanda un partner que les brinde la solución para fomentar la diversidad. Ese es el desafío al que apuntan desde GP con su propuesta.
Por tal motivo, desde Global Processing pone en marcha un modelo de negocio que fue implementado con éxito en otros sectores, como el del segmento fintech: armar el producto que el cliente requiere.
De esta manera, la compañía le da un importante espacio a la demanda de sus usuarios, que en definitiva, son quienes conocen sus propios negocios, característica que condiciona las necesidades de estos y exigen soluciones prácticamente a medida y no estructuradas.
Gustavo Ciafardini, CEO de Global Processing
"Estamos por anunciar entre ocho y diez proyectos más, lo que nos va a dar mucho volumen de transacciones. Y estamos tranquilos porque estamos preparados para esto porque tenemos la ventaja de trabajar en la nube, lo que nos brinda escalabilidad", subraya CEO de GP.
Y si bien Ciafardini considera que en materia de multiadquirencia la Argentina aún está un par de escalones por detrás de lo que ocurre en promedio en el mundo, el desembarco de más actores es un aporte clave para mejorar el ecosistema.
"Nuestro objetivo es poner en el mercado, de manera progresiva, productos y servicios diferenciales. La multiadquirencia abrió el juego, pero no se aprovechó para hacer un cambio de paradigma, no se agrandó el abanico de posibilidades", lamenta el especialista.
Expansión en la región
La compañía está presente en Uruguay y espera en el corto y mediano plazo ampliar su presencia en más mercados.
En esa línea es que Global Processing tiene planeado entre febrero y marzo abrir oficinas en Colombia.
"Además tenemos oficinas en Paraguay y estamos trabajando para abrir en México, Perú y Chile. Salir a la región en este contexto fue complicado para avanzar, generó que los procesos sean un poco más lentos sobre todos en países nuevos", explica Ciafardini.
En el caso de Paraguay, la compañía ya tiene tres contratos, mercado donde se permite tener tanto debito como crédito dentro de un mismo plástico y es la adquirencia quien pregunta con qué tarjeta se quiere pagar.
"La pandemia aceleró todo el proceso de digitalización. Pero, en líneas generales, no hubo inconvenientes en la aceleración el proceso porque la gente lo adoptó rápido. Nuestro crecimiento fue exponencial porque el producto que tenemos permite operar a distancia y además nuestros clientes que vienen empujando con mucha fuerza dentro del mundo fintech y eso nos permitió crecer a la par de ellos", concluye el especialista.
