En la era 4.0 cualquier persona con una baja inversión puede tener su "propia fábrica" en la casa: gracias a la impresión 3D es posible crear juguetes, bijouterie, fundas para celulares, moldes y más.
El propio Karl Schawb, fundador del Foro Económico Mundial y creador del término Cuarta Revolución Industrial, dice que esta innovación representa uno de los pilares tangibles de la economía digital.
Impresión 3D: cómo funciona
Irene Presti, CEO y cofundadora de 3DU Digital, afirma a iProUP que se trata de "una herramienta que ayuda a materializar un diseño digital en una forma física".
"Dependiendo de la necesidad, se elige el tipo de impresora y el material. Las industrias en las que se aplica son: automotriz, metalmecánica, agro y hasta en medicina, ya sea para estudios prequirúrgicos, modelos dentales, ayudas técnicas y hasta prótesis para reemplazo de huesos", ilustra a iProUP .
El proceso inicia con el diseño de un modelo en plano tridimensional en una computadora. Con un software como Cura, se crea un código de miles de capas para indicarle a la máquina cómo imprimir.
Luego hay que configurarla, elegir la calidad de impresión y la especificación correcta del material. Por último, el equipo comienza el proceso aditivo de aplicar el material capa a capa.
La impresión 3D permite crear objetos a partir de plásticos
"Una impresora 3D permite fabricar cualquier objeto previamente modelado en 3D. No hay moldes físicos, sino moldes digitales", expresa a iProUP Emiliano Carreira, CEO de Trimaker.
Entre los principales software CAD para elaborar la "matricería" digital, Carreira nombra a Solidworks, Rhinoceros y Tinkercad. Si no se sabe usarlos, también se pueden descargar planos gratis en Thingiverse o CGTrader.
Con respecto a las impresoras, existen diferentes tecnologías:
- Modelado por deposición fundida (FDM). "Es la más usada: funde un material plástico que se deposita capa por capa hasta lograr el objeto físico", señala Presti. Estas máquinas son más económicas, emplean un polímero que se derrite a 200-300 grados y son usadas por emprendedores y hobbistas
- Estereolitografía (SLA). Inserta una resina fotosensible en un contenedor: al entrar luz, se endurece y se crea el objeto. Luego, la pieza debe ser "curada" para que seque y termine de solidificar. Se usa en odontología y joyería
- Sinterizado Láser Selectivo (SLS). "El material son partículas que se depositan en un recipiente: al ser tocadas por un láser se derriten y unen entre sí. Puede usar plásticos de gran resistencia, como el nylon; hasta metales como acero o titanio", indica Presti
Esta última tecnología es aprovechada por el sector industrial porque, según la experta, "podés tener una pieza totalmente personalizada, con medidas exactas". También en medicina, ya que el "titanio es empleado en las prótesis para obtener un hueso a medida del paciente".
Impresión 3D: cuánto hay que invertir y cuándo se recupera
Antes de arrancar, Presti recomienda capacitarse para conocer qué quiere fabricar y, según tales necesidades, elegir la impresora y material ideal, además de proyectar costos y tiempos.
"Es muy importante formarse, porque la mayoría de las consultas son por falta de conocimiento y no por falla de los equipos, que son cada vez más fáciles de usar", apunta la directiva.
Tomás Chernoff, CEO de Che 3D, asegura que es posible adquirir una impresora 3D a bajo costo y cuotas sin interés
Tomás Chernoff, CEO y fundador de CHE3D, señala a iProUP que "hay máquinas que valen $100.000 y se pueden comprar en 18 cuotas sin interés"
El ejecutivo subraya que se debe tener en claro para qué se quiere la impresora. "El consejo más importante es buscar un nicho y dominarlo, para luego encontrar la metodología de trabajo adecuada en una especialización que les resulte familiar", argumenta.
Emiliano Carrera, CEO de Trimaker, asegura a iProUP que "con cualquier notebook y una impresora 3D podés empezar a crear tu propia línea de juguetes, de macetas, mates o crear objetos que aún no existen en el mercado. Todo eso sin moverte de tu casa", añade.
"En el mercado para emprendedores o hobbistas, las marcas asiáticas dominan el ticket bajo. En Trimaker ofrecemos una solución integral que incluye capacitaciones, acompañamiento por Whatsapp, celular y mail, repuestos e insumos siempre en Argentina, desde hace 10 años", agrega.
El costo de la impresora arranca en $100.000 para los modelos más básicos, aunque puede triplicarse según tamaño y capacidad de producción. También hay equipos de u$s100.000 para trabajos de escala industrial que requieran materiales de mayor resistencia.
Los expertos afirman que "no es descabellado" que un emprendedor que arranque con un modelo básico recupere en tres meses la inversión inicial si consigue un nicho de negocio poco explotado y realiza una buena promoción de sus productos.
Desde Trimaker recomiendan conocer primero qué es lo que se quiere hacer antes de comprar la impresora e invertir en un emprendimiento
También hay que estar alerta a las oportunidades del mercado: luego de que la Argentina se quedara con el Mundial de Qatar, explotó la demanda de réplicas de la Copa en tamaño natural, en formato de mates y hasta llaveros. A tal punto, que escaseó la disponibilidad de filamento color dorado.
Impresión 3D: emprendimientos en primera persona
Natusia Szurawska y su pareja Ezequiel arrancaron con la impresión 3D en noviembre de 2020, ante la necesidad de un nuevo ingreso y la falta de actividad. Reconoce a iProUP que la idea original era "fabricar artículos de madera y otros materiales tradicionales, pero en aquel momento estaba todo parado y era difícil conseguir proveedores y talleres".
Con la impresora y filamentos como única inversión, crearon macetas para uso personal. Tras recibir elogios en redes sociales, empezaron a comercializar floreros, percheros y organizadores, entre otros.
"En Familia DDD nos dedicamos a construir una marca de artículos del hogar. Todos los objetos son diseñados por nosotros, apostando a la calidad, sustentabilidad y originalidad", dice la emprendedora.
Y añade: "Resultó ser muy práctico ya que no teníamos que depender de otros para comenzar la producción. Simplemente, nuestras ideas pasaron a ser realidad gracias a la impresión 3D". Tal fue el éxito que al año tuvieron que comprar tres impresoras más. "Cada una costó aproximadamente 60.000 pesos argentinos en aquel momento", recuerda Natusia.
El arquitecto y diseñador Martín Juárez Brizzi creó Fona junto a sus amigos para unir la impresión 3D con la música. Y crear el futuro de los instrumentos. Con apoyo del fabricante de equipos Zootec3D, Fona ganó el concurso Capital Semilla 2015 del ex Ministerio de Industria de la Nación. Y recibió $60.000 que les sirvió para comprar tres impresoras y los insumos.
Fona es un emprendimiento argentino que diseña y fabrica instrumentos de música con impresoras 3D
"Imprimimos guitarras eléctricas, bajos, ukeleles, charangos, flautas dulces, y púas personalizadas", afirma Juárez Brizzi a iProUP. Reconoce que su clientela son músicos y algunos coleccionistas interesados. Según el empresario, esta tecnología "no solo es una ventaja tecnológica en cuanto a la fabricación de instrumentos musicales, sino que es un agente catalizador de impacto cultural y socioeconómico".
El ingeniero Manuel Galdeano Ruiz es profesor en la Universidad de San Juan, fundó SOLVO Taller 3D, para ayudar a empresas que no pueden importar piezas por las restricciones del Gobierno.
"Es un emprendimiento que busca ofrecer soluciones a través del diseño y la reingeniería, materializando productos mediante la fabricación por manufactura aditiva", afirma Galdeano Ruiz a iProUP.
Luego de su primer acercamiento a esta tecnología en 2014, el emprendedor lanzó en 2019 la startup que creció gracias al "boca a boca". "La afición pasó a convertirse en un emprendimiento y migró del ámbito hobbista a uno industrial, respaldado principalmente por mi formación y la evaluación de ciertas necesidades en ingeniería de mantenimiento", señala.
El emprendedor invirtió $24.000 en 2018 para comprar una impresora que todavía utiliza. Como fabrica "a pedido" de empresas, emplea diferentes tipos de plásticos..
"Dadas las necesidades de los clientes que se acercan al taller, los componentes fabricados deben poseer propiedades mecánicas y térmicas que resistan las condiciones de trabajo, razón por la cual la mayoría de los materiales utilizados son filamentos técnicos", resalta.
El ingeniero Manuel Galdeano Ruiz usa impresoras 3D para crear repuestos de autos o maquinaria que no se consiguen en el país
Así, el emprendedor ofrece servicios a empresas (Pymes, en su mayoría) que no encuentran componentes para su maquinaria, ya sea porque son obsoletos o imposibles de importar. También atiende a particulares que requieren repuestos de autos o máquinas cotidianas.