Cuatro organizaciones referentes del ecosistema emprendedor local, la Universidad Austral, Endeavor, Glocal y The Yield Lab, lanzaron un estudio para investigar el panorama del ecosistema agrotecnológico en el país.
La investigación contó con entrevistas en profundidad a 100 protagonistas de este sector – entre ellos – emprendedores, inversores y expertos de la industria.
Algunos de los actores que participaron son Agrofy, Agidea, Maqtec, Bioceres, Caiman, De campo a campo, Pago Rural, Kilimo, Acronex, Beeflow, Auravant y ZoomAgri.
Sobre el sector en el mundo
El Agtech es una industria que, si bien se encuentra en proceso de desarrollo, ha crecido en los últimos años. De acuerdo a una investigación de Startup Genome sobre los diferentes ecosistemas emprendedores del mundo, el Agtech creció un 14.6% anual en la última década, mientras que el promedio mundial fue del 4.5%.
En adición a lo anterior, según un informe publicado por Deloitte, se estima que el Agtech como mercado supera los 3 trillones de dólares en todo el mundo y emplea a 1 billón de personas.
Es un sector que ofrece oportunidades no sólo por la búsqueda constante de una mayor productividad de los recursos sino también, por la búsqueda hacia la sustentabilidad y el cuidado del medioambiente.
El mismo reporte proyecta que la población del planeta alcanzará los 10 mil millones de habitantes para 2050 y será fundamental indagar en alternativas para poder satisfacer sus necesidades básicas, en un marco de degradación ambiental y de recursos naturales limitados.
El incremento de la digitalización, impulsado por las nuevas empresas, ayudará al progreso y a la garantía de que la industria agrícola pueda cumplir con estas demandas y contribuirá a ser más competitivos a nivel global.
El estudio también observa los espacios de innovación para aplicar en la cadena agrícola y sugiere que las oportunidades para innovar en el sector se encuentran en todas las fases productivas:
- Marketplace y soluciones para el redireccionamiento de la cadena de valor, como la entrega de kits de comida, fuera de la granja, e-groceries (o compra digital de productos de almacén), la reutilización de los residuos de cultivos, la reutilización y la reducción de los residuos de alimentos;
- Big Data y Tecnología de precisión como el monitoreo en la eficiencia de los cultivos, como recopilación y análisis de datos, drones, sensores, sistemas de irrigación inteligentes e imágenes satelitales;
- Biotecnología para aplicar en otras industrias, como agroquímicos producidos biológicamente, bioingeniería basada en microbios, cultivos y semillas biológicos y bioplásticos;
- FoodTech o tecnología en alimentos como productos plant-based sustitutos de la carne y los huevos,
- Indoor Farming o agricultura de interiores, como la agricultura vertical, los datos de agricultura contenida y de plataformas tecnológicas, iluminación LED, acuicultura e hidroponía.
Aunque el surgimiento y desarrollo de los Ecosistemas AgTech en el mundo es bastante reciente, existen algunos ejemplos que se destacan por su avance y dinamismo y que, sin duda, pueden considerarse como los líderes a escala global.
Entre los ecosistemas AgTech más vibrantes del mundo no se puede dejar de mencionar al de Tel Aviv (Israel), Ámsterdam (Holanda), St. Louis (Estados Unidos), Nueva Zelanda y al de Piracicaba (Brasil).
Panorama local
El nacimiento y crecimiento de empresas de agtech representan oportunidad para los países en desarrollo y agro exportadores,como Argentina, que a través de la tecnología pueden ser competitivos en los mercados internacionales y reducir la brecha entre países desarrollados y en desarrollo.
Considerando que 4 de cada 10 dólares exportados por Argentina en 2019 fueron generados por maíz, trigo y soja, el país tiene una gran oportunidad para potenciar el sector a través del crecimiento de startups que brindan soluciones tecnológicas y de investigación para optimizar procesos y diseñar estrategias innovadoras diferentes a la agricultura tradicional.
Según el estudio realizado por la Universidad Austral, Endeavor, Glocal y The Yield Lab, el Ecosistema AgTech de Argentina es un ecosistema incipiente, con casi un centenar de startups, donde sólo 7 superan los cinco años de antigüedad.
Siguiendo esta línea, el 70% de las compañías entrevistadas facturaron menos de 1.5 millones de dólares durante el año 2018. De estas empresas, el 57% vende sus soluciones a nivel nacional. De acuerdo a los emprendedores, el mercado nacional es chico en sí mismo pero si es un buen punto de partida para probar la viabilidad del producto o servicio para luego salir al mundo.
Las soluciones desarrolladas por las startups apuntan, en su gran mayoría, a optimizar la gestión tranqueras adentro y marketplaces para el agro.
La incorporación de las mujeres al sector todavía es un desafío ya que solo uno de cada cinco de empleados es mujer, siendo aún menor la participación de ellas como fundadoras de las compañías donde la proporción se reduce a una de cada diez.
El sector presenta una baja tasa de inversión. Según ARCAP, el Agtech es uno de los receptores de capital más rezagados dentro del ecosistema de inversión de startups, y recibe sólo 8% de estas.
A la premisa anterior se agrega el LAVCA (Latin American Private Equity & Venture Capital Association), el AgTech se encuentra entre las industrias que tuvieron la menor cantidad de deals en 2019 – tan sólo 2% – mientras que las FinTech y HealthTech son las que lideran las inversiones, con 22% y 9%, respectivamente.
Algunas de las razones que lo explican son los largos ciclos de desarrollo, las ventas estacionales de los productos y las tasas de crecimiento más bajas en comparación con startups en otras industrias. A su vez, los capitales suelen ser bajos: el 91% de las compañías que recibió fondos lo hicieron por menos de 1 millón de dólares.
Sobre los emprendedores
De acuerdo al estudio, el 58% de los emprendedores tiene entre 30 y 39 años. Casi la mitad de los emprendedores entrevistados proviene de carreras de Ciencias exactas e Ingeniería aunque sólo el 16% del total de ellos son Ingenieros Agrónomos.
Esto comprueba que las soluciones aplicadas vienen dadas mayormente por industrias externas que buscan agregar valor al campo.
Además, el 80% de los emprendedores tiene experiencia previa en la industria pero solo el 45% tiene experiencia previa como emprendedor. Este hallazgo demuestra que el conocimiento previo que una persona tiene sobre la industria conduce al descubrimiento de oportunidades.
Por otra parte, es un sector altamente profesionalizado. El 80% de los emprendedores tiene formación universitaria o de posgrado.
Sugerencias para potenciar la industria
- La industria promete a futuro y ofrece oportunidades para emprender. Sin embargo, para poder aprovechar todo su potencial, estas son algunas sugerencias que podrían aplicarse para fortalecer el ecosistema Agtech en el país y el nacimiento de nuevas empresas:
- Promover la creación de instituciones dedicadas a la articulación del ecosistema emprendedor Agtech argentino.
- Fomentar el desarrollo de la inversión corporativa en el país a través de la creación de programas de capacitación destinados a empresarios con interés en invertir en startups. Desarrollar programas de incentivos que alienten este tipo de inversiones.
- Acercar a inversores ángeles al ecosistema agtech para potenciar su inversión en startups de estadio temprano de desarrollo.
- Capacitar al productor argentino en adopción de la tecnología, que aún es reticente a la hora de develar datos de la propia compañía para contribuir con soluciones que luego los beneficiarán. En este sentido hay una oportunidad interesante para que las startups argentinas mejoren la propuesta de valor para los productores agropecuarios, ayudándolos a entender cómo sus soluciones pueden agregarle eficiencia y potenciar su negocio.
- Incentivar el encuentro entre emprendedores y compañías establecidas del sector junto con dar mayor visibilidad a los casos de éxito y modelos de rol.
- Promover la formación emprendedora en las carreras afines a Agronomía y Ciencias básicas.
- Generar espacios de vinculación y trabajo conjunto entre emprendedores e investigadores.