Imaginate una ciudad cripto, en la cual la mayoría de los habitantes no sólo sepan lo que es un Bitcoin, sino que tienen algún ahorro en esta divisa y no hace falta explicarles que una stablecoin es una criptomoneda con valuación atada al dólar u otro activo.
En esta tierra imaginaria, además, se puede pagar todo con divisas virtuales. Con la ayuda de un QR es posible comprar en la panadería, el supermercado y hasta en una tienda de electrodomésticos. Los impuestos, obviamente, también se abonan con esta moneda.
No se trata de Buenos Aires, considerada por Forbes como una de las capitales Bitcoin del mundo debido a la gran aceptación como medio de pago y el ecosistema de empresas dedicado a esta industria. Ni siquiera está cerca: la separa 1.500 kilómetros.
Tampoco tiene grandes rascacielos, el ruido de una ciudad populosa ni las luces de las avenidas. Por el contrario, su paisaje se compone de montañas, aire puro y la tranquilidad de una aldea de ensueño.
Este paraíso cripto no sólo llama la atención local: inversores globales ya posaron su vista en él, apostando a empujar los límites de la nueva economía y la emancipación financiera. Justamente, la ironía del destino quiso que esta ciudad lleve el nombre de un libertador, conocido por cambiar la historia y cruzar fronteras. Bienvenidos a San Martín de los Andes.
El valle cripto
"Estimamos que el 60% de la gente de San Martín de los Andes conoce qué es un Bitcoin, Tether o Ethereum. Es moneda corriente y casi todos sus habitantes saben de qué se trata. Y la mayoría tiene algún ahorro en estos activos, que no paran de crecer", confía a iProUP Borja Martel, uno de los cofundadores de Lemon Cash, billetera nacida en la ciudad neuquina y que se propone ser un "Mercado Pago Cripto" al combinar pesos y divisas virtuales para los pagos diarios.
La aplicación se hizo fuerte en su ciudad natal y, según el directivo, el seis de cada 10 comercios minoristas ya aceptan su QR: desde los negocios barriales, hasta los supermercados y los proveedores de excursiones turísticas de la zona, gracias a acuerdos con las cámaras.
"Podés ir al súper, alquilar equipamiento hacer esquí o kayak, comprar en la verdulería, panadería, heladería, chocolatería y hasta en un corralón. También podés alquilar una bici o abonar en restaurantes", asegura.
El "boom cripto" en la ciudad llega al nivel de que el 40% de los comercios que procesan pagos con Lemon Cash a través de un QR o terminal de pago móvil convierten fondos a criptomonedas.
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El 40% de los comercios de San Martín de los Andes que aceptan Lemon Cash ahorra en criptomonedas
La billetera además está trabajando en la integración de los pagos interoperables de Transferencias 3.0. "Tenemos el OK de COELSA (la cámara compensadora) y en el segundo semestre ya estaremos activos", afirma.
Tal como adelantó iProUP en exclusiva, la firma prelanzó su tarjeta prepaga que utiliza los saldos tanto en pesos, como en Bitcoin y otras divisas digitales, para abonar en cualquier local que acepte Mastercard. Y acaba de introducir un servicio que ofrece intereses por el saldo en criptomonedas estables que tienen paridad con el dólar.
Pero la empresa, además, está fomentando la creación del "Patagonia Crypto Valley", es decir, un hub de innovación basado en blockchain, divisas digitales y otros desarrollos que podrían transformar a San Martín de los Andes en un "laboratorio a cielo abierto" de tecnologías disruptivas.
Así, podrían crear la ciudad más futurista de la Argentina y que se convierta en un playground de criptomonedas, Internet de las Cosas, Inteligencia Artificial, entre otras innovaciones.
Lemon Cash acaba de lanzar un servicio que da intereses por los "dólares digitales" de saldo en la
plataforma
San Martín de Los Andes, además, tiene una energía especial para estos desarrollos. Por ejemplo:
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Christian "Nubis" Bruno, uno de los primeros bitcoiners argentinos y creador de Bitex.la, nació en la ciudad
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Wenceslao Casares, cofundador de Patagon y del criptobanco Xapo tiene casa en ese paraje y hasta lanzó una billetera cripto (que se llamó curiosamente Lemon)
Un Silicon Valley en la misma Patagonia. De hecho, la zona tiene paisajes similares al centro de innovación global por excelencia.
Inversiones y partnerships
"Es una idea que a nosotros nos encanta", reconoce a iProUP Ignacio Plaza, partner y fundador de Draper Cygnus, el capítulo argentino del fondo de Tim Draper, conocido por su apuesta a Bitcoin y las tecnologías descentralizadas, que lideró una ronda de u$s1 millón en Lemon Cash.
El ejecutivo, quien además es presidente de la Cámara Argentina de Fintech, confirma a este medio que están en sintonía con crear "una especie de smartcity en San Martín de los Andes, una ciudad de mucha experimentación".
"Nuestro foco son las finanzas: pagos, inversiones, ahorro, préstamos, seguros", señala Plaza. Asegura que las criptomonedas permiten crear "protocolos globales, pero implementaciones de servicio a un determinado mercado".
Este nuevo mundo descentralizado permitirá a San Martín de los Andes convertirse en un hub de innovación cripto que dé servicio a cualquier país, con las características particulares que indiquen las autoridades regulatorias de cada mercado.
Según el ejecutivo, el papel de Draper Cygnus es "acercar a las partes". Y no es la primera startups de innovación local en la que invirtió: también apoya a Auth0, Satellogic, Stämm, Skyloom, Ripio y Signatura (contratos inteligentes), entre otras.
Ignacio Plaza, de Cignus Draper, fondo que invirtió en Lemon Cash
Para esta gran smartcity, Martel asegura que el objetivo es "traer gente de la industria" a San Martín de los Andes para que "entiendan lo que hacemos, comprendan las herramientas y la innovación se esparza como un virus".
"Estamos firmando convenios con universidades, como la UCA e ITBA, para diseñar pruebas piloto. Otras empresas, como Ripio, RSK o Bitso, pueden desarrollar y probar aquí sus productos. Compañías de todo el mundo pueden testear sus tecnologías para tener exposición a la vida real", anticipa el cofundador de Lemon Cash.
Con respecto a las alianzas con instituciones educativas, Plaza añade que desde el fondo que lidera tratan de "ayudar a chicos argentinos con becas para que vayan a la Draper University".
Según el directivo, buscan " perfiles que tiendan a fundar empresas o se asocien con proyectos existentes, ya que hoy tenemos mucho talento técnico en el país pero no de negocios".
"Tim siempre dice: andá a cualquier universidad para conseguir empleo o vení a la Draper University a aprender en unos meses cómo fundar una compañía y crear un montón de empleos", remarca el directivo.
En este sentido, las cifras de esta academia son más que elocuentes:
- Más de 1.000 egresados
- Crearon más de 3.100 trabajos
- Levantaron u$s240 millones de fondeo
- Tramitaron 22 patentes
- Una de las empresas se convirtió en unicornio
De esta forma, con el sector productivo y el académico, sólo restaría el apoyo estatal para cerrar el "Triángulo de Sábato", esquema de desarrollo cientítico-tecnológico propuesto por el físico Jorge Alberto Sábato y sobrino del reconocido escritor.
"Draper Cygnus es parte del FONCE, donde está la parte privada y la pública", señala Plaza en alusión al Fondo de Aceleración del gobierno nacional que ofrece reembolsos a las firmas que inviertan en al menos tres startups argentinas.
Por otro lado, el ejecutivo de Draper Cygnus remarca que iniciativas como el Crypto Valley fomentan "una Argentina más federal, con más oportunidades y orientada a una parte importante del futuro, ya que se apoya en el cambio de la infraestructura financiera".
Además, remarca que si cripto progresa a nivel local, "habrá un capital que fluirá hacia el país y retroalimentará todo, ya que estos fondos se pueden transformar en conectar a la gente y generar efectos en red".
"Hay que minar el futuro. Así como los mineros de Bitcoin ejecutan fórmulas, hay que minar datos de la naturaleza con inteligencia artificial y generar nuevos modelos para crear productos de manera sintética en lugar del esquema actual de extracción de recursos", dispara Plaza.
El objetivo a largo plazo del CryptoValley apunta a que se combinen la IA y el bigdata para que San Martín de Los Andes se convierta en una playa de pruebas de los autos autónomos, tal como ocurre en San Francisco. Quizás, hasta gigantes como Google, Apple y hasta las bigtech chinas puedan testear sus vehículos en la Patagonia.
No suena tan descabellado. Muchos estiman que, para fin de esta década, nadie tendrá un auto propio ya que será más conveniente usar el autónomo.
De esta forma, el Sur Argentino quiere ser la nueva meca de la tecnología en la región gracias al impulso de la blockchain y las nuevas posibilidades asociadas a la economía digital. Un Crypto Valley que, además de paisajes de ensueño, sea la sede de las invenciones que le den forma al futuro.
