En la Argentina hasta 1883 -al igual que en China- se usaba la Plata acuñada en el Cerro Rico, la ventaja como dinero mercancía era que en el resto de los países se permitía el intercambio de monedas de plata u oro de forma estándar debido a su valor intrínseco.
Este dinero convivía con el dinero fiduciario de las provincias, pero ya en 1881 se implementó el dinero billete de deuda federal que en principio era respaldado en metálico, es decir era deuda convertible en oro y plata, esto duro poco ya que al Gobierno Federal se le acabaron las reservas de metálico y se decidió la salida de la convertibilidad del peso nacional.
Así se ingresó en 1885 a un modelo flotante de dinero nacional respaldado solo por la confianza (dinero fiduciario), y si bien en 1890 se crea la Caja de Conversión de la Argentina para manejar las reservas de metálico y poder controlar la relación entre la emisión de billetes y las reservas buscando mantener la paridad con el patrón oro que imponían las potencias mundiales para el comercio, la Argentina solo pudo apegarse a la convertibilidad y el patrón oro durante los períodos 1899-1914 y 1927-1929, es decir cuando las circunstancias de la balanza de pagos eran favorables al país y generaban un ingreso de oro al sistema.
Mientras que esas circunstancias eran fuertemente desfavorables la conversión a oro se suspendía dejando que el valor del peso papel fluctuara libremente en el mercado cambiario. Esta alternancia con las convertibilidades tuvieron su final en la década del 1930 cuando el mundo se fue desacoplando del estricto Patrón oro hasta la conformación de los Acuerdos Bretton Woods en 1944.
Con el inminente fracaso de los acuerdos Bretton-woods, la devaluación en la Argentina había llegado a tal punto que para 1970 las cantidades de dinero billete necesarias para las transacciones diarias ya no entraban en las máquinas de calcular de la época.
Por ello se decidió crear el peso ley que equivalía a 100 pesos nacional, por lo cual la moneda argentina perdió 2 ceros, ya que los billetes de 100, 500, 1000, 5000 y 10 000 pesos nacional fueron convertidos a 1, 5, 10, 50 y 100 Pesos Ley respectivamente.
Siguiendo la crisis internacional, la devaluación y la inflación hicieron que en 1981 se llegara a emitir un billete de 1 000 000 Pesos Ley.
La moraleja es que el valor de nuestra moneda nacional fue perdiendo valor de forma consistente durante más de 100 años, a tal punto es el rendimiento negativo frente al dólar de EE.UU. que desde 1885 hasta nuestros días se le han tenido que sacar 13 ceros a la moneda.
La evolución del dinero
Si bien el dinero mercancía o metálico ha demostrado ser más efectivo como reserva de valor que el dinero por decreto o fiat, Distintos factores -como la intervención estatal excesiva- hicieron fracasar su adopción en el siglo XX y la realidad muestra que ha resultado poco útil como medio de intercambio en la era de internet.
Bitcoin nació como respuesta a este dilema para lo cual se trabajó durante casi 5 décadas en crear el conjunto de conceptos y tecnologías que componen Bitcoin, quizás esta sea una de las razones por la que Satoshi Nakamoto nunca se ha dado a conocer, tal vez se sintió como uno más de los genios que han permitido esta evolución tecnológica y su posterior impacto socio-económico.
Estos son algunos de los trabajos que lo precedieron:
Reusable proof of work de Hal Finney -2004-, Design of a secure timestamping service with minimal trust requirements de Xavier Serret-Avila, Henri Massias y Jean-Jacques Quisquater -1999-, b-money de Wei Dai -1998-, Secure Property Titles with Owner Authority de Nick Szabo -1998-, HashCash de Adam Back -1997-, Secure names for bit-strings de Stuart Haber y Scott Stornetta – 1997- Improving the efficiency and reliability of digital time-stamping de David Bayer, Stuart Haber y Scott Stornetta – 1993-, How to time-stamp a digital document de Stuart Haber y Scott Stornetta – 1991-, Pretty good privacy PGP de Phil Zimmerman -1991-, Digicash de David Chaum -1989-, Computer Systems Established, Maintained, and Trusted by Mutually Suspicious Groups y Blind Signature de David Chaum -1982-, Protocols for public key cryptosystems de Ralph Merkle -1980-, Secure Communications over Insecure Channels de Ralph Merkle -1978-, New directions in cryptography de Whitfield Diffie y Martin E. Hellman -1976-, A Protocol for Packet Network Intercommunication de Vinton G. Cerf y Robert E. Kahn -1974-, An introduction to probability theory and its applications de William Feller -1957-.
Mientras que la moneda nacional argentina se ha devaluado constantemente y ha perdido 13 ceros contra el dólar en más de una centuria, Bitcoin por el contrario ha elevado su valor consistentemente ganando 7 ceros contra el dólar en tan solo 11 años.
En marzo de 2010 cuando se lanzó el primer Exchange de bitcoin, llamado bitcoinmarket, el valor de intercambio era de 0.003 dólares por bitcoin y como en ese entonces un dólar costaba 3.84 pesos, ¡un bitcoin costaba 0.01 pesos!
Hoy el valor de intercambio fluctúa entorno a los 30 mil dólares o 5 millones pesos por bitcoin. En conclusión, el bitcoin como reserva de valor a largo plazo ha ganado 8 ceros en 11 años contra el peso.
"La raíz del problema de la moneda convencional es toda la confianza que se requiere para que funcione. Se debe confiar en que el banco central no devaluará la moneda, pero la historia de las monedas fiat está repleta de violaciones de esta confianza. Se debe confiar en los bancos para que guarden nuestro dinero y lo transfieran electrónicamente, pero estos lo prestan (a nuestro dinero) en oleadas (discrecionalmente) formando burbujas crediticias y guardando apenas una fracción de las reservas (riesgo sistémico). Tenemos que confiarles nuestra privacidad, confiar en que no permitirán que los ladrones de identidad vacíen nuestras cuentas". Satoshi Nakamoto
*Alberto Vega es un ejecutivo de experiencia en empresas cripto internacionales, como BitPay. Actualmente, es fundador y co-CEO de Bithan, una firma argentina que ofrece soluciones para empresas de tesorería en Bitcoin