A la espera de que dé a luz la demorada nueva ley, varias empresas vinculadas al sector de la Economía del Conocimiento venían mudando sus matrices a Uruguay o a países de Europa o Asia, que les resultan competitivos en materia impositiva. En particular, aquellas que tienen clientes en el exterior.
El mayor problema que padecen en Argentina es que cobran sus desarrollos en dólares pero, al ingresar esas divisas al país, reciben pesos al tipo de cambio oficial, lo que les significa una pérdida de competitividad cambiaria.
En este marco, esta semana trascendió en cámaras empresariales cercanas al Gobierno que el Ministerio de Desarrollo Productivo pondrá el acelerador con una medida a favor de estas compañías. Concretamente, la iniciativa apunta al reparto de fondos de fomento para distintos actores.
Así, los estudios contables y jurídicos que tenían en el freezer a sus departamentos especializados desde hace ya seis meses, los volvieron a poner en marcha a raíz de que porque reaparecieron las consultas de compañías la industria del conocimiento.
La medida que anticipó el mercado
Este jueves, el Boletín Oficial informó sobre la creación del Programa Soluciona con el objetivo de reactivar al sector de la Economía del Conocimiento con "asistencia financiera".
"Lo particular del Programa es que ofrece Aportes No Reembolsables (ANR) con tope de $15 millones por proyecto, que serán abonados en tramos y siempre que haya disponibilidad presupuestaria", asegura a iProUP Leonardo Fernández, director de Impuestos de Deloitte.
Según pudo conocer iProUP, el programa tiene $550 millones aprobados para distribuir entre este año y el que viene, con $313 millones hasta diciembre próximo y el resto para el 2021 pero que será ajustable según la inflación. Como promedio, desde la Secretaría de Industria calculan que el dinero servirá para alrededor de 20 partidas de $15 millones cada una, que podrían variar según los montos a solicitar.
Gabriel Hermida, de Auren Argentina, agrega a iProUP que la decisión del Gobierno de inyectar fondos en iniciativas de empresas vinculadas con esta rama de actividad busca anticiparse a una ley que aún no pudo ser promulgada, más allá de que cuente con media sanción de Diputados.
"El proyecto que ahora pasa al Senado también crea un Fondo Fiduciario para la Promoción de la Economía del Conocimiento (FONPEC) con el objeto de impulsar el desarrollo científico y tecnológico financiando las actividades de las Pymes del sector y los nuevos emprendimientos que se generen dentro del ámbito de la Economía del Conocimiento", recuerda Hermida.
En el sector afirman que el programa quiere evitar la fuga de empresas, inversiones y talentos
Por su parte, Lucas Gutiérrez, del estudio Lisicki, Litvin & Asociados, señala a iProUP que el Gobierno "pisó el acelerador para poner en marcha este sector ya que tomó nota de la gran fuga de talentos que se está produciendo".
El experto revela que a raíz del súper-cepo, la falta de incentivos, reglas de juego cambiantes, falta de seguridad jurídica y otras complicaciones, las empresas de esta rama de actividad, caracterizadas por su gran cantidad de talentos "deciden internacionalizarse, especialmente las de desarrollo de software".
"Las más grandes se están relocalizando en Uruguay, pero también en países de Europa y Asia. Mientras que en la Argentina dejan una sucursal o compañía vinculada, las matrices se van fuera del país, y desde el estudio las acompañamos en ese proceso de internacionalización", explica Gutiérrez.
Para el especialista, "el proceso es imparable". Sin embargo, asegura que existe una luz al final del túnel, ya esta semana comenzó "a recibir consultas de empresas interesadas en volver a tener un asesoramiento profesional para aprovechar los beneficios que se estarían aprobando". Es decir, compañías que se quieren quedar en Argentina si las condiciones mejoran.
"Dos o tres días después, el Gobierno sacó la creación del Programa Soluciona. El mercado se había adelantado a la jugada, que es bienvenida", revela Gutiérrez. Por otra parte, Hermida recuerda que el proyecto de ley que estudia el Senado está dirigido especialmente a las pequeñas y medianas empresas. Y remarca que los beneficios emergentes conforman un "combo" que incluye:
- "Un bono de crédito fiscal transferible por única vez del 70% de los aportes de las Contribuciones Patronales efectivamente pagadas y otro bono de posteriores incorporaciones de personal"
- "La reducción del 60% del monto total del Impuesto a las Ganancias en cada ejercicio y deducción en este tributo de los gravámenes análogos pagados o retenidos en el exterior, además de la eximición de percepciones y retenciones del IVA para los exportadores"
Según Hermida, ambos puntos son interesantes, pero se quedan cortos frente a los mejores incentivos que están ofreciendo otros países que "apuntan en serio a atraer inversiones o a retener a los empresarios y a los talentos".
Otros gobiernos se muestran muy interesados y hacen todo lo posible "para que ni los profesionales ni las compañías piensen en emigrar a otros lugares en el mundo que les proponen condiciones para desarrollarse mucho más atrayentes", completa.
Los números de la promoción
Argentina es un país de baja tasa de nacimiento de empresas: una sola empresa (formal) cada 2.326 habitantes. En Brasil y Chile, ese índice es 347 y 125 respectivamente, según Observatorio Pyme.
"Esta situación desfavorable se viene agravando desde 2011, momento a partir del cual se cierran al año más empresas que las que nacen", indica a iProUP Silvia Tedin, socia del estudio SMS-San Martín, Suárez y Asociados.
Por otro lado, las compañías empiezan sus actividades con sólo tres empleados en promedio y demoran unos siete años en duplicar esa cantidad, según informa la Secretaría de Transformación Productiva. "En síntesis, se verifica un panorama general de estancamiento/retroceso en el campo de la creación de empresas, con lenta expansión del empleo y baja competitividad", puntualiza Tedin.
De acuerdo con la experta, "la experiencia internacional señala que el otorgamiento de incentivos fiscales y crediticios tiene un impacto positivo en la tasa de generación de compañías".
La industria del software es el caso testigo: al haber tenido su régimen de promoción, mostró mejores cifras de generación de empresas y empleo
Es paradigmático el caso de éxito de la industria del software y servicios informáticos (SSI), con muchas empresas beneficiarias del régimen promocional que existió desde 2004 hasta diciembre 2019.
Según las últimas cifras del Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial del Ministerio de Trabajo, en 2016:
- Existían 4.849 empresas del sector
- Es decir, un 37% más que en 2007
- Su dotación alcanzaba los 101.700 trabajadores
- La mayoría trabajaba en firmas de hasta nueve empleados
Mientras la tasa de aumento de la cantidad de empresas del sector en el período citado fue del 3% por año, la tasa de incremento del empleo se ubicó por encima del 4% anual.
Además, se trata de un sector que, además de empleo, es un fuerte generador de divisas: experimentó ventas totales por u$s3.283 millones. El 52% de ese total correspondió a exportaciones, según el último reporte de Industria del Software y Servicios Informáticos de la CESSI difundido en abril.
"Todo esto pone de manifiesto la distinta performance histórica de la industria SSI (promovida) cuando se la compara con el resto de los sectores productivos no promovidos o, incluso, desalentados a través de la aplicación de determinados impuestos", enfatiza Tedin.
La nueva asistencia financiera
El Programa Soluciona no está dirigido sólo a empresas con actividades de la economía del conocimiento. También apunta a sectores tradicionales que incorporen nuevas tecnologías para el desarrollo de productos o servicios, mejorados o nuevos, que favorezcan la reactivación económica.
El Programa enumera actividades de desarrollo de software y servicios informáticos y digitales, producción y postproducción audiovisual, biotecnología, nanotecnología, industria aeroespacial y satelital, ingeniería e Industria 4.0, entre otras.
También remarca dentro de sus objetivos "apoyar a los sectores más afectados por la pandemia: turismo, gastronomía, automotriz, textil, transporte y logística, entre otros".
Esos sectores podrán incluir en los proyectos soluciones innovadoras para escalar o modificar la producción, optimizar la productividad y competitividad, aumentar la comercialización, mejorar la calidad, y certificar productos y servicios.
"Creo que este debe ser el objetivo macro de los proyectos que se presenten para obtener la aprobación de la autoridad de aplicación", considera Fernández, de Deloitte.
Contenido de los proyectos
Nogueira afirma que los proyectos deberán responder al "desarrollo o implementación a escala piloto y prototipo de soluciones tecnológicas e innovadoras que propicien la actividad industrial y reactivación económica post pandemia".
Y agrega que "aunque que tengan como fin lo expresado para empresas de sectores generales, deberán encuadrarse dentro de los siguientes ejes:
- Modificación de sus procesos productivos a través de esfuerzos relevantes de desarrollo tecnológico e ingeniería
- Implementación de nuevos procesos o modalidades de producción
- Incorporación de tecnologías innovadoras para mejorar la comercialización u optimizar modelos de negocios, de forma de adecuarlos a las nuevas realidades generadas por la pandemia
De este modo, cada compañía podrá presentar un único proyecto en el marco del Programa. Los fondos recibidos pueden utilizarse para los siguientes destinos, siempre que las firmas no hayan gozado de otros beneficios del Ministerio de Producción:
- Maquinarias, equipos, mobiliarios, adecuación de obras civiles edilicias requeridas para la ejecución del proyecto. El monto afectado por "obras civiles edilicias" no podrá superar el 10%
- Patentes, licencias y marcas
- Insumos, materia prima, servicios profesionales de asesoramiento técnico). El monto afectado bajo el concepto de "servicios profesionales" no podrá superar el 35%
- Certificaciones y habilitaciones
- Capacitación y reentrenamiento de recursos humanos relacionados con las actividades del proyecto
Además, la norma enumera aquellos destinos que no se pueden financiar con el Programa Soluciona:
- Compra o alquiler de inmuebles
- Rodados
- Obligaciones salariales, previsionales, financieras o impositivas.
- Pago de servicios públicos, impuestos, tasas y contribuciones.
- Obligaciones de la sociedad, ni aquellas que importen la participación, directa o indirecta, en el capital social de una sociedad distinta
- Reestructuración de deudas
- Inversiones realizadas con anterioridad
- Ferias, diseño y armado de stands
"A los efectos prácticos, es importante resaltar que las solicitudes de aprobación de desembolsos deberán ser presentadas hasta el 30 de noviembre de 2020", concluye Nogueira.
*Dolores Olveira - [email protected]