Habrá 21 millones de Bitcoin (BTC) ¿Y después? Esa es la pregunta del millón, ¡o más bien de los 21 millones! Una de las características clásicas de bitcoin es que la cantidad de monedas está contada: 21 millones, que a su vez son divisibles en 100 millones satoshis, la unidad más pequeña.
¿Por qué el número exacto de 21 millones? En realidad, nadie lo sabe con seguridad. Satoshi Nakamoto, creador de la criptomoneda, nunca lo explicó. Lo único que quedan son tan sólo especulaciones.
Una de ellas se basa en el estándar del IIEEE para aritmética en coma flotante. Esto es un norma que se utiliza para simplificar las cosas. Según algunos expertos, todo se trata de precisión computacional.
Existe también una teoría que explica el asunto desde el punto de vista de las matemáticas: seis bloques por hora, 24 horas, 365 días, ciclos de 4 años. Luego de cada ciclo, la recompensa se reduce: 50 + 25,5 + 12,5 + 6,25 + 3,125... De algún modo, el número 21 millones se ajusta perfectamente a este esquema.
Aunque esta podría ser más una explicación técnica demasiado compleja como para entender la filosofía de una moneda cuyo espíritu es revalorizarse con el paso del tiempo. Según un correo electrónico compartido por Mike Hearn, Satoshi tenía la intención de alinear el precio de la unidad con las monedas tradicionales.
Esto sólo podría lograrse conociendo el tamaño de la comunidad bitcoin. En el correo Satoshi reconoce la dificultad de poder predecirlo. "!Si bitcoin se mantiene como un nicho pequeño, costará menos por unidad que las monedas existentes", escribió. Pero luego menciona que si la divisa toma una porción importante del comercio mundial valdría mucho más.
Los 21 millones de bitcoins se terminarán de minar para el año 2140
Al final, y ante la enorme dificultad que significa poder predecirlo, escogió un punto medio: 21 millones bitcoins por 100 millones de satoshis. Pero retomando el tema original, una vez que se mine el último bitcoin ¿qué sucederá? Este es uno de los detalles que más llamó siempre la atención de la criptomoneda, que a diferencia de otras, se autoimpuso este número límite.
Tras más de 12 años de minado ya se han conseguido sacar de la red blockchain nada menos que el 90% de las monedas. Satoshi mantuvo la oferta fija de modo tal que logre mantener constante su valor, algo que logró. Pero ahora que sólo queda un número limitado de monedas para minar, comienzan "minarse" las dudas sobre qué sucederá cuando se extraiga el último bitcoin.
Satoshi puso un tope rígido o límite máximo de 21 millones a la oferta, regulándola a través de un algoritmo en su código fuente. La oferta limitada lo convertía en un bien escaso, razón que ayudaría a aumentar su precio en el futuro, como sucede con otros activos tales como el oro.
Cada 10 minutos ve la luz nuevos bitcoins en el mercado. Sin embargo, el algoritmo es tal que la cantidad se reduce a la mitad cada cuatro años, mediante un proceso llamado "halving", lo cual implica que los mineros reciben un 50% menos de bitcoins por verificar las transacciones.
Los halvings tienen lugar cada 210.000 bloques (aproximadamente cada cuatro años). Se calcula que ya se han acuñado 19 millones de bitcoins, por lo que sólo quedarían 2 millones y los expertos predicen que los restantes se terminarán de minar para el año 2140.
Todo esto implica un trastorno para los mineros, ya que la recompensa por bloque se reduce también cada cuatro años. Dado que las recompensas se bajan a la mitad cada cuatro años, el precio de la operación acabará superando las recompensas para los mineros. Esto podría convertir a la minería en un modelo de negocio insostenible.
El algoritmo de Bitcoin fue pensado para que su valor aumente con el tiempo
El modelo de libro mayor distribuido es el corazón de toda criptodivisa: si el número de transacciones aumenta en la red en el futuro, existe la posibilidad de que la velocidad de las transacciones disminuya. El uso y producción de criptomonedas requiere de enormes centros de datos que conllevan un enorme consumo energético gran parte (por no decir todo) del tiempo.
Si el número de transacciones llega a disminuir, existe la posibilidad de que Bitcoin se convierta en un activo de reserva. Esto hará que queden fuera del circuito los pequeños comerciantes minoristas y sean sustituidos por grandes actores institucionales, quienes posiblemente logren aumentar las tasas de transacción y encarecer las operaciones.
Todo esto puede afectar aun más a la escasez de la moneda y su lógica influencia en el precio. Incluso el miedo a quedarse afuera (FOMO) podría implicar una ansiedad aún mayor por comprar todos los activos y las personas que tienen bitcoin estarán en una gran posición para vender.
Después de realizar este análisis sobre por qué 21 millones, podemos llegar a la conclusión de que Satoshi subestimó su propia creación. Especuló con un número que quedo evidentemente muy por debajo del valor de circulación de Bitcoin. Quizás no fue consciente o no tuvo fe de las dimensiones que alcanzaría su propia creación con el tiempo.
El número de circulación e incluso de aceptación que va logrando con el tiempo bitcoin no cabe dudas de que sorprendería a su propio mentor. Al precio de hoy, un dólar es poco más de 0,00001 BTC. Es posible que en 10 o 20 años un Satoshi valga más de un dólar, quién lo sabe.
No es casualidad entonces que una mesera de un bar de Palermo fuera sorpendida al recibir su propina en bitcoin, junto con el consejo de su cliente: "Guardalo 20 años". A todo esto, cabe preguntarnos cuántas personas están dispuestas a esperar tanto tiempo para ver crecer sus frutos en un mundo en el que todo corre a la velocidad de la luz.
Lo cierto es que hasta aquí hay más especulaciónes que certezas. Dudas, preguntas que intentamos develar con análisis técnicos, discusiones en foros o incluso y por qué no teorías conspirativas de todo tipo. La pregunta nos lleva a más interrogantes y nos abre una puerta para pensar que quizás en la vida nada es infinito ¿salvo bitcoin?
*Por Mariela Januszewski, contadora pública especializada en blockchain y finanzas digitales, profesora UTN y autora de "Criptosia 20.22" y "Las aventuras de Bitman"