"No todo lo que reluce es oro", advierte una frase popular para alertar a incautos e indicar que siempre existe un costado negativo. Desde el ying y yang de la cultura china, hasta los dos lados de la fuerza de Starwars. Lo mismo ocurre con las finanzas personales.
Los instrumentos que permiten ganar dinero, más allá de aquello que los transforman en apuestas tentadoras, también acarrean un lado peligroso, representado en los riesgos que los componen y no todos conocen.
Contar con esta información es muy importante al momento de tomar decisiones acerca de qué hacer con el dinero, en especial en un contexto complicado para el bolsillo de los argentinos.
Inversiones: qué riesgos tener en cuenta
La mayoría de los argentinos se inclina por tres opciones del mercado para resguardar el valor de sus pesos:
- Plazo fijo
- Fondos Comunes de Inversión Money Market
- Dólar
Si bien estas son las herramientas que, a priori, acarrean el menor riesgo y están en el radar de los ahorristas conservadores, también tienen puntos débiles que deben ser evaluados al momento de definir cuál será el monto que se les destinará.
En el caso del plazo fijo tradicional, si bien fue beneficiado con una suba de tasas que elevó su rendimiento, tiene una contra muy clara: demanda que el dinero sea colocado por un mínimo de 30 días, periodo en el cual no se podrá contar con esos fondos de forma inmediata ante un imprevisto o para refugiarse en el dólar; si el peso pierde valor.
Este inconveniente se acentúa en la modalidad UVA: si bien paga una cifra similar a la inflación de tres meses más un premio cercano al 1%, exige una permanencia mínima de 90 días para cobrar ese monto sin "penalidades". Una eternidad para el ecosistema financiero argentino.
Por su parte, apostar a FCI Money Market, como el que brinda Mercado Pago y administrado por expertos del BIND, permite contar con la plata de manera inmediata. Su punto débil es el rendimiento: 64% anual, negativo en comparación con el alza de precios informado por INDEC, que acumuló 95% en 2022 y amenaza con superar las tres cifras si mantiene el ritmo con el que inició el año.
La apuesta por el dólar: el clásico que no pasa "de moda"
El clásico es apostar al dólar, pero muchos le escapan a esa opción al considerar que está "caro" y optan por las tasas en pesos. Quienes recurrieron al mercado paralelo, perdieron frente a otras alternativas: el blue saltó a $383 en enero y se desinfló en febrero a $375 (-1,6%), lo que marca ciertos riesgos de operar en un mercado informal y de bajo volumen.
Sin embargo, Alejandro Bianchi, creador de la plataforma Asesor de Inversiones, advierte a iProUP que el objetivo de corto plazo del billete estadounidense es "alcanzar los $450 por unidad". "Hasta tanto llegue ese nivel, es preferible mantenerse en dólares y, recién habiendo realizado el overshooting en esa zona, aprovechar las altas tasas en pesos", asegura el experto.
Además, remarca que "post elecciones y hacia fin de año, probablemente se gatille una nueva disparada del billete, más cercano a la zona de $600", alerta el especialista.
Pero acopiar "verdes" también acarrea un problema que no es para nada menor, pero que muchos ahorristas no consideran: la pérdida de valor de la moneda estadounidense por la inflación de ese país.
Los expertos Diego Martínez Burzaco, Head of Research & Strategy del broker Inviu; y Nicolás De Giovanni, gerente de Finanzas Corporativas de NaranjaX, explican a iProUP que una alternativa para evitar este problema es volcarlos al Standard & Poor's 500 (S&P 500), uno de los índices bursátiles más importantes de los Estados Unidos y cuyo rendimiento promedio es del 7% anual.
A esta opción se puede acceder desde Argentina gracias a los Certificados de Depósitos Argentinos (CEDEAR), una representación en la Bolsa local de instrumentos que operan en Wall Street.
Obligaciones negociables: qué son y cómo se operan
Las Obligaciones Negociables (ON) son un instrumento que cada día capta a más inversores, que optan por las emisiones de deuda de las compañías para dolarizar sus tenencias.
Agustín Monteverde, de Monteverde & Asociados, indica a iProUP que es una muy buena alternativa de inversión y pondera que "presentan la ventaja del riesgo privado y no público".
En este sentido, desde la consultora de negocios Wise advierten a iProUP una contra: en líneas generales, las ON no son activos líquidos. En caso de querer deshacer la posición ante un imprevisto, va a llevar un tiempo venderlas en la plaza secundaria, y se obtendrá un valor considerablemente menor del desembolsado. Por tal motivo, aconsejan que son recomendables para el largo plazo.
"Además, el que compra tentado con la tasa en pesos o en dólares y piensa quedárselas hasta vencimiento debe analizar que sea un buen crédito para no toparse con problemas de pago", remarcan. En este marco, desde TSA Bursátil indican a iProUP que el vencimiento máximo recomendado para invertir es de dos años.
La mayoría de los inversores argentinos mantienen como base tres herramientas para resguardar sus ahorros: plazo fijo, fondos comunes de inversión, y dólares
Invertir en Bitcoin: qué riesgos plantea
Bitcoin (BTC) está cerca de su próximo halving, hito previsto para mayo de 2024 en el que el ritmo de emisión desciende a la mitad. Charles Edwards, fundador de Capriole Investments y criptoanalista, lo considera el evento más importante de la historia y se espera que motive una disparada de su precio por encima de los u$s100.000 por unidad.
Pero antes de llegar a esa cifra récord (si es que la alcanza), el BTC atravesará turbulencias, fruto de su naturaleza volátil y el complejo contexto internacional. Esto transforma a esta criptomoneda en una inversión no aconsejada para quienes no poseen tolerancia al riesgo.
El experto Camilo Rodríguez subraya a iProUP que, si bien se espera una lateralización (movimientos dentro de una franja acotada de precios), se generarán "saltos abruptos" en 2023, con esporádicas tendencias alcistas que derivarán en espirales a la baja.
Los inversores tienen una gran cantidad de herramientas a disposición, aunque resulta difícil predecir el rendimiento. Por este motivo, una cartera diversificada es la clave. Cada persona debe analizar las opciones que se adecuan a la tolerancia al riesgo que está dispuesta a asumir para evaluar cuáles incluir (y en qué porcentaje) en su portafolio.
"La forma más correcta de acercarse a las inversiones es siempre con una mezcla de educación y práctica. Saber bien lo que se está haciendo y entender si el riesgo que se está asumiendo es el adecuado para cada perfil. Eso no tiene precio", concluye Bianchi.