Desde 2020, la transformación digital avanza con una fuerza imparable en todo el mundo. En el sector legal tuvo un gran impulso: la adopción de la tecnología evidenció su rol significativo al momento de desarrollar la práctica profesional de forma óptima y eficiente a través de la virtualidad.
Los últimos años, las legaltech, soluciones tecnológicas para los profesionales del derecho, experimentaron en la Argentina un importante crecimiento en cuanto a la creación y desarrollo de servicios. Se trata de un terreno lleno de oportunidades para aquellos que estén abiertos a la adaptación y a la capacitación permanente.
Es posible afirmar que los avances tecnológicos en nuestro sector estarán marcados por la inteligencia artificial, la nube, un mayor uso del blockchain, con la mirada puesta en la automatización de los contratos, de los procesos y la optimización de las operaciones.
En ese sentido, la Inteligencia artificial (IA) está teniendo y tendrá un papel preponderante, ya que facilita labores como la planificación de proyectos, la elaboración de documentos e incluso la interacción entre el abogado y cliente, todo ello con un alto nivel de precisión.
El avance en el uso de los algoritmos
Además, el uso de algoritmos para analizar datos y detectar patrones para generar predicciones legales seguirá creciendo.
El Machine Learning es una de las tecnologías que más disrupción tuvo en el sector legal ya que puede ser aplicado a innumerables procesos, entre ellos Due diligence, procesamiento y revisión de documentos, soporte en la redacción de contratos, gestión documental, etc.
En esa misma línea, estamos viviendo una creciente expansión de los software en la nube, entre ellos los SaaS o Software as a Service. Este último procesa datos y los almacena en servidores remotos en lugar de en ordenadores y discos duros locales.
La adopción de este tipo de soluciones va en aumento en el ámbito legal debido a su seguridad, portabilidad y eficiencia.
El blockchain es una tendencia transversal a todos los ámbitos y el sector legal no es la excepción.
Las redes descentralizadas en el ámbito jurídico se están empezando a utilizar con los contratos inteligentes o smart contracts: códigos que se ejecutan automáticamente y llevan a cabo un conjunto de instrucciones, que luego se verifican en la blockchain.
Una serie de innovaciones subyacen a la naturaleza de las redes blockchain: la descentralización, la transparencia y la neutralidad.
Son capaces de ejecutarse y hacerse cumplir por sí mismos y no están sujetos a la interpretación de algunas de las partes, pues se basan en códigos informáticos llamados "scripts" que no se pueden cambiar o modificar una vez establecidos debido a la naturaleza de la tecnología blockchain.
En cuanto a los trámites virtuales, las firmas digitales permiten validar o autenticar la identidad de las partes firmantes y el origen de los documentos.
Al mismo tiempo, incrementan la seguridad de los trámites y facilitan la gestión de archivos tanto en el ámbito público como en el privado.
A diferencia de las tecnologías tradicionales, las herramientas y técnicas No-Code permiten a las personas crear aplicaciones, plataformas y otros tipos de software con muy poco o sin conocimiento técnico: una oportunidad invaluable para los abogados del futuro.
En un ecosistema legal que progresa a un ritmo vertiginoso, comprender que la tecnología está al servicio de la práctica profesional de los abogados es comenzar a transitar un camino de aprendizaje que potenciará nuestra disciplina y aquellas que se nutren de ella.
*Por Ezequiel Braun Pelegrini, fundador y CEO de Brevity