"El cepo cambiario será eliminado a partir del lunes 14 de abril, permitiendo la compra de divisas sin restricciones para personas humanas", palabras más, palabras menos fueron las que mencionó el ministro de Economía, Luis Caputo, el viernes pasado, y confirmó la decisión del Gobierno de concretar uno de los puntos clave prometidos en campaña.
De inmediato, los expertos de la City comenzaron a analizar cuáles son los nuevos instrumentos de inversión para hacer rendir al máximo los ahorros.
Los especialistas aguardan, en líneas generales, un lunes positivo para el equity argentino, en el que estiman se destacarán las acciones de bancos junto a una potencia apreciación de GD35, AL35, GD46, los bonos de la parte media de la curva.
¿Los motivos? En principio, son varios. Para empezar, la eliminación de restricciones cambiarias genera mayor confianza entre los inversores, con un entorno más predecible y atractivo que puede traducirse en un aumento de la demanda de activos argentinos
Además, con la normalización del mercado cambiario, los inversores y expertos esperan que disminuya la brecha entre el dólar oficial y el paralelo, algo que mejorará la percepción de estabilidad económica.
También anima a los expertos algunas reacciones optimistas percibidas en mercados internacionales: las acciones argentinas ya exhibieron el viernes pasado un rally alcista en Wall Street tras el anuncio, y reflejaron el optimismo de inversores sobre el impacto positivo de las medidas anunciadas.
Fin del cepo: a qué precio puede abrir el dólar el lunes
Pablo Lazzati, CEO de Insider Finance, señala a iProUP que la nueva fase cambiaria marca un "punto de inflexión para el mercado argentino. Con la posibilidad de adquirir dólares entre $1.000 y $1.400 (con ajuste mensual del 1% en cada banda), estamos presenciando el levantamiento efectivo del cepo para los flujos futuros".
Ante este nuevo escenario, Lazzati apunta que desde Insider observan que el mercado ya ha descontado una devaluación cercana a 10% para el comienzo de esta nueva semana, ubicando el nuevo tipo de cambio oficial en la zona de $1.100-$1.200, alineado con el valor del dólar blend del último viernes ($1.142) y el techo observado en los futuros del Rofex ($1.190).
José Bano, experto en finanzas, confía a iProUP que el impacto será bastante positivo en el mercado a partir de las medidas anunciadas. "Entiendo que vamos a tener una reacción positiva. En las primeras horas todos vamos a estar mirando qué pasa con el dólar y si esta banda de $1.100 a $1.400 es muy amplia o no", remarca el experto, quién espera una muy buena performance de los bonos en dólares.
"Para lo que es el mundo de las acciones, también. Hay que ver qué interpreta todo el mundo y si esa cantidad de dinero que ingresó es suficiente como para convencer al mercado. No obstante, seguramente tengamos algo más de volatilidad", anticipa.
Gustavo Neffa, economista jefe de Research en Traders, destaca a iProUP que "es algo mejor de lo esperado" el anuncio realizado por el Gobierno. "Esto es algo muy positivo. Te lo demostró el after market de las acciones argentinas (ADR) en los Estados Unidos (el viernes pasado), luego de tener un rally tremendo", subraya.
A la hora de mencionar qué instrumentos financieros pueden sacar ventaja a partir de este nuevo escenario, resalta que "el mercado ya se había anticipado algo entre el jueves y viernes, con una suba del tipo de cambio".
"Se hablaba del establecimiento de estas bandas, aunque nadie sabía más o menos cómo iban a resultar", recuerda.
Y agrega: "Además, se elimina el dólar blend y me parece que es algo muy positivo porque le puede marcar un piso en la zona los $1.130. El contado con Liqui y el MEP, que el viernes bajaron más de 1,5% y se ubicaron en la zona de los $1.300. Creo que por ahí se podría ubicar el dólar cuando abra la semana".
Los expertos destacan que con el fin del cepo se destraban un poco más las regulaciones y se termina el parking, factores que facilitarán muchas inversiones dentro del país y también con miras hacia el capital extranjero.
La medida también abre la posibilidad de que Argentina recupere su estatus como mercado emergente en índices como el MSCI. Este cambio de categoría podría atraer flujos de inversión significativos, ya que muchos fondos internacionales volverían a incluir activos argentinos en sus carteras
"Fíjate que para ser emergentes necesitabas levantar la restricción del cepo, como para calificar como en país emergente, es muy importante para el mercado accionario. Y después para la libre movilidad de capitales, la entrada y salida para lo que son las inversiones productivas. Así que es algo muy positivo", subraya Neffa.
Cómo será la dinámica de oferta y demanda de dólares para la próxima semana
Desde Insider Finance apuntan que la oferta-demanda se perfila favorable. "Esperamos una demanda acotada (principalmente de MiPyMEs importadoras) mientras la oferta aumentará por la liquidación 100% al MULC del sector agrícola y el ingreso gradual de capitales externos atraídos por la mayor previsibilidad".
Según Lazzatti, "el aspecto más destacable es el sólido respaldo financiero: con u$s23.100 millones disponibles, más los aportes del Banco Mundial y BID, el Gobierno cuenta con un ‘paraguas protector’ que le otorga margen suficiente ante eventuales shocks externos y cobertura para afrontar movimientos de hasta 30% en el tipo de cambio".
"Para los inversores, anticipamos un lunes positivo para el equity argentino (especialmente acciones de bancos) y un potencial de apreciación significativo en bonos de la parte media y larga de la curva (GD35, AL35, GD46), que deberían comprimir a una TIR de 10%", completa el CEO de Insider Finance.
La flotación del dólar dentro de bandas móviles ($1.100 y $1.400) también puede generar una devaluación inicial significativa, e impactar de forma negativa en los precios de los activos financieros en el corto plazo. Se trata, sin dudas, del mayor riesgo si el Gobierno no logra contener la inflación derivada del ajuste cambiario.
Por otro lado, la presión sobre las reservas del Banco Central podría limitar la capacidad de intervención en el mercado cambiario, y generar un clima de incertidumbre entre los inversores.
En tanto, la transición hacia un régimen de flotación cambiaria también podría llegar a generar cierto nerviosismo en los mercados internacionales. Sobre todo, si los inversores externos no terminan de percibir con claridad avances claros en lo que respecta a acumulación de reservas y la baja del índice de inflación.