El columnista tecnológico del diario The New York Times Kevin Roose vendió su columna en la que trata el fenómeno de los NFT (non-fungible token o token criptográficos) en una plataforma NFT por u$s563.400.
¿Qué sucedió?
La puja por su columna publicada el miércoles se cerró este jueves en 350 unidades de la criptomoneda Ethereum, que equivalen al cambio actual a más de medio millón de dólares
Los NFT son activos digitales que gracias a la tecnología blockchain quedan registrados como únicos, irreplicables y cuyo historial de transacciones puede ser seguido durante el origen de la obra.
Esta aplicación del blockchain ha supuesto una revolución en arte digital, ya que un creador puede registrar su obra como única y un comprador de la misma puede certificar tanto su autenticidad como la propiedad de la obra.
Los NFT abren la puerta a una infinidad de aplicaciones en la creación, intercambio y traspaso de contenido digital único y activos de colección a nivel mundial con un costo relativamente bajo (acuñar obras y cerrar transacciones en blockchain tiene un coste de computación y en emisiones variable).
Roose anunció en Twitter que todo el dinero recaudado en la subasta en la plataforma de criptoarte Foundation.app será donado al fondo Neediest Cases Fund para los más necesitados, establecido por el diario en 1911.
The New York Times no es el primer medio que vende un coleccionable digital NFT. La agencia de noticias Associated Press subastó por u$s180.000 una obra digital que mostraba el mapa electoral de las elecciones del pasado noviembre en Estados Unidos.
La televisión pública británica BBC ha comenzado a comerciar como NFT imágenes de los personajes de la serie Doctor Who y Quartz, y vendió recientemente un artículo por u$s1.800.
Las posibilidades de este nuevo mercado de coleccionismo han llevado a la NBA a vender el vídeo de un mate de Lebron James por más de u$s200,000 o a que el consejero delegado y fundador de Twitter, Jack Dorsey, vendiera el primer tuit de la red por u$s2.9 millones.
Otro de los mercados que está empezando a emerger con los NFT son las propiedades en el metaverso, mundos virtuales. La semana pasada se vendió una casa digital por medio millón de dólares
¿Qué son los NFT?
Los NFT (tokens no fungibles, por sus siglas en inglés) son un tipo de activos digitales diseñados para ser únicos, una característica que comparten todos los bienes coleccionables, como las obras de arte, estampillas, discos de vinilo, etc.
En esencia, una pieza digital es un conjunto de datos. Es decir, no hay pintura, químicos ni tela o papel, sino un archivo que almacena información digitalmente. Esto significa que se pueden realizar infinitas copias de ese archivo, indistinguibles entre sí, y la pieza no pierde calidad. Esto sucede con cualquier texto, imagen, archivo de audio o video en Internet.
El protocolo detrás de los NFT es revolucionario porque permite crear, por primera vez en la historia, activos digitales únicos y por lo tanto coleccionables. Esto es posible gracias al desarrollo de la tecnología Ethereum, que incorpora información adicional al archivo y deja registrado de forma permanente un "sello digital" o certificado que indica que ese es el archivo digital original.
Uno de los principales beneficios de un objeto coleccionable digital frente a un objeto coleccionable físico es la posibilidad de almacenar datos históricos de propiedad en la Blockchain. Esto permite rastrear fácilmente al creador original, lo que permite que las piezas se autentiquen sin necesidad de una verificación externa.
A diferencia de otro tipo de criptoactivos como Bitcoin, los NFT no se pueden intercambiar directamente entre sí. Esto se debe a que no hay dos archivos idénticos, incluso aquellos que existen en la misma plataforma o colección.
Otra característica de los NFT es que son indivisibles. No se pueden partir en denominaciones más pequeñas como sucede con la mayoría de las criptomonedas. Existen exclusivamente como un artículo único y completo.
Por último, los NFT son indestructibles. Debido a que todos los datos NFT se almacenan en la Blockchain (principalmente en la red de Ethereum), cada token no se puede destruir, eliminar ni replicar. La propiedad de estos tokens también es inmutable, lo que significa que son los / las coleccionistas quienes poseen sus NFT y no las empresas que desarrollan su tecnología o cualquier empresa que los comercialice.
Los NFT existen desde hace un par de años. De hecho, en 2017 la red de Ethereum se congestionó por la enorme demanda de CryptoKitties, uno de los juegos pioneros en el uso de estos tokens, que ofrece gatitos digitales coleccionables.
Con el correr del tiempo, se volvieron cada vez más populares entre los usuarios de criptomonedas y también entre artistas digitales, gamers, músicos y coleccionistas. Los NFT permiten tener propiedad absoluta de bienes digitales de un juego o un proyecto, así como ganar dinero con ellos a través de la valorización de las piezas y las posteriores reventas.
Para los artistas más reconocidos, poder vender obras de arte en forma digital directamente a una audiencia global de compradores sin depender de intermediarios, les permite quedarse con una porción mayor de las ganancias que obtienen de las ventas de sus obras.