Ualá tuvo su "super lunes" en el que no solo inauguró sus nuevas oficinas "futuristas" en el ex estacionamiento del Hipódromo de Palermo, sino que además anunció una nueva ronda de inversión por u$s300 millones liderada por Allianz X, en un evento en el que estuvo presente el presidente Javier Milei.
Durante la tarde, el unicornio fintech brindó una conferencia de prensa virtual en la que su CEO y fundador, Pierpaolo Barbieri, aseguró que para la empresa "es un honor anunciar la ronda más grande de América Latina en tres años", de Allianz X, fondo de capital de riesgo de la aseguradora más grande del mundo, que por primera vez apuesta en la región.
Además, señaló que el nuevo edificio de Ualá será el headquarter regional de la firma, que ya tiene operaciones en:
- Argentina
- México
- Colombia
Ualá concreta inversión récord: la postura de Pierpaolo Barbieri
Sobre el uso de los fondos, Barbieri aseguró que se utilizará para "lanzar una nueva oferta de productos y servicios en Latinoamérica", aunque no brindó detalles sobre aperturas en nuevos países: "No hablamos de lo no lanzado", repitió.
Según el ejecutivo, Ualá ya es rentable en la Argentina, por lo que solo le resta acercarse al breakevent en los otros dos mercados.
Si bien no aclaró cómo reforzará el negocio de seguros este acuerdo con la firma del rubro más grande de la región, es esperable que renueve su oferta, agregando pólizas para autos, vertical hoy ausente en la app y más rentable en el país.
Pierpaolo Barbieri, CEO de Ualá, destacó la fortaleza de su empresa en el sector
Con respecto a los términos de la nueva ronda, el ejecutivo destacó que el nuevo desembolso valúa a la firma en u$s2.750 millones. "Vendimos cerca del 10% del capital accionario. Hay más de 200 personas de Ualá que tienen acciones u opciones, seguimos un modelo similar al que usan muchas startups en Silicon Valley", indicó, en alusión al reparto de equity entre colaboradores.
Al mismo tiempo, opinó sobre la posibilidad de realizar una oferta pública de acciones (IPO) en Wall Street. "La verdad es que sería un increíble honor ser la primera fintech argentina en cotizar en bolsa en EEUU, es un sueño, pero no tenemos un timeline claro", reconoció.
En este sentido, indicó que el "objetivo es escalar el negocio en los tres mercados. En Argentina tenemos a más del 17% de la población adulta. En México y Colombia tenemos poco menos de un millón. Lo bueno es que tenemos licencias bancarias en todos los mercados", deslizó.
"Queremos ser el banco más grande del país. Tenemos más de 6 millones de clientes en la Argentina y habilitamos 100.000 nuevos por mes. Somos el banco que más crece en el país por lejos", remarcó.
Ualá: lo que viene para el unicornio fintech
Sobre la situación local, Barbieri ponderó "la estabilización de la economía y de la inflación" son fundamentales para cualquier negocio en el país.
"Yo creo que el año que viene habrá crecimiento en Argentina. La baja de la inflación es una muy buena noticia. Para tener desarrollo necesitás reglas de juego claras, inflación controlada y economía abierta", manifestó.
También indicó que "hay una confianza en que los próximos años serán más positivos en nivel general. Hay una gran oportunidad en América Latina, con Mercado Libre o Nubank cerca de máximos históricos".
"El Siglo XXI está hecho para la Argentina: necesitamos poder potenciar las industrias donde tenemos una ventaja competitiva. Apuesto a crear productos para exportar desde la Argentina al mundo. El 75 u 80% del equipo está en el país", remarcó.
Barbieri dedicó un apartado a la desregulación que lleva adelante el Gobierno, como la posibilidad de que las fintech puedan participar del pago de sueldos, jubilaciones y prestaciones sociales.
"Al ser un banco podemos ofrecer beneficios de ANSES. Hay cosas que solamente pueden hacer bancos y está bien que así sea. No existe un sistema donde la gente pueda hacer intermediación financiera sin supervisión bancaria, porque, sino, todos los bancos lo hicieron en vano", remarcó.
También hubo un tiro por elevación a Mercado Libre, sin nombrarlo. "Yo creo que hay muchos jugadores que juegan al límite de la regulación. Muchos hablan de competencia, pero no dejan la competencia abierta. Nosotros no hacemos lobby para cambiar las reglas", concluyó.