La actividad económica argentina lleva cinco meses consecutivos en baja. Los analistas se siguen preguntando cuándo llegarán las esperadas inversiones y cómo aumentar las exportaciones tras la devaluación. En este contexto, el sector fintech viene esquivando a la recesión y creciendo a un ritmo que sorprende e ilusiona.
En el país, este ecosistema goza de excelente salud. Cuenta con más de 130 compañías, según los datos de las inscripciones a la Cámara Argentina de Fintech, conformada en noviembre de 2017.
Además, registra una tasa de crecimiento anual del 110%, ya emplea a casi 6.000 personas de forma directa y más de 90 mil indirectas, según los últimos registros de la entidad dados a conocer en septiembre.
Por otro lado, la industria recibió en el último año inversiones extranjeras y exportó servicios a otras regiones de Latinoamérica, con un volumen total de transacciones de u$s6.000 millones.
Por ejemplo, en las tres recientes rondas de capital, la fintech Moni levantó u$s4,5 millones del Banco Mundial; mientras Ualá consiguió u$s34 millones de Goldman Sachs y Soros. En tanto que 123Seguros percibió u$s3 millones de Alaya Capital y el fondo de inversión de Mercado Libre.
"Los comercios están siendo afectados por la crisis económica actual y son nuestros principales clientes. Sin embargo, nuestro producto los ayuda a potenciar su negocio: vender más con tarjeta, no perder dinero por rechazos y contracargos, entre otros. Por este motivo, no dejamos de crecer en cantidad de clientes a pesar del contexto", explicó Sebastián Cadenas, CEO de la Increase. A través de la tecnología, Increase ayuda a las empresas a administrar sus ventas con tarjeta de crédito o débito.
Cuenta con más de 25 mil clientes en Argentina. Algunos son grandes compañías, como Latam, Shell o Famacity, si bien el 70% de los usuarios son pequeños comercios. Con respecto a la cantidad de empleados que trabaja en la firma, creció más de 100% en el último año.
"En los próximos 18 meses esperamos alcanzar los 100.000 comercios, contratar 20 personas más y acelerar la expansión de la compañía a Ecuador, República Dominicana, Uruguay y Perú", detalló a iProUP Cadenas, CEO de Increase.
Juan Oizcoidi, de Wilobank: "El sector fintech tiene una tasa de crecimiento anual del 110% y emplea casi 6 mil personas"
En la misma sintonía, opinó Alejandro Cosentino, miembro de la Cámara Argentina de Fintech y CEO de Afluenta, la fintech pionera en el país en el sistema de finanzas colaborativas.
"A pesar de la coyuntura, el ecosistema Fintech sigue siendo sumamente atractivo para los fondos de inversión", completó el ejecutivo.
La firma se lanzó al mercado nacional hace seis años y luego continuó expandiéndose hacia nuevos países, como Perú en 2015 y México en 2016.
"Ahora, nuestro foco está puesto en Colombia y Brasil", resaltó Cosentino. Posee una comunidad de casi un millón de personas y en los últimos años otorgó más de 15.000 préstamos por un monto de 75.000 millones de pesos.
"Brindamos acceso al crédito con costos más accesibles que otras alternativas de financiamiento tradicional. Por los cambios macroeconómicos, el mercado se vio afectado luego de que aumentaran las tasas", agregó Cosentino.
En Afluenta trabajan 80 personas, teniendo en cuenta toda la región, y en el último tiempo recibió inyecciones de capital de la Corporación Financiera Internacional, Elevar Equity e IGNIA Partners.
Según Alejandro Cosentino, de Afluenta, "las fintech ofrecen créditos más accesibles que la banca tradicional"
Por otro lado, las cifras de Wenance, líder en créditos de consumo, también sorprenden e ilusionan. En 2017 comenzó a operar en Uruguay y este año se transformó en la primera empresa del sector en desembarcar en Europa, tal como adelantó iProUP. La semana pasada inició sus operaciones en España y tiene como objetivo expandirse a Estados Unidos en los próximos meses.
"Si bien el país está atravesando una turbulencia financiera y vivimos una desaceleración económica, el mercado del crédito se sostiene debido a la necesitad de financiamiento. Y es ahí donde debemos estar para ofrecer un crédito cuándo, cómo y dónde las personas lo necesitan", explicó Alejandro Muszak, CEO y fundador de la firma, a iProUP.
Wenance ofrece productos financieros desde 1997 y en 2014 comenzó la transformación digital. En los últimos cuatro años otorgó 200.000 préstamos por un total de 1.900 millones de pesos.
Además, en los últimos 12 meses experimentó un crecimiento del 73%. En la empresa trabajan 424 personas, de las cuales un tercio son desarrolladores IT.
Desde Wenance atribuyen parte de sus méritos al "apoyo de los fondos internacionales que apalancan la expansión", dos de los cuales invirtieron u$s20 millones. Además, con la colocación de su fideicomiso financiero de préstamos personales con oferta pública superó los 190.000 millones de pesos.
Tanto Increase como Afluenta y Wenance llevan entre 4 y 6 años en el ecosistema fintech. Sin embargo, los números se replican en las nuevas compañías, como Wilobank, que comenzó a funcionar hace tan solo cuatro meses y ya tiene 18.000 usuarios.
Alejandro Muszak, CEO y fundador de Wenance, la primera fintech argentina que desembarcó en Europa
"Del total de los clientes, el 50% estaba bancarizado y el otro 50% nunca había accedido a la banca tradicional. Queremos ser más justos", destacó Juan Ozcoidi, director ejecutivo de Wilobank.
En la empresa trabajan 30 personas y para el año que viene planea contratar más empleados. "Queremos terminar el 2020 con 300.000 clientes. Y para llegar a esas proyecciones ambiciosas, necesitaremos más recursos humanos", agregó Ozcoidi.
Wilobank es el primer banco 100 por ciento digital de la Argentina, homologado por el Banco Central. Su principal accionista es el reconocido empresario argentino Eduardo Eurnekian.
Sobre posibles inversiones extranjeras, Ozcoidi aseguró: "Hubo organismos internacionales que se acercaron y nos manifestaron su interés por lo que estamos haciendo".
¿Cómo se explican estas cifras en un contexto de crisis?
A pesar de la desconfianza que genera en algunos ámbitos el sector fintech, los analistas aseguran que el potencial es enorme.
"Somos el cuarto ecosistema en América Latina. Si tomamos como referencia el tamaño del mercado local, la Argentina tiene una cantidad y calidad desproporcionada de emprendedores fintech", opinó Cosentino, miembro de la Cámara local.
Por su parte, Juan Pablo Bruzzo, presidente de la Cámara Fintech, aseguró a iProUP: "Los bancos miran cantidad de sucursales. Nosotros reemplazamos eso con celulares. Donde hay un celular, hay un servicio fintech".
Los datos invitan a soñar con un crecimiento sostenido del sector. En la Argentina, según el Global Findex, el 49% de la población económicamente activa no tiene cuenta bancaria. Y de acuerdo con un informe de la consultora Deloitte, el 91% de la gente cuenta con un celular.
"Más allá de la alta volatilidad macroeconómica, los inversores apuestan a la banca digital porque piensan que en el mediano plazo va a tener una gran cantidad de clientes", explicó Bruzzo, quien además es cofundador de Moni, una compañía de préstamos digitales.
Además, agregó: "Hay un nivel muy alto de sub bancarización, es decir, gente que tiene una cuenta bancaria para cobrar un sueldo o una jubilación, pero que no accede a ningún servicio financiero, ni siquiera a una tarjeta de crédito".