En tiempos de cuarentena, son muchos los argentinos que vieron una disminución en sus ingresos. Sin embargo, los imprevistos ocurren, y cuando hay que hacer frente a un gasto inesperado, la pregunta es siempre la misma: ¿cómo conviene financiarlo?
Desde una batería nueva para el auto, que estuvo 3 meses parado, hasta la compra de un medicamento caro, en momentos en que la salud está en primer plano, los gastos sorpresivos sacuden la economía de los hogares. En este contexto, la disputa entre préstamos y tarjetas suma un nuevo round.
Tarjetas, las preferidas
De acuerdo con un relevamiento del Banco Central, 4 de cada 10 adultos posee al menos una tarjeta de crédito. Circulan unos 28 millones en el país, por lo que se presume que hay un promedio de dos por persona.
Pese a ello, y en sintonía con la caída de consumo que disparó la cuarentena, en los últimos meses cayó el stock de crédito otorgado por esta vía. En mayo, la financiación con plásticos retrocedió casi 4% en términos reales, de acuerdo con cálculos de la consultora LCG.
Ante un gasto inesperado, la decisión de usar la tarjeta de crédito está asociada a un factor fundamental: las cuotas. Si el comercio está adherido al Ahora 12 o Ahora 18, por ejemplo, la decisión es sencilla, ya que tienen las tasas más bajas del mercado.
- En el caso del Ahora 12, la tasa nominal anual (TNA) es 18%, mientras que el Costo Financiero Total (CFT) es 25%. Se encuentra muy por debajo de la inflación proyectada para los próximos 12 meses, que se ubica en poco mas del 50%.
- Para el Ahora 18, la TNA es de 19% y el CFT llega al 26,00%. Si bien no hay estimaciones específicas de inflación para el próximo año y medio, el costo de este financiamiento sería claramente inferior al avance de los precios.
En Argentina circulan más de 28 millones de tarjetas de crédito, según datos del Banco Central
Un dato importante a tener en cuenta es que no todos los comercios están adheridos a los programas "Ahora". Si bien hay gran variedad de rubros, la financiación barata sólo aplica a productos de industria nacional. Por ello, hay muchos locales donde los planes funcionan para algunos productos pero no para otros.
Cuando no apliquen estos sistemas de estímulo, financiarse a 12 cuotas tiene una TNA cercana al 95% y un CFT superior al 120%. Esos costos varían según el punto de venta, ya que los acuerdos se realizan entre el comercio y la tarjeta o el banco. Es un convenio entre privados y la tasa no está regulada.
Ahora bien, ¿qué pasa con quienes se entusiasman con "Ahora 12" y no pueden pagar el abultado resumen de la tarjeta a fin de mes? Allí sí hay una regulación de tasas. Según establece el Banco Central, quienes necesiten refinanciar el saldo pueden hacerlo a una TNA máxima de 43% anual. Dicho costo también está debajo de las proyecciones de inflación.
Adelantos de sueldo en el banco
Los adelantos de sueldo bancarios fueron lanzados mayoritariamente el año pasado. Bancos como Galicia, BBVA, Itaú, Ciudad y Provincia incorporaron esta opción para los titulares de cuentas sueldo. Se trata de una alternativa que utilizan muchos para hacerse de un porcentaje de su salario antes de la acreditación. En rigor, es un préstamo personal de muy corto plazo.
En el caso del Galicia, los adelantos de sueldo se piden por homebanking y ofrecen hasta el 50% del haber, aunque en general se solicita bastante menos: hoy, el promedio está en $19.000.
Pese a la cuarentena, la cantidad de pedidos se mantuvo estable. "A los dos meses después de que salimos con este producto, se estabilizó el volumen de colocación y no sufrió modificaciones a partir de la cuarentena", señala a iProUP Lucas Kruk, jefe de producto préstamos de la entidad.
Varios bancos ofrecen a los titulares de cuenta sueldo la posibilidad de gestionar un adelanto de sus haberes
Se trata de créditos que se salda en un lapso corto de tiempo. "Tiene un plazo de devolución de hasta 45 días. Hay clientes que lo sacan seguido pero son una minoría. Los préstamos personales tradicionales, que van de 6 a 72 meses, son más recurrentes", cuenta el ejecutivo.
En cuanto a la financiación, Kruk señala que hay diferentes costos según el cliente y se hacen promociones en ciertos días, por lo que no se puede hablar de una tasa única. Con todo, afirma que el costo está en línea con el de un préstamo personal.
Según datos del Central, la TNA promedio de las líneas personales está hoy en 50%, aunque los adelantos de sueldo pueden tener tasas algo más altas debido al corto plazo. De todos modos, resultan más económicas que una financiación tradicional con tarjeta de crédito, pero son más caras que los planes "Ahora 12/18".
Fintech, para los no bancarizados
Aquellos que no son sujetos de crédito para los bancos, pueden recurrir a las fintech que brindan préstamos similares a los adelantos de sueldo. Es la alternativa de financiamiento más cara entre todas las mencionadas.
Hace pocos días, el propio Banco Central cargó contra las tasas de las fintech. Desde el sector respondieron a las acusaciones y están preparando una propuesta conjunta para presentar ante el ente regulador, de modo de unificar la forma de publicar las tasas. Además, explican que esos costos tienen que ver con que el perfil de riesgo crediticio.
"No todos los jugadores están enfocándose en el mismo tipo de usuario. Las fintech apuntan a un mercado totalmente desatendido, no van al mismo público que los bancos", asegura Salvador Calogero, country manager de 4Finance, dueña de Vivus.
Esta compañía brinda préstamos tipo adelanto de sueldo a plazos de entre 7 y 30 días. El CFT oscila va de un mínimo del 20% a un máximo de 43% mensual. En términos anuales, el CFT mínimo es de 817% y el máximo, 7.615%.
Por su parte, Wenance ofrece dos productos: Mango, para créditos bajos a plazos cortos; y Welp, para montos más altos. "Nuestras tasas van del 68 hasta el 170% anual, según riesgo crediticio", asegura a iProUP Alejandro Muszak, CEO de la firma.
Otra alternativa similar es la ofrecida por Adelantos.com by Ixpandit. Allí los plazos van de 60 a 120 días. La TNA es de 440%.
"En general, las fintech suelen prestarle a individuos que no acceden a un crédito bancario. Quizá el primer crédito es una tasa un poco más alta al resto del mercado pero una vez que la persona genera un historial crediticio positivo, el costo va bajando", explica Matías Friedberg, cofundador de Adelantos.
De acuerdo a los voceros de las fintech, estos préstamos se usan para afrontar un descalce financiero que suele darse alrededor de la tercera semana del mes. "Hoy, los clientes los están usando para pagar servicios, deudas o emergencias particulares. Van cubriendo baches", cuenta Calogero.
A diferencia de lo que sucedió en Galicia, en las fintech reconocen que la demanda de crédito se planchó en los meses de aislamiento. "La cuarentena bajó drásticamente el nivel de consumo y eso generó una caída importante de la demanda, de entre 40% y 60%. Esto también puede ser porque el público, al quedarse en su casa, tiene menos gastos y más dinero disponible", resalta Friedberg.
"La gente está gastando menos. El punto más bajo fue la primera semana de abril. A partir de ahí se recuperó pero seguimos 30% por debajo de los niveles previos a la pandemia", aporta Calogero.
Y argumenta: "Muchos de nuestros clientes son los más vulnerables a la crisis económica y vieron sus ingresos disminuidos. Algunos prefieren esperar antes de tomar un crédito porque no saben si van a poder pagar el próximo mes".
Si bien no estaban obligados por normativa, ante la crisis Vivus pospuso en abril y mayo los pagos de las cuotas. Por su parte, desde Adelantos animaron a sus clientes a contactarse por vía telefónica si necesitaban facilidades en el pago.