Se despide julio y se asoma, por el horizonte, el inicio de agosto. Con la llegada del octavo mes del año, nos adentramos en el segundo semestre y en la última parte de un 2024 movido en cuanto a lo cambiario, marcado por el cambio de gestión, con llegada de Javier Milei a la presidencia a finales del 2023, quien ha puesto como objetivo prioritario ordenar la macroeconomía para, eventualmente, levantar las restricciones cambiarias.
En este sentido, el mes que está por cerrar no fue uno más, ya que llegó de la mano de la promulgación de la Ley Bases y el paquete fiscal. Además, durante las últimas semanas, el Banco Central anunció medidas para flexibilizar el mercado de divisas.
En sintonía, el ministro de Economía, Luis Caputo, implementó un plan de "emisión cero", que implica el cierre del "grifo" de creación de pesos para, entre otras cuestiones, comprar divisas en el Mercado Único y Libre de Cambio (MULC).
En cuánto a números, y a falta de un par de horas para su cierre, lo que deja julio en materia cambiaria es un tipo de cambio oficial a $971,29, unos $20 por arriba de los $950 que valía en la apertura del primer día del mes.
Por su parte, el MEP cayó un 5,42% en comparación a los $1.335,67 con los que abrió junio y se ubica a $1.263,28. Mientras que el Contado con Liquidación llega a los $1.270,97, también por abajo, en este caso un 5,92%, de su valor hace 31 días, en $1.350,91.
Mientras que el Blue está a $1.385, unos $20 por arriba de los $1365 con los que amaneció el 1/7. Sin embargo, cabe recordar, el 12 de julio alcanzó su máximo nominal histórico, de $1.500, una barrera que rompió en medio de una fuerte tendencia alcista para luego disminuir y estabilizarse.
Por el lado del dólar cripto, cotiza a $1.296 en el cierre del mes, según la pizarra de Bitso, casi $100 por debajo de los $1.395,02 en los que se ubicaba cuando inició el séptimo mes del año.
Julio fue un mes movido para el dólar. ¿Qué ocurrirá en agosto?
Dólar: qué ocurrirá en agosto y en lo que queda del 2024
Para la analista Natalia Motyl, "en el corto y mediano plazo se anticipa una mayor volatilidad en el mercado cambiario, derivada de la expectativa sobre la sostenibilidad de la política de esterilización de pesos a través de la venta de dólares" por parte del BCRA.
En línea, indica a IProUP que esta situación "se ve influenciada" por dos factores principales:
- La creciente incertidumbre debido a la reducción de las reservas en dólares
- La menor liquidez en la economía, que podría forzar a los tenedores de divisas a vender dólares.
Respecto a la brecha, mas allá de que el objetivo del plan es 'mantenerla a raya', para la economista y docente de UCEMA (Universidad del Centro de Estudios Macroeconómicos de Argentina) la magnitud del impacto de estos factores "dependerá de cuál de ellos prevalezca".
"Si la disminución de las reservas del Banco Central es el factor predominante, se intensificará la crisis de confianza, generando una mayor demanda de dólares y, en consecuencia, una brecha cambiaria creciente. En cambio, si la menor liquidez es el factor dominante, la brecha cambiaria podría reducirse", argumenta.
Coincide Sebastián Cao, Licenciado en Administración por la UBA y analista del Research & Forecast Econométrica, quién afirma a IProUP que, "efectivamente, parece deteriorase la acumulación de reservas en un semestre donde, estacionalmente, baja la liquidación de exportaciones", lo cuál puede impactar no solo en el tipo de cambio, de cara al corto y mediano plazo, sino también en el Riesgo País.
Cabe remarcar, en este sentido, que en las últimas horas las reservas llegaron a u$s26.992 millones, el nivel más bajo desde febrero, y julio, a horas de su despedida, se encamina a ser, con pérdidas por u$s2.954 millones, el segundo mes consecutivo con ventas netas de divisas.
"En este sentido es que el Gobierno ha tratado de llevar tranquilidad, indicando que tiene reservados ya no solo los fondos para hacer frente a los intereses de la deuda sino también a las obligaciones de capital", agrega.
Esto, considera, tiene lugar en base a que, en su consideración, el Ejecutivo "debe estar descontando, por un lado, una adhesión importante al Blanqueo y al Régimen Espcial del Impuesto sobre los Bienes Personales, pero también al comienzo de una importante entrada de capitales producto del Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones".
"Todo esto, más allá de los efectos fiscales, podría significar, sobre todo, una importante oferta de dólares que descomprima la brecha, fundamental si el Gobierno está evaluando salir de cepo sin que signifique un salto en nivel de precios que comprometa el firme sendero de desinflación", asegura Cao.
Sin embargo, Motyl remarca que "otros factores externos también juegan un papel importante en este escenario", como la política monetaria de la Reserva Federal de los Estados Unidos, aún en 5.25-5.50%, el nivel más alto en los últimos 23 años.
"Un entorno de tasas de interés más bajas suele ser beneficioso para economías como la nuestra, ya que podría incrementar la demanda de nuestra moneda local", remarca.
En base a estos parámetros, y en vistas de que, cada vez más, nos aproximamos hacia el cierre del 2024, sostiene que, en su visión, "es probable que el dólar blue se estabilice en torno a los $1.700 hacia finales de año".
"Esta proyección se basa en el equilibrio entre los pesos excedentes en circulación y las reservas del BCRA. Sin embargo, este pronóstico está sujeto a la condición de que dichos ratios se mantengan dentro de los márgenes previstos", concluye Motyl a IProUP.