Organizarse y ser productivo durante el home office puede ser una meta difícil de alcanzar, sobre todo a fin de año cuando el cansancio se hace sentir. Los expertos de gestión de Randstad, revelan los seis tips fundamentales para mejorar la performance cuando se hace trabajo remoto.
Home office: de alternativa ocasional a práctica regular
El trabajo remoto es una práctica ya instalada a partir de la pandemia y, en muchos casos, una demanda innegociable para muchos trabajadores que eligen una empresa para trabajar.
"El teletrabajo ha pasado de ser una alternativa ocasional a convertirse en una práctica regular para muchas organizaciones en todo el mundo, para los trabajos y posiciones que por sus características no requieren sí o sí de presencialidad", señala Andrea Ávila, CEO de Randstad para Argentina, Chile y Uruguay.
Y añade que "para este segmento de trabajadores, que alcanza a aproximadamente el 30% del total de la fuerza laboral, el trabajo remoto es muy valorado, ya que permite a los colaboradores un mejor balance entre trabajo y vida personal. Sin embargo, aunque trabajar desde casa ofrece claras y variadas ventajas, también implica desafíos en términos de productividad y bienestar".
Por eso, la consultora global de recursos humanos recomienda algunos tips para hacer que el trabajo remoto sea más productivo y llevadero.
Trabajo remoto: las 6 claves para sacarle el máximo provecho
Para mantener el equilibrio y aprovechar al máximo el tiempo laboral durante el trabajo remoto, los expertos en gestión del talento de Randstad recopilaron seis recomendaciones clave:
1.Definir un espacio de trabajo: las experiencias de home office son variadas y abarca a colaboradores que conviven con su familia, otros que están solos y a quienes tienen más o menos espacio.
Sin embargo, en todos los casos, la consultora recomienda delimitar un espacio de trabajo, ubicarse -siempre que sea posible- en el mismo lugar, y que los elementos laborales tengan un sitio especifico.
"Más allá de la búsqueda de comodidad, esta delimitación espacial permite que al cambiar de espacio y guardar los elementos de trabajo se delimite también el tiempo de trabajo del tiempo personal", detallan.
2. Generar una rutina diaria: establecer límites claros entre el tiempo laboral y el tiempo personal y mantener una rutina para que el trabajo no invada todo.
También es importante vestirse, aunque el trabajo sea en el hogar, ya que esto influye de manera positiva en el ánimo.
Establecer una rutina con los objetivos y prioridades del día, dando espacio a breves pausas activas, al menos una vez por hora, ayuda a desconectar y combatir el sedentarismo.
"Es importante también asegurar pausas más largas, por ejemplo para el almuerzo o la merienda, para retomar el trabajo con más foco y energía. Cambiar de aire, aprovechando los distintos espacios disponibles en el hogar como el balcón, patio o terraza, o saliendo a dar una vuelta a la manzana, también es muy recomendable cuando el ritmo de trabajo se hace intenso", añaden.
3. Fomentar la interacción social: evitar el aislamiento para mantener el bienestar emocional, ya se organizando reuniones informales virtuales o actividades de equipo. Si es posible hacerlo de manera presencial, mejor aún.
4. Mantener hábitos saludables: es importante cuidar la alimentación, el descanso tomar agua, pararse, y estirarse con regularidad. Comer liviano y balanceado aumenta la energía lo que hace que la jornada laboral sea más llevadera.
"Cualquier actividad física es buena para desconectar después de un día de trabajo intenso, y es una herramienta muy efectiva para aliviar el estrés y la ansiedad", explican los expertos.
5. Pausar las redes sociales y notificaciones: esto permitirá maximizar la productividad. Incluso, poner el celular en modo avión durante la jornada laboral es una gran estrategia para evitar restricciones.
6. Utilizar herramientas de comunicación efectivas: en los equipos de trabajo a distancia es esencial mantener una comunicación efectiva para lograr los objetivos establecidos, prevenir malentendidos y mantener la productividad. Para eso existen diversas herramientas que facilitan la gestión del trabajo en equipo.
Avila explica que "muchas organizaciones están analizando hoy con mucho más detenimiento cómo va a ser su esquema permanente de trabajo a largo plazo y cómo eso va a impactar en la disposición, tamaño y diseño de sus oficinas y otros aspectos asociados a la ubicación, disponibilidad, función y mantenimiento de los espacios de trabajo".
Además, agrega que "todos estos factores están siendo evaluados por las compañías a la hora de tomar decisiones conscientes respecto a los formatos de trabajo, tomando en cuenta también la necesidad real de una mayor presencialidad en esos ámbitos laborales para que pueda darse la trasmisión de cultura, el encuentro, la creatividad y la generación de ideas colaborativas y otras cuestiones que solo se dan en el trabajo cara a cara de los equipos".