Un Tesla Model 3 quedó totalmente destruido en un terrible accidente en Corvallis, Oregon; sin embargo, afortunadamente, su conductor escapó sin heridas graves.
Al parecer, el conductor del Model 3 estaba bajo la influencia distintas sustancias cuando perdió el control del vehículo eléctrico. Este se salió de la carretera, se estrelló contra dos árboles y atravesó un poste de energía. El coche casi se partió por la mitad en el accidente.
Desde la fuerza advirtieron que las células pueden permanecer calientes hasta por 24 horas después y pueden liberar humos y sustancias tóxicas.
El accidente
La policía cree que el conductor viajaba a velocidad superior a los 160 km/h en el momento del accidente. Las fotos compartidas en línea por el Departamento de Policía de la ciudad de Corvallis muestran que partes del Tesla, y según informó la entidad las celdas de batería individuales, estaban esparcidas del otro lado de la calle.
El paquete de baterías del Modelo 3 está compuesto por varios miles de celdas de batería cilíndricas y el choque fue tan severo que las perforó y las celdas individuales fueron arrojadas desde el lugar del accidente a varios metros de distancia. Además, las celdas de la batería rompieron las ventanas de dos propiedades cercanas, y una de ellas se prendió fuego.
El Departamento de Policía de la ciudad de Corvallis dijo que hizo un esfuerzo concertado para recolectar la mayor cantidad posible de celdas de batería individuales, pero advirtió a los residentes locales que estén atentos a las que se hayan perdido. Desde la fuerza advirtieron que las células pueden permanecer calientes hasta por 24 horas después y pueden liberar humos y sustancias tóxicas.
Según los informes, el conductor, Dylan Milota, estaba bajo la influencia de marihuana en ese momento y fue citado en un hospital cercano por los cargos de: posesión de drogas, choque y fuga, conducción imprudente y peligro imprudente.
Se quedó dormido
La Policía Real Montada de Canadá presentó cargos por conducción temeraria contra un hombre de la provincia de Columbia Británica, tras concluir que se quedó dormido al volante de un vehículo Tesla mientras se desplazaba a unos 140 kilómetros por hora, informó el jueves el Departamento policial de Alberta en su página de Facebook.
El hecho ocurrió a comienzos de julio, cuando los agentes recibieron una llamada para reportar un Tesla Model S 2019 que iba a alta velocidad por una carretera. Ambos asientos delanteros estaban reclinados y las dos personas que los ocupaban parecían dormidas.
"Nadie estaba mirando tras el parabrisas para ver por dónde iba el coche", dijo a CBC News el sargento policial Darrin Turnbull.
"Creemos que el vehículo estaba siendo manejado por el piloto automático, que en realidad es solamente un sistema avanzado de seguridad de conducción, un programa de asistencia al conductor. Igual tienes que estar conduciendo el auto", afirmó Turnbull.
Nadie estaba mirando tras el parabrisas para ver por dónde iba el coche", dijo a CBC News el sargento policial Darrin Turnbull.
Además, agregó que, sin embargo, siempre hay una posibilidad de "cambiar o evadir el sistema de seguridad", después de la compra, contra las recomendaciones del productor.
Cuando la patrulla policial activó sus luces de emergencia para perseguir al conductor, y los vehículos delante del Tesla se apartaron de su camino, el automóvil empezó a acelerarse y llegó a una velocidad de 150 kilómetros por hora. "Parecía que nadie estaba adentro. Aceleró porque la ruta delante estaba despejada", dijo el sargento.
El conductor finalmente se levantó en el asiento y se detuvo. La Policía lo acusó en un primer momento por exceso de velocidad, pero después subió el cargo a conducción temeraria, según informaron medios locales.