En una apuesta ambiciosa, el fabricante alemán de autos de lujo Mercedes Benz mostró en la feria IAA Mobility 2021 en Munich un prototipo de su vehículo autónomo Vision AVTR, que se mostró por primera vez en CES 2020. El coche prescinde del volante, pues el conductor puede interactuar con él mediante un sistema biométrico.
¿De qué se trata?
De acuerdo con Mercedes Benz, el automóvil le permite al usuario realizar ciertas tareas con solo pensar en ellas. Su tecnología está basada en un sistema de percepción visual y simplemente levantando la mano, se proyecta un menú con puntos de luz en una pantalla digital ubicada en el tablero. Gracias a un dispositivo BCI (interfaz cerebro-computadora) con electrodos portátiles que se conecta a la parte posterior de la cabeza del usuario, este puede navegar intuitivamente entre diferentes funcionalidades.
Tras realizar la calibración pertinente, el dispositivo es capaz de registrar y medir la actividad cerebral e incluso según la marca, el vehículo "reconoce al conductor por sus latidos y respiración". Asimismo, cuando el usuario mira a una de las luces del tablero, el dispositivo puede detectar cuál es sin que este haga nada más y realizar una determinada tarea.
El automóvil le permite al usuario realizar ciertas tareas con solo pensar en ellas.
Si bien esta tecnología se presentó hace un año, esta es la primera ocasión en la que el fabricante expone un prototipo completamente funcional y permite que los visitantes de la feria prueben el sistema por sí mismos, según publicó el sitio de Digital Trends.
El Mercedes Benz Vision AVTR fue diseñado en colaboración del director de la película Avatar, James Cameron, en la que está inspirado tanto en términos de diseño como en esa conexión entre hombre y máquina.
Solo eléctricos
Si ya lo tenían claro desde hace unos años, ahora les ha quedado más cristalino con la propuesta "Fit for 55" que el pasado 14 de julio divulgó la Comisión Europea y con la que se quiere que en 2035 no se vendan en territorio comunitario turismos o furgonetas que emitan CO2, lo que afecta a motores de gasolina, diésel e híbridos.
Unos días más tarde, Mercedes Benz presentaba su estrategia eléctrica que tiene como objetivo prepararse para producir únicamente automóviles eléctricos en 2025 y ser al final de la presente década 100 % eléctrica, porque nadie puede prever ahora mismo cuándo se venderá el último motor de combustión, asegura.
No opina lo mismo Audi que en 2026 lanzará su último coche con motor de combustión, que dejará de fabricar en 2033; o Mini, que para 2025, habrá puesto fin a sus motores de combustión.
Para esa fecha Renault solo tendrá diésel en comerciales, mayoría de electrificación de gasolina (híbridos e híbridos enchufables) y eléctricos (serán una quinta parte de sus ventas).
Parte de la actualiación de tiempos para lanzar vehículos puramente eléctricos son las regulaciones existentes sobre emisiones de CO2
En 2025 Jaguar también pondrá fin a su oferta de motores de combustión, que secundará un año después su "hermana" de grupo, Land Rover.
Volvo adoptará esa decisión en 2030, año en el que el 50 % de las ventas de BMW serán eléctricas y en el que Fiat será 100 % cero emisiones, una tecnología que será la única que oferte Opel en 2028.
El Grupo Stellantis -al que pertenece Opel y otras 13 marcas más como Citroën, Peugeot, DS, Jeep, Alfa Romeo o Fiat- tiene como meta que, en 2030, el 70 % de sus ventas en Europa y el 40 % en Estados Unidos sean eléctricas.
El Grupo Volkswagen, dentro de su estrategia New Auto, quiere liderar en 2030 el mercado global de vehículos eléctricos, para lo que prevé instalar una fábrica de baterías en España y producir aquí la familia de coches pequeños cero emisiones del grupo.
El 50 % de sus ventas serán eléctricos y en 2040 casi el 100 % de los nuevos modelos de sus marcas (Volkswagen, Seat, Skoda, Audi o Porsche) que se lancen en los principales mercados deberían ser cero emisiones.
Por tanto son muchas las marcas que para 2030 solo venderán coches eléctricos, como ha hecho Tesla desde su orígenes (en 2003) y Smart (propiedad de Daimler) desde el año pasado.
Estas entre las más conocidas, porque las marcas de lujo, como Bentley o Rolls Royce, también quieren ser eléctricas. La primera en 2030 y la segunda en 2040.