Tras haber comprado en 2021 Bethesda por 7.500 millones de dólares, la empresa liderada por Nadella va a pagar 68.700 millones de dólares por Activision Blizzard, quedándose así con franquicias gigantes como "Call of Duty", "Diablo" y "World of Warcraft", entre otras.
Según Microsoft esto es una "intención" de compra al depender de la aprobación de los organismos regulatorios. La compañía aseguró que "esta adquisición acelerará el crecimiento del negocio de juegos de Microsoft en móviles, PC, consolas y en la nube, y proporcionará bloques de construcción para el metaverso".
¿Serán los próximos juegos de Elder Scrolls exclusivos de Xbox?
Para efectuar la transacción se pagarán 95 dólares por acción, lo que llevaría a que la operación ascienda a un total de 68.700 millones de dólares. Esta cifra se antoja excesiva para algunos analistas al tener en cuenta que el estudio no pasa por un buen momento. Al completar la operación, la propia Microsoft señaló que se convertirá en "la tercera empresa de videojuegos más grande del mundo por ingresos", solo por detrás de Sony y Tencent.
Gracias a la transacción, Microsoft adquiere marcas tan icónicas en el mundo del gaming como "Warcraft", "Diablo", "Overwatch", "Call of Duty" y "Candy Crush", entre otros nombres. Estas franquicias se suman a "Fallout", "DOOM" y "The Elder Scrolls", gracias a la adquisición de Bethesda, por lo que está clara la intención del gigante tecnológico en cuanto a competir con lo más fuerte que pueda adquirir.
Estos títulos sin duda irán a formar parte del cada vez más extenso catálogo que ofrece GamePass. Esto plantea para muchos una pregunta muy importante: ¿serán los próximos juegos de Activision Blizzard exclusivos de PC y Xbox? Hasta el momento, ninguna de las empresas emitió declaraciones sobre el tema.
Polémica en puerta
Bobby Kotick, CEO de Activision Blizzard, seguirá estando al cargo. Es una decisión que no va a estar exenta de polémica, ya que ahora mismo el ejecutivo se encuentra salpicado por una serie de acusaciones referentes a los casos de acoso e incluso de maltrato.
Fue el propio Phil Spencer, máximo responsable de Microsoft Gaming, el que afirmó hace un par de meses encontrarse "perturbado y profundamente preocupado por los horribles eventos y acciones" que estaban ocurriendo en Activision. También dijo que Xbox estaba "evaluando todos los aspectos de nuestra relación con Activision Blizzard y haciendo ajustes proactivos en curso".
La saga Call of Duty sigue recaudando millones
Esto hizo que la mayoría descarte la idea de la adquisición del estudio. A pesar de eso Microsoft declaró que "Bobby Kotick seguirá siendo el CEO de Activision Blizzard, y él y su equipo mantendrán su enfoque en impulsar los esfuerzos para fortalecer aún más la cultura de la compañía y acelerar el crecimiento del negocio. Una vez cerrado el acuerdo, el negocio de Activision Blizzard dependerá de Phil Spencer, CEO de Microsoft Gaming".
Phil Spencer, por su parte, dijo que "como empresa, Microsoft está comprometida con nuestro camino hacia la inclusión en todos los aspectos del juego, tanto entre los empleados como entre los jugadores. Valoramos profundamente las culturas individuales de los estudios. También creemos que el éxito creativo y la autonomía van de la mano con el tratamiento de cada persona con dignidad y respeto. Este es el compromiso de todos los equipos y de todos los directivos. Estamos deseando extender nuestra cultura de inclusión proactiva a los grandes equipos de Activision Blizzard".
Por otro lado, la compañía de Nadella aseguró que la compra de Activision Blizzard permitirá a los jugadores acceder a los títulos de la empresa desde cualquier lado a través de la nube. Esto, entre líneas, se puede leer como que los juegos de Activision Blizzard llegarán a Game Pass como ya sucedió con los de Bethesda. "Tras el cierre, Microsoft contará con 30 estudios internos de desarrollo de juegos, junto con capacidades adicionales de publicación y producción de esports", afirman desde Microsoft.
En cualquier caso, la transacción está sujeta a las condiciones de cierre habituales, a la revisión regulatoria pertinente y a la aprobación de la junta de accionistas de Activision Blizzard. Se espera que la operación se cierre en el año fiscal 2023 (que termina en junio de 2023), así que habrá que esperar hasta entonces. Mientras tanto, ambas empresas seguirán funcionando de forma independiente, según un artículo de Xataka.