En su cita anual convocada en Bogotá este año, para periodistas de Centroamérica, Panamá, República Dominicana y el área andina, el director de Citi para Latinoamérica Norte, Álvaro Jaramillo, explicó que el banco está proactivo en la transformación digital y observando como el área andina, formada por Colombia, Venezuela, Ecuador y Perú, por un lado, y Centroamérica con Dominicana, apuntan a "la expansión" de sus mercados de inversión, en donde quieren participar en primera fila.
"Las multilatinas requieren servicios financieros", refirió, por ello sus nuevas plataformas digitales se preparan para darles un servicio integral independientemente del lugar en que se encuentren, con una tesorería regional , ser la "caja fuerte digital" de la región y garantizarles sus productos globales como ningún otro banco en Latinoamérica y es el primero en manejar las operaciones sindicadas en el área, además de encabezar la banca corresponsal.
Enfatizó que la "ciberseguridad" es la clave para el futuro de la banca digital y el riesgo más importante, por lo que no escatiman recursos para dotar a sus clientes de una plataforma que verdaderamente les inspire confianza, fortaleza y gratuita.
En ese sentido, el director de LATAM Economics en Citi, Ernesto Revilla, explicó que se espera que la economía global, tomando en cuenta factores como la guerra comercial entre China y Estados Unidos, apunta a un futuro inmediato de desaceleración, pero no de recesión, con un crecimiento estimado para 2019 y 2020 del 2,7%, a la baja de su expectativa inicial y constató que los bancos centrales están reaccionando a tiempo impulsando a la baja las tasas de interés.
Aunque admitió que si se agudiza el enfrentamiento comercial chino-estadounidense la situación puede cambiar a la baja, consideró que ambas potencias "van a buscar arreglar" la cuestión por su propio interés, aunque no deja de ser un factor que crea "gran incertidumbre".
Inversión pública en infraestructura, reformas fiscales, incentivos a la inversión privada, política monetaria preventiva, son algunas de las herramientas que ve Citi, presente en más de 100 mercados en el mundo.
El director de Soluciones de Tesorería y Comercio, Steve Donovan, apuntó a que el banco ha entendido que el futuro inmediato es expandirse a través de la economía digital, bancarizar por esta vía a los informales, mantener sus clientes institucionales y ofrecerles soluciones en todo los tramos de sus operaciones para ser la primera plataforma del comercio global.
Aprovechar las fintech al 100%, con sus propias aplicaciones, lo cual previeron desde al menos hace dos años tomando en cuenta las necesidades de los clientes, aunque advirtió que en Latinoamérica hace falta que los gobiernos trabajen en la parte legal y de supervisión para hacer más ágiles las operaciones y la capacidad de reacción ante eventuales ciberdelincuentes.
Desde ya, eliminó el 96% de la "miserable" tramitología para abrir una cuenta, la que ha llegado a reducir a dos días su apertura en mercados como México y Brasil, con una eficiencia y disponibilidad "24/7" para reaccionar ante el fraude y el cibercrimen.
Su director regional de Canales Digitales y Datos, Driss Temsamani, recordó que actualmente el 49% de la banca está en la nube, el 90% del dinero fluye por medios digitales, pero el 90% de las transacciones entre bancos aún se realizan de modo manual, mientras ahora las empresas digitalizadas pasaron de una transacción de US$1 millón mensuales a US$5 por segundo "y todo tiene que quedar registrado automáticamente".
Mostró una parte de las 54 aplicaciones nuevas que tiene Citi para sus clientes, en contraste con que solo el 14% de las empresas cuentan con una estrategia digital para sus operaciones de finanzas y tesorería y el 65% solo la tienen a nivel general, entre otros datos, como que en 2022 el 70% del comercio electrónico se hará a través del teléfono móvil.
Una encuesta a 2018 de la Organización de Estados Americanos (OEA), citada por su compañero Andre Salgado, director de Seguridad de la Información para Citi Latinoamérica, constató que el 37% de empresas financieras han sufrido ataques cibernéticos exitosos, que en 2017 implicaron pérdidas por US$809 millones y el 40% de los asaltos no son reportados a los reguladores ni a la policía.
Lo que es más grave, los asaltados tardan en promedio 7 meses en darse cuenta de que fueron víctimas, pues el 80% carece de estrategia de ciberseguridad.
En 2018 el ciberdelito le costó al planeta US$1 trillón y cada 3 segundos se lanza un nuevo software malicioso, acotó.