Binance es un "titán" de las criptomonedas con una historia fascinante. Prácticamente de la nada y en muy poco tiempo logró convertirse en el exchange más poderoso del ecosistema.
Hoy continúa creciendo de modo acelerado en todos los niveles. Se expande y reinventa constantemente. Tanto, que lanzó su propia moneda digital, que ya figura entre las más exitosas.
Pero detrás de toda gran creación, hay un gran ideólogo. En este caso en particular, uno que empezó su carrera bien de abajo hasta llegar a estar en la lista de 50 líderes más influyentes del mundo en 2020, de la mano de la evolución de su compañía y la aceptación de las criptomonedas.
Se trata de Changpeng Zhao, conocido como "CZ", empresario chino-canadiense, fundador y director de Binance, el exchange de criptomonedas más grande del mundo por volumen de operaciones.
De McDonald's al mundo cripto
Zhao nació en Jiangsu, China, en 1976. A los 12 años se mudó a Vancouver, Canadá, ya que sus padres –ambos docentes– escapaban del partido comunista tras ser tildados de "intelectuales proburgueses".
Durante su adolescencia, CZ ayudó a mantener económicamente a su familia trabajando en una serie de empleos que incluyeron cubrir horarios nocturnos en una estación de servicio y hasta ser empleado de McDonald's. Así costeó su carrera en la Universidad McGill en Montreal, Canadá, en la que se especializó en ciencias de la computación.
Tras graduarse, desarrolló un software para agrupar órdenes comerciales coincidentes para la bolsa de valores en Tokio, primero, y aplicó también sus saberes en la plataforma de Bloomberg en Nueva York. Con apenas 27 años, este genio ascendió tres veces en menos de dos años y dirigió equipos en Nueva Jersey, Londres y Tokio. Pero la pulsión emprendedora lo hizo dejar todo.
En 2005 se mudó a Shanghai para allanar su camino en el mundo del trading al crear Fusion Systems, una startup de consultoría financiera y tecnológica dedicada a la construcción de sistemas comerciales de alta frecuencia, óptimos para corredores de bolsa.
Tras más de 8 años al frente de su compañía, que venía otorgándole buenos resultados, su vida cambió para siempre. No fue en la Bolsa donde experimentó la epifanía, sino durante una partida de póquer, uno de sus pasatiempos favoritos. Un capitalista de riesgo, compañero de naipes de CZ, le contó los detalles sobre Bitcoin, una moneda digital que incorporaba un novedoso mecanismo de operación. Así, se zambulló de lleno en el mundo criptográfico.
Maravillado por este innovador sistema, decidió a apostar por las criptomonedas y dedicar su vida a ello. Así, comenzó a saltar de un proyecto a otro. Fue tal su emoción y efervescencia que, incluso, llegó a vender su departamento para comprar Bitcoin en 2014.
No tuvo demasiada suerte en ese momento. El precio de la divisa virtual líder se había desplomado de los 600 a 200 dólares tras la transacción. Pero eso no lo desmotivó para seguir su camino.
En ese mismo año se unió a la plataforma Blockchain.info como el tercer miembro del equipo de la wallet. Fue jefe de desarrollo durante siete meses, en los que trabajó en estrecha colaboración con conocidos evangelistas de Bitcoin como Roger Ver y Ben Reeves.
Más tarde, se unió a las filas del exchange OKCoin como director de tecnología, en el que aprendió cómo se comerciaban activos tradicionales y digitales. Fue esa experiencia la que lo llevó a imaginar cómo acercar cada vez más las nuevas finanzas a todo el público. Y construir los pilares de su propio imperio.
Surgimiento del gigante
En julio de 2017, CZ creó una plataforma de trading aprovechando todas las posibilidades que ofrecía la tecnología. Y la bautizó con el acrónimo de las palabras "Bitcoin" y "Finance": Binance.
El camino no fue fácil: carecía de conexiones con instituciones financieras de renombre y su excolega Ver le había advertido los riesgos y complicaciones regulatorias de un mercado que recién estaba naciendo.
CZ lanzó una Oferta Inicial de Monedas (ICO, por sus siglas en inglés) el primer mes de fundación la firma y logró así una valoración de u$s15 millones, todo un récord para una compañía recién creada en este rubro.
En menos de ocho meses, la empresa se había convertido en la mayor plataforma de intercambio cripto del mundo en volumen de operaciones. Y hasta lanzó su propia moneda, Binance Coin (BNB), que hoy es la cuarta con mayor capitalización.
Sin embargo, no todo fue color de rosas. La propia volatilidad del mercado cripto desplomó el valor de BNB por debajo de su cotización inicial. Y CZ tuvo que tomar cartas en el asunto para evitar que la firma desapareciera.
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CZ trabajó en un McDonald's y luego en varias firmas cripto, hasta que desarrolló el
exchange más usado del mundo
En este sentido, lideró una estrategia para descentralizar la operaciones de la empresa y su fuerza laboral se expandió a escala global. De esta forma, Binance se convirtió en un exchange con bajas comisiones y cada vez más atractiva para los usuarios.
"CZ planificó muy meticulosamente el momento en el que debía entrar al mercado. Él suele contar que cuando ingresó en el mundo cripto, vio las posibilidades que había, pero entendía que el mercado no estaba lo suficientemente maduro", señalan a iProUP ejecutivos de la compañía que lo tratan con frecuencia.
Ese momento fue 2016. Según indican quienes lo conocen de cerca, "la oportunidad que aprovechó fue la falta de productos desarrollados por expertos en la materia. Él proviene del mercado tradicional, lo que le permitió aplicar el know how en esta industria".
"A eso debemos sumarle los aportes de He Yi, cofundadora y CMO de la firma. Ella ayudó a posicionar la marca y sentar las bases para que Binance tenga el alcance que tiene hoy", añaden. Así, en febrero de 2018 la revista Forbes lo colocó en tercer lugar en su ranking de fortunas cripto, solo detrás del inventor de Ripple, Chris Larsen, y Joseph Lubin, uno de los cofundadores de Ethereum.
"En realidad, no me importa la clasificación de Forbes, es una métrica sin sentido cuando llegas a cierto punto", afirma CZ cuando se lo consulta, sin dejar de lado su humildad y perfil bajo.
Paulatinamente, Binance se convirtió en una multiplataforma que fue incorporando funcionalidades novedosas para anticiparse a la competencia:
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Binance DEX: un exchange descentralizado, en el que los usuarios intercambian criptoactivos sin intermediarios
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Binance Smart Chain: una blockchain propia en la que funcionan proyectos de finanzas descentralizadas (DeFi) de gran éxito como Pancake Swap
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Contrato de futuros: funcionalidad que muchos rivales más tarde incorporaron
Hoy, los números de la compañía impresionan. Posee:
- 500 empleados en 40 países
- 25 millones de usuarios activos
- Más de 500 criptodivisas y tokens digitales para operar
Investigaciones
No hay finales felices sin sobresaltos. Binance no es la excepción: más allá de liderar las operaciones a nivel global, fue investigada en diferentes países por presuntas maniobras fraudulentas de sus usuarios. En septiembre, el exchange de criptomonedas japonés Fisco la demandó por su presunta participación en el lavado de u$s9 millones robados del hackeo sufrido por una de sus filiales (Zaif) en 2018.
El argumento contra la firma consistió en que los piratas informáticos lograron convertir las monedas robadas y cobrar en Binance debido a las políticas laxas de KyC (conozca a su cliente) de la plataforma. En mayo, el Departamento de Justicia y el Servicio de Impuestos Internos (IRS) de Estados Unidos también abrió una causa en su contra.
El propio CZ salió a aclarar que la empresa sigue de cerca las normas de los reguladores estadounidenses, bloquea usuarios ilegales y utiliza tecnología avanzada para analizar las transacciones a fin de detectar maniobras de lavado y otros delitos.
"Desde Binance nos tomamos muy en serio nuestras obligaciones legales y nos comprometemos con los reguladores y con la aplicación de la ley, de manera colaborativa", señalan desde la compañía.
Binance asegura que cumple con todos los estándares regulatorios para detectar el mal uso de la plataforma
Y agrega que trabajan "arduamente para construir un programa de cumplimiento sólido que incorpore los principios y las herramientas que utilizan las instituciones financieras, para detectar y abordar actividades sospechosas".
Hoy, CZ además de ser uno de los mayores empresarios cripto (con un fortuna de u$s1.900 millones), es también una de las personalidades más escuchadas sobre las nuevas finanzas.
No sólo creó una plataforma de intercambio, también una blockchain en la que se montan los proyectos DeFi del momento. Y superó todas las barreras con una tecnología que viene a revolucionar la historia, como cambió la de aquel joven exiliado que preparaba hamburguesas y hoy "cocina" el futuro de las finanzas.
