La industria de la gestión de activos puso el foco en las temáticas de inversión del futuro en las que ya hay que apostar en el presente. Una de ellas es el auge de la realidad virtual: una tecnología que está llamada a revolucionar el entorno tal como se conoce hoy en día.
Según un informe realizado por Timothée Au Duong, gestor de fondos en Edmond de Rothschild Asset Management (EdRAM AM), la realidad virtual es una temática a la que seguir muy de cerca en los próximos años.
Según explica Au Duong a pesar de los resultados bastante decepcionantes de los últimos años, las previsiones de crecimiento de esta tecnología son muy prometedoras. "Tiene el ambicioso objetivo de simular la presencia humana en un entorno artificial mediante una experiencia de inmersión", comentó.
Para lograrlo, utiliza 3D, la estimulación de los sentidos del tacto y el oído y, la posibilidad de numerosos tipos de interacción. A menudo se asocia con la realidad aumentada, una tecnología afín que pretende superponer información virtual al mundo real.
Ambas despertaron un gran interés hace un tiempo, con el lanzamiento de las gafas de realidad virtual Oculus Rift y el juego Pokémon Go, que causaron asombro cuando dieron a conocer este nuevo universo al público en general. En aquel momento, los especialistas parecían convencidos de que despegarían de forma inmediata.
No obstante, esto no sucedió, y hoy estas tecnologías parecen haber sido relegadas al estatus de rarezas, borradas de la lista de los grandes temas del futuro. Aun así, siguen contando de muchos puntos fuertes y sus perspectivas de crecimiento futuro también son una realidad.
Se trata de una tecnología que suele estar cargada de requisitos previos en cuanto a equipamiento e instalación, lo que la limita a un mercado restringido de aficionados, mientras que la mayoría de los consumidores prefieren optar por soluciones móviles y ergonómicas.
Además, puede requerir un desembolso económico inicial: en 2016, los Oculus Rift y HTC Vive costaban cerca de 700 y 900 dólares respectivamente y, tras añadir el costo de una máquina lo suficientemente potente para una experiencia óptima, la barrera del precio podría haber representado un serio obstáculo, tal y como se observa en el informe.
La ventaja competitiva que puede proporcionar a las empresas
La realidad virtual no solo se dirige al mercado del entretenimiento, sino que tiene la enorme ventaja de ofrecer soluciones innovadoras a las empresas de todos los sectores.
Según un estudio de Goldman Sachs, estas empresas representan casi la mitad del tamaño total del mercado. Uno de los sectores más representativos es sin duda el de la sanidad, que la utiliza tanto en terapia, para exponer a pacientes con fobias a situaciones de estrés controlado, como en cirugía, para permitir operaciones simuladas en cobayas virtuales.
En el comercio electrónico, la tecnología ofrece a los consumidores una experiencia inmersiva e interactiva, cercana a las condiciones de una tienda real. "Por ejemplo, se puede ver un mueble en su entorno, comprobar las dimensiones de un electrodoméstico o probarse la ropa virtualmente", detalla Au Duong. Todas estas posibilidades añaden un verdadero valor añadido en un campo que ya se está desarrollando rápidamente.
En la industria del automóvil, también, esta tecnología se sitúa en el centro del proceso de fabricación. Ford Motors, por ejemplo, la utiliza para evaluar la experiencia del conductor en prototipos virtuales, lo que le permite liberarse de la fabricación de modelos físicos y, la empresa WayRay emplea la realidad aumentada para mostrar hologramas de asistencia al conductor en el parabrisas que analizan las señales de tráfico y los obstáculos en tiempo real, ahonda el experto de Edmond de Rotcschild AM.
Así, sea cual sea el ámbito, la realidad virtual permite a las empresas ofrecer nuevos servicios, diferenciarse y ganar en competitividad. Según Capgemini, el 82% de las empresas que implantaron soluciones de realidad virtual o aumentada obtuvieron resultados que cumplen o superan las expectativas. Por lo tanto, se sienten automáticamente menos disuadidas por el coste potencialmente elevado de la tecnología.
Un entorno más que favorable: Apple o L'Oréal ya vieron el potencial de esta tecnología
Las opiniones sobre el futuro crecimiento de la realidad virtual y aumentada siguen siendo mixtas, pero ya hay factores que avalan su creciente importancia en la sociedad. En primer lugar, los avances tecnológicos previstos en campos como el 5G o la Inteligencia Artificial bien podrían permitirle superar sus límites.
"En un futuro próximo, el 5G supondrá una velocidad de datos hasta 10 veces mayor, así como una conexión más estable", remarcó Au Duong. Por lo tanto, a su modo de ver, será posible que las interacciones a distancia se produzcan casi en tiempo real, lo que representa una gran ventaja para los usuarios.
En segundo lugar, a medida que se desarrolle, el hardware será más asequible a la vez que ofrecerá una mejor experiencia. "La nueva versión de Oculus Quest de Facebook es un ejemplo de ello, ya que es más ligera, más rápida y un 25% más barata", detalló. A medida que la tecnología se hace accesible a más personas, necesariamente impulsará la demanda de más contenidos.
Mientras, Au Duong cree que desde una perspectiva más cíclica, la virtualización se considera una solución adecuada para el difícil periodo actual, ya que permite mantener el contacto en condiciones cercanas a la realidad.
Los avances tecnológicos previstos en campos como el 5G o la Inteligencia Artificial bien podrían permitirle superar los límites de la Realidad Virtual
Las empresas captaron el potencial social de la tecnología, como demuestran los numerosos desarrollos en el sector. "Como ejemplo reciente, podemos citar a Apple, que compró NextVR, una empresa especializada en la retransmisión inmersiva de eventos deportivos, conciertos y conferencias", afirmó.
"También podríamos mencionar a L'Oréal, que ha desarrollado una gama de maquillaje virtual sólo disponible durante las videoconferencias", añadió.
Los reyes del futuro dentro del espacio de la realidad virtual
Actualmente, las previsiones de crecimiento de la realidad virtual y aumentada son prometedoras, en comparación con el anticlímax de sus primeros años. Según Allied Market Research, se estima que el tamaño de su mercado alcanzará los 570.000 millones de dólares en 2025, es decir, casi diez veces su tamaño actual.
PWC opina que incluso tiene el potencial de alcanzar 1,5 billones de dólares en 2030. Por tanto, la oportunidad es más a largo plazo que para este año o el siguiente. En efecto, los costos de I+D que conlleva no se traducen en una rentabilidad inmediata para las empresas, lo que tiene como efecto limitar el número de actores en el sector.
"No es de extrañar que los más importantes sean nada menos que los gigantes tecnológicos Google, Apple, Facebook, Samsung y Microsoft, además de algunos editores de software como Unity Software o Dassault Systèmes", destaca Au Duong.
La innovación sigue siendo el motor de la tecnología y hay un gran número de proyectos de investigación que tratan de imaginar el alcance de las posibilidades que ofrece la tecnología. De este modo es muy probable que, como ocurre con todas las tecnologías emergentes, la integración de la realidad virtual y aumentada en la sociedad no se produzca de la noche a la mañana.
Fuente: Business Insider