La Reserva Federal estadounidense (FED) remarcó la necesidad de aplicar más subas en las tasas de interés, pese a signos en los últimos meses de que la inflación se está moderando en ese país.
Tanto el presidente de la FED del Estado de Atlanta, Raphael Bostic, como su colega de Richmond, Thomas Barkin, afirmaron que la inflación sigue siendo muy alta y que todavía falta un largo trecho para retrotraerla a la meta de la entidad monetaria del 2% anual.
Bostic consideró que las tasas deberían ser superiores al 5% frente al nivel actual entre 4,25% y 4,50%, según informó la agencia de noticias Bloomberg.
En diciembre, de hecho, la mayoría de los funcionarios de la FED proyectan que las tasas estarán por encima de dicho rango para fines de este año, sin previsiones de recortes en las mismas, algo que recién quedaría para 2024.
Además, se señaló en las mismas que la FED necesita "más evidencia para confiar en que la inflación está en un camino sustentable a la baja".
En noviembre pasado la inflación fue del 7,1% anual, lejos de la meta de la FED, aunque por debajo del pico de junio pasado de 9,1% que representó un récord en más de 40 años.
Jerome Powell
La batalla de la FED contra la inflación
Con el objetivo de llevar los precios a la baja, la FED llevó adelante uno de los periodos de subas de tasas más veloces de su historia, con siete aumentos desde marzo del año pasado, momento en el cual las mismas, con el objetivo de impulsar la economía frente a la pandemia, se ubicaban en niveles cercanos a cero.
La autoridad monetaria tiene previsto reunirse entre el 31 de enero y el 1° de febrero para ajustar nuevamente la tasa de referencia.
El mercado especula que, con los signos de desaceleración de la inflación, la FED siga con los aumentos pero, en lugar de una nueva suba de 50 puntos básicos como la de diciembre pasado "la primera en ese rango tras una seguidilla de cuatro alzas de 75 puntos-, vire hacia una modificación al alza de 25 puntos.
"Seguramente continuarán subiendo las tasas en la reunión monetaria de fines de este mes y de nuevo en marzo, pero seguramente lo harán en 25 puntos básicos en lugar de 50", opinó, por su parte, el ex gobernador de la FED, Randall Kroszner.
Además del índice mensual de precios, otro signo de moderación lo dio la evolución de los salarios, cuyo incremento en diciembre fue menor al previsto, según se reportó oficialmente.
Este dato le da más aire a una FED que considera que los mismos pueden presionar al alza a la inflación.
Del mismo modo, la entidad considera como preocupantes los buenos números del mercado laboral, al existir un "desbalanceo" con una oferta de trabajadores insuficiente frente a la demanda.
Esto, desde la mirada de la FED, también puede llevar al alza a los sueldos y, por ende, a la inflación.