Al igual que otras industrias, la automotriz está atravesando la llamada "nueva revolución industrial" o "revolución 4.0". Con el foco puesto en la automatización, la sustentabilidad y la electrificación, los jugadores más importantes de este sector miran con buenos ojos las oportunidades que llegan con las nuevas tecnologías.
Según el think-tank C230, esta actividad tiene una oportunidad enorme en la región. Tal es así que ocho de cada diez personas relevadas en una investigación aseguran que están dispuestas a adquirir un auto eléctrico. Y una proporción similar considera que el gasto de recargarlo aliviará bastante su presupuesto mensual.
Desde la consultora Frost & Sullivan indican que el mercado de vehículos autónomos rondará los u$s180.000 millones, con un importante porcentaje (65%) vinculado a servicios de movilidad compartida. Ante semejante oportunidad, el volantazo de las automotrices no se hizo esperar.
Con la vista puesta en este cambio radical de una industria con un siglo de historia, Citroen viene acelerando su proceso de transformación.
"Citroën está apuntando su negocio pensando en lo que necesitan las personas, en resolverles la vida. Nuestra propuesta se dirige tanto a la electrificación como al carsharing", afirma a iProUP Soledad Bereciartua, gerente de Relaciones Públicas de Citroën, quien asegura que la compañía se encamina a brindar "movilidad y servicios".
Además, indica que la experiencia europea y norteamericana de la marca (mercados en los que el uso de autos compartidos ya es moneda corriente) incentivará la llegada de este tipo de plataformas a la región. "Esto nos empuja a cambiar la mente de manera constante y evaluar todo el tiempo nuevas formas de llegar al cliente", completa.
Un futuro no tan lejano
Más allá de los primeros modelos con asistencias al manejo, la firma persigue un futuro inmediato que tiene como pilares la automatización y electrificación. Así lo demostró en el Salón del Automóvil en Ginebra a comienzo de este año. La compañía aprovechó la cita para exhibir dos modelos:
- Ami 19_19: también es autónomo y eléctrico, pero el target al que apunta es diferente. Con 800 km de autonomía, está pensado para las largas distancias. En su interior, las butacas giran y forman un living, donde se despliega una gran pantalla. Además, incorpora un asistente inteligente al que los usuarios pueden pedirle lo que quieran.
- Ami One: es un pequeño auto de dos plazas, eléctrico y autónomo. Citroen no sólo busca que sea accesible, sino focalizarlo al modelo de carsharing
"Los dos concept cars que mostramos son claros ejemplos de hacia dónde queremos ir. Y no en el largo plazo sino en los próximos cinco años. En ese lapso, los vehículos que vayan a lanzarse absorberán mucho de estas primeras experiencias", asegura la ejecutiva a iProUP.
Con respecto al modelo más avanzado, Bereciartua asegura: "Se trata de un concept car increíble ya que presenta el verdadero ADN de la marca".
"André Citroën quiso realmente democratizar la industria automotriz cuando produjo de manera estandarizada un gran volumen de vehículos y generó una fuerte baja de precios. Esto es lo mismo que ahora queremos lograr con el Ami One", completa.
El plan de la compañía es que las unidades de este modelo estén distribuidas por las ciudades y que puedan ser retiradas con una app del smartphone. Y que al auto sólo se le indique el punto de destino para que vaya solo. Esto permitirá que cualquier usuario, incluso sin permiso de conducir, tenga acceso a esta nueva forma de movilidad.
"Cuenta con piloto inteligente, tecnologías de conducción autónoma y un asistente personal que interacciona de modo espontáneo con los pasajeros, permitiéndoles a cada uno de ellos disfrutar de una nueva experiencia de viaje", agrega la directiva, quien detalla: "Buscamos ir más allá de la conducción".
Cercanía con el cliente
En busca de transformar la forma de interactuar con el cliente, desde la compañía explican que la digitalización llegó a todos los rincones de la empresa. Por eso, desarrolló la plataforma e-reservation.
Esta experiencia digital permite que un usuario reserve una unidad por Internet -a través de un proceso simple, confiable y dinámico- para que el concesionario más cercano tome contacto con él dentro de las 48 horas. Si bien la compra no se cierra de online, esta preventa apunta a digitalizar un proceso que históricamente fue presencial.
Asimismo, Citröen lanzó Advisor, una plataforma digital, simple e intuitiva para que los clientes puedan puntuar y dejar comentarios de las experiencias vividas en las agencias de autos y, claro está, opinar sobre los productos.
"Es similar a Trip Advisor. Las personas -tanto las dueñas de autos como los potenciales usuarios- obtienen experiencias reales", dice Bereciartua. Ingresan y pueden puntuar al concesionario, al vendedor y a los productos. "Así se personaliza la experiencia y podemos saber qué piensan de nuestros vehículos o si fueron bien atendidos", agrega.
El sitio cumplió dos años de actividad en la Argentina y refleja resultados positivos: una puntuación promedio de 4,4 sobre 5 estrellas da cuenta del éxito de una estrategia de relacionamiento basada en la confianza en los productos y servicios y nutrida por la opinión de sus propios clientes.
Desplegado en más de 20 países alrededor del mundo, Citroën Advisor forma parte de un plan integral de relacionamiento global, orientado a brindar transparencia. "Es una herramienta muy útil incluso para los que todavía no tienen un Citroën y quieren opiniones objetivas de modelos, concesionarios y vendedores", completa.
Camino a la autonomía
Imaginar vehículos que no requieran de un conductor humano para funcionar ya no resulta tan difícil. Lo que antes parecía ciencia ficción hoy está cada vez más cerca, con experiencias reales en algunas de las ciudades más importantes del mundo.
El lanzamiento del Citroën C4 Cactus es una pequeña muestra de estos primeros pasos. Lanzado a mediado del año pasado, cuenta con 12 ADAS (asistentes de conducción) que lo convierte en semiautónomo, mientras que "el competidor más cercano de su segmento solo tiene 4 ADAS".
Desarrollado a partir del programa Citroën Advanced Confort, este SUV combina la tecnología con la ampliación de la seguridad dentro de un vehículo inteligente. Algunas de sus principales características:
- Active Safety Brake y Alerta de Colisión: sistema automático de frenado de emergencia para reducir la velocidad de impacto o evitar un choque frontal si el conductor no puede reaccionar. En velocidades de entre 5 y 140 km/h, el sensor activa el "stop" automático cuando detecta riesgo de accidente.
- Alerta de cambio involuntario de carril: ayuda a prevenir una distracción del usuario. Utiliza una cámara para reconocer franjas horizontales sólidas o punteadas e identifica el cruce involuntario de las marcas longitudinales de tráfico en la calzada.
- Alerta de falta de atención del conductor: evalúa si quien maneja está distraído a partir de cambios de trayectoria en relación a las marcas de carril. El sistema interpreta el comportamiento del coche y conductor (señales de fatiga o falta de atención y acciona el primer alerta). Recibe el mensaje "¡Manténgase atento!" junto a una señal sonora.
- Indicador de descanso recomendado: informa al conductor cuándo es hora de una pausa. Envía una advertencia si no se detuvo tras dos horas a conducir a más de 70 km/h.
Si bien el Citroën C4 Cactus funciona con combustible, la representante de Citroën asegura que los primeros modelos eléctricos, que ya circulan en Europa, desembarcarán en la Argentina y la región entre 2021 y 2022.
"Estamos dándole a los clientes la confianza de que estos vehículos llegarán y serán para uso diario. Después se irá desarrollando una infraestructura acorde", explica.
Citroën ya puso primera para el próximo gran desafío de la industria: coches eléctricos, autónomos y que puedan ser alquilados fácilmente desde una app, en vistas a integrantes de una generación que ya no tienen entre sus prioridades ser dueños de coches y que apuntan a aprovechar todas las formas de la movilidad.