En los últimos años, el BIND Banco Industrial se fue consolidando como uno de los referentes de la City en materia de transformación digital. Su estrecho vínculo con el mundo fintech, la filosofía open banking de sus directivos y su apuesta constante a la innovación financiera reflejan la impronta de Andrés Meta, vicepresidente y CEO del Grupo BIND, quien en 2013 le dio un vuelco completo a la entidad que fundó su padre en 1956 y que cuarenta años más tarde adquirió el Nuevo Banco de Azul.
En diálogo con iProUP, Rosario Flores Vidal y José Marcos González Pereira, los dos ejecutivos que comandan esta modernización, revelan los detalles de los próximos pasos.
"El sistema financiero del futuro será abierto y colaborativo", anticipa sin dudarlo Flores Vidal, gerente ejecutiva de Productos en BIND. De hecho, agrega, así es hoy en Europa y en los Estados Unidos, aunque reconoce que "en Argentina va a llevar algunos años".
"Generar un sistema abierto implica que una compañía pueda interactuar con nosotros sin la necesidad de acción humana. Que se conecte el core o el sistema de gestión de esa empresa con nuestro core bancario a través de una API (Interfaz de Programación de Aplicaciones, por sus siglas en inglés)", explica la ejecutiva.
En este punto, destaca a API Bank, el producto con el que la firma apuesta a instalar el concepto de banco integrado en el país y que ya es utilizado no sólo por grandes empresas sino por más de 20 fintech para mejorar la experiencia de sus usuarios.
A su lado, José Marcos González Pereira, responsable de Canales Electrónicos del BIND, expresa: "En el mundo de la interconexión eficiente, los jugadores que más se benefician de este nuevo modo de interactuar con los clientes, a través de API, son las fintech".
Esta plataforma es "el primer paso del open banking", sostiene Flores Vidal, y destaca que para llegar a ese concepto, "que implica estar realmente abiertos de otra manera, aún faltan normas y regulaciones". Una de ellas es la PSD2 (Payment Service Providers) que implementó Europa y con la que obligó a las entidades a ofrecer sus "open API" a las fintech y proveedores de servicios de pago en general.
A contramano de las críticas que en los últimos días reflotaron desde las asociaciones de bancos y reflejando su filosofía "pro-fintech", como definen en la compañía, tanto González Pereira como Flores Vidal ven en estos nuevos jugadores un aliado para "que se incorpore al sistema financiero más del 50% de la población que hoy no está bancarizada".
El banco en todos lados
A la hora de hablar del futuro del sector, el responsable de Canales Electrónicos del BIND lanza un concepto poco escuchado en las calles del microcentro porteño: la omnipresencia. ¿Qué implica que un banco sea omnipresente? Que esté detrás de cada actividad que realicen los clientes pero de un modo casi imperceptible.
"La realidad es que muchas veces los usuarios no quieren sacar un crédito: buscan acceder a algún bien o servicio pero, al no tener dinero, requieren de ese préstamo. Pero el objetivo no es el crédito en sí mismo", razona González Pereira.
"En el futuro, las personas estarán acostumbradas a obtener aquello que quieren y lo que vaya a ocurrir por detrás -es decir en el mundo financiero, legal o donde sea-, estará omnipresente. Es decir, va a estar, pero el usuario no se dará cuenta", sostiene.
Para el ejecutivo, esto provocará que la forma de interactuar con los clientes sea –paradójicamente– con menos interacción. "Ellos quizá no vean que el banco se los está dando. Más bien, que están consiguiendo lo que ellos quieren y que ese paquete incluye todo lo que necesitan", explica.
Según Flores Vidal, la entidad cuenta con un sector de business intelligence que desde hace aproximadamente un año viene trabajando con distintos modelos y algoritmos para definir comportamientos de los consumidores. Además, ya empezó a elaborar algunos proyectos relacionados con la inteligencia artificial.
El BIND cuenta entre sus filas con Poicenot, una firma que no sólo lidera la aceleración digital de la compañía sino que además es parte de la Cámara Fintech Argentina y contribuyó con la creación de distintas empresas fuera del Grupo.
"La inteligencia artificial ofrece un montón de información que ayuda a la toma de decisiones y a entender a nuestros usuarios para mejorarles sus experiencias. Es una pata fundamental y muy importante", destaca la gerenta ejecutiva.
Entender al cliente para anticipar su jugada
En ese sentido, González Pereira, aporta más detalles sobre hacia dónde apuntan los trabajos que están realizando en la entidad, tanto en inteligencia artificial como en el uso de Big Data.
"Hoy, los bancos son más bien transaccionales. El cliente se acerca, le pide realizar determinada operación y el que la tracciona es generalmente el usuario", asegura.
"Si contamos con más inteligencia para medir y entender el comportamiento de los usuarios, seremos cada vez más proactivos y les ofreceremos aquello que requieren incluso antes de que lo pidan. Más aun, en el momento en que realmente les resulte oportuno o antes de que sientan la necesidad", agrega.
Actualmente, ejemplifica, esto ya se utiliza en otros segmentos, como cuando alguien está por viajar y le llega una oferta para adquirir un seguro de salud. "En realidad, lo que hubo detrás es una interpretación de lo que la persona está haciendo y una idea de aquellon que podría necesitar", sostiene.
En estos casos, el ejecutivo advierte que hay que ser muy cuidadoso para no ser invasivo o insistente. "La línea entre agregar valor y abrumar es muy delgada", reconoce. Por eso, explica que usar bien la inteligencia artificial sirve para organizar las cosas y entender realmente a cada usuario de modo tal de brindarle un servicio adicional.
Hoy, el banco ya está testeando este tipo de "algoritmos semi-inteligentes o que tienen la capacidad de aprender", como los define González Pereira, pero en paralelo a otros proyectos ya operativos, para entender cómo un cliente va reaccionando a cada información o estímulo.
"Estamos efectuando pruebas para ver qué tan confortables nos sentimos con ellos o qué tanto realmente vemos que van capitalizando. Y los hacemos competir contra las decisiones naturales que tomamos dentro de la compañía, siguiendo los procesos tradicionales", detalla.
Según el ejecutivo, en la medida en que sean exitosos en seleccionar esos algoritmos y entrenarlos podrían llegar a aplicarlos en varios procesos que les puede dar mucho valor en cuanto a la capacidad de entender una decisión.
"Si da buenos resultados, la idea es capitalizar esa ventaja competitiva y ponerla al servicio de la eficiencia o de la mejora, para anticiparnos y resolverles los problemas de los clientes en el momento oportuno o incluso antes de que les surja una necesidad", sostiene.
También en base al Big Data y a la información que manejan los bancos, González Pereira imagina la posibilidad de ofrecer API que sean mucho más que transaccionales, como las que existen hoy en el mercado y que den un valor agregado.
En cuanto a la posibilidad de ofrecer monedas digitales –como el Bitcoin–, Rosario Flores Vidal señala que existe una clara traba que es el regulación actual.
"Somos un banco bastante abierto, que podemos hasta pensar en generar una interacción para que los clientes compren estas divisas a través de Home Banking, pero hay muchas aristas desde el punto de vista legal y normativo con respecto al Banco Central y a otros actores que faltan para que evolucione la relación de estas monedas con el sistema financiero ", destaca.
Lo que viene
En el proceso de transformación digital, el BIND ya aplicó la biometría para que las personas ingresen con la huella digital al Home Banking. En las sucursales ya enrolaron al resto de sus clientes, tanto con esta tecnología como con reconocimiento facial.
"La biometría la vamos a emplear para facilitar la forma en que los usuarios se autentican de manera presencial o remota. La idea es que el Home Banking la incorpore como medio de identificación de doble factor", explica González Pereira.
En concreto, el BIND se entusiasma con que el concepto de open banking se consolide en el país y sabe que los ganadores serán quienes sepan ofrecer la mejor experiencia al usuario.
"Creemos que lo que falta es que esto no sea un banco entre muchos o un par de fintech, sino un modelo de integración orgánico de todos los jugadores que forman parte del sistema financiero", resume el responsable de Canales Electrónicos.