Este lunes se organizó en la sede de la Secretaría de Emprendedores y Pymes (Sepyme) que dirige Mariano Mayer, un encuentro con los titulares de los emprendimientos que recibieron capital a partir de dos de los fondos creados por el Gobierno para impulsar empresas de alto impacto.
Bajo el formato de taller, el objetivo fue darles a conocer herramientas a los emprendedores y delinear los próximos pasos para que sus proyectos puedan conseguir nuevos inversores en futuras rondas de negocios. Además, referentes experimentados del ecosistema local les contaron qué es lo importante para expandir sus compañías regionalmente y gestionar un equipo de trabajo para consolidar el crecimiento.
"Lo que veníamos pensando hace un tiempo era qué más podíamos hacer desde el Estado, más allá de las inversiones y del apoyo que se le dio a las aceleradoras e incubadoras, y vimos una oportunidad de acompañar a empresas en estados intermedios de desarrollo, las que quizás ya recibieron alguna inversión, para que puedan dar el siguiente paso y seguir escalando", describió Tomás Taussig, Director Nacional de Capital Emprendedor.
"Esto significa asistirlos en ese momento en el que tienen que empezar a multiplicar el ritmo de crecimiento del equipo, entrar a nuevos mercados, y todo eso implica algo que es complejo más allá del talento que puedan tener los fundadores", prosiguió el funcionario.
Para que pudieran realizar sus consultas y conocer de primera mano experiencias de emprendedores argentinos que transitaron ese camino, Taussig y Nicolás Berman, exMercado Libre y actual socio de KaszeK Ventures, llevaron adelante esta capacitación, que contó también con la presencia del secretario de de Emprendedores y Pymes, Mariano Mayer.
En 2018 comenzaron a concretarse los desembolsos del las partidas designadas por el Estado Nacional para el Fondo Fiduciario para el Desarrollo del Capital Emprendedor (FONDCE), que le permiten al Gobierno co-invertir con los privados –fondos de VC, aceleradoras e incubadoras- exclusivamente en proyectos de base científica, agronegocios, biotecnología y fintech argentinos.
Este "fondo de fondos" viene destinando aquella partida original de mil millones de pesos de las arcas públicas bajo la premisa –adoptada del modelo israelí de desarrollo emprendedor- de que tener al Estado como "socio" es un aval que atrae al capital privado -tanto extranjero como local- para encolumnarse detrás de proyectos de alto potencial.
Los mecanismos de funcionamiento del FONDCE fueron tres. El primero, un Fondo Semilla que otorga préstamos de honor de hasta $250.000 a tasa cero a emprendimientos argentinos con menos de cinco años de trayectoria.
Esto se canalizó a través de la red de incubadoras del Ministerio de Producción. Quien recibe el capital tiene un año de gracia y luego cinco años para devolver el préstamo, pero si la startup es adquirida, deberá retornar al FONDCE tres veces el financiamiento que recibió.
El Fondo Semilla invirtió ya 280 millones de pesos en alrededor de 1200 startups locales, entre fines de 2017 y el primer semestre de 2019.
El taller que brindó la Sepyme el 23 de septiembre no incluyó a los dueños de estas startups. "Para estos préstamos tenemos un perfil mucho más amplio respecto de a qué vertical se dedican, cuánta innovación o ciencia aplican, etc. Y muchos de ellos no siguen la lógica de capital emprendedor sino que su financiamiento es más del tipo Pyme en esta instancia. Vemos que los desafíos que tienen no son los mismos que los de las firmas que podían aprovechar este taller y veremos de apoyarlos mediante otras herramientas", indicó Taussig.
El segundo mecanismo es aquel en el que el Estado co-invierte con las aceleradoras de empresas (Fondo Aceleración). En este caso, según pudo confirmar iProfesional con fuentes de la Sepyme, hasta el primer semestre de 2019 se desembolsaron más de 7,4 millones de dólares, de los cuales 4,2 millones fueron del FONDCE (el resto fueron fondos privados), en 48 inversiones conjuntas público-privadas.
Sobre las firmas que ya están siendo aceleradas, el Director de Capital Emprendedor dice haberse visto sorprendido por el potencial del vertical de biotecnología. "Más allá de todo lo que se dice sobre los desafíos culturales e históricos para la vinculación del sistema científico y la industria, están ocurriendo algunas transferencias muy interesantes y de alto potencial", declaró.
"Tampoco nos esperábamos el empuje del vertical de tecnología orientado a la educación, donde tenemos cinco proyectos invertidos", amplió.
El tercer mecanismo es cuando el Estado co-invierte con fondos de Venture Capital seleccionados, que en este caso fueron NXTP Labs, Draper Cygnus y Jaguar VC.
Cada una de esas firmas recibió u$s12 millones del FONDCE para emprendimientos originados por líderes y equipos argentinos, a cambio de un compromiso de recaudar por lo menos una contraparte de u$s18 millones de capital privado cada uno para el mismo fin.
Estos desembolsos estatales se realizaron a través del Fondo Expansión. Una de las firmas elegidas es Sirena, una aplicación que integra las comunicaciones de los clientes de una empresa que llegan a través de WhatsApp, Facebook, Instagram, chatbots y sitios web, en una misma plataforma. Tanto esa compañía como la fintech Apperto fueron seleccionadas por NXTP Labs.
Por otra parte, una firma que investiga terapias de biotecnología contra el cáncer, alzheimer y enfermedades cardiovasculares, llamada Alxerion, fue elegida a través de Drapers Cygnus.
Sobre el cierre de esta nota, Taussig confirmó que se confirmó el desembolso en un cuarto proyecto ya aprobado por el comité que analiza las inversiones del Fondo Expansión. Será en la biotecnológica Stämm, también seleccionada por Drapers Cygnus.
Con este cuarto proyecto, el Fondo Expansión lleva invertidos 2.927.076 millones de dólares, de los cuales USD 1.114.968 fueron aportados por el Estado y el resto por socios privados.
Más aún, algunas de las empresas que recibieron este apoyo lograron también acelerar su crecimiento, al punto de estar en medio de su siguiente ronda de financiamiento, lo cual valida el proyecto y el modelo de negocio.
Es importante remarcar que el 100% de los fondos designados al FONDCE –es decir, aquella partida original de mil millones de dólares- se encuentran ya comprometidos para el financiamiento de proyectos a través de estos tres vehículos y no se pueden usar con otros fines.
No obstante, la selección, análisis y aprobación de dichas inversiones en comité es un proceso que lleva tiempo, por lo cual hay un período de transición entre la selección del proyecto y que se efectiviza el desembolso.
En total, desde el comienzo del programa hasta el primer semestre de 2019, las compañías que recibieron efectivamente el financiamiento del FONDCE totalizan más de 1250, contando los proyectos apoyados por los tres fondos.
Por último, consultado por el impacto que la reciente crisis económica y devaluación de la moneda argentina ha tenido en las firmas financiadas, Taussig admite que las que probablemente se vean más afectadas sean las que reciben capital Semilla, "en el caso de que tengan su foco en el mercado interno y accedan solo a financiamiento en pesos".
"Pero para el caso de las empresas de alto impacto, con foco global, que levantan justamente el capital en dólares y en muchos casos tienen ya operaciones en otros países, este no es un problema que cambie su ecuación. Tener una visión regional un poco 'diversifica' el 'riesgo país', pero de todas maneras tener el corazón de tu operación en un país que está en recesión sin dudas que te pega tanto por el dólar, las tasas y la incertidumbre que pueda frenar a potenciales inversores", reconoció el funcionario.