Cuando Wayra nació en 2011, lo hizo bajo la estructura de aceleradora de negocios de Telefónica. Su objetivo era, en concreto, detectar buenas ideas de negocios con una palanca digital, a través de convocatorias para emprendedores.
Bajo esta estructura, la firma apoyaban a unas diez empresas con un programa estándar, que consideraba inversión, oficina y mentorías, entre otros.
Sin embargo, en 2015 empezaron a transformarse en un "hub de innovación abierta" para la compañía de telecomunicaciones, con capacidad para invertir en capital de riesgo en el escalamiento de startups, replicando el modelo que la matriz española viene implementando en otros países.
"Es demasiado costoso, arriesgado y toma tiempo. Es más fácil abrirse y trabajar con emprendedores, en una forma ganar-ganar, no comprando ni absorbiendo una empresa, sino haciendo algo que sea útil para ambas partes", aseguró en diálogo con Diario Financiero de Chile Claudio Barahona, country manager de Wayra Chile.
Asimismo, comenta que frente al desafío que impone la transformación digital, una empresa del tamaño de Telefónica no puede construir todo.
Con el tiempo, explica, se dieron cuenta de que Telefónica podía aportar más a la fase de escalamiento de una startup digital que a su creación, dándole acceso a clientes y a ser proveedor de la compañía a nivel local e internacional.
"Chile es un país con un mercado muy chico, entonces la única manera de crecer es jugar el juego global y escalar. Y la mejor forma de hacerlo es mediante una gran compañía que esté en varios países", afirmó el ejecutivo.
Pero en 2018 llegó un nuevo modelo: el de Venture Capital. Con nuevos objetivos en mente, desde la firma cambiaron las convocatorias por un área de scouting (búsqueda) y apalancaron recursos propios para ayudar a escalar a las startups seleccionadas.
"Ya no se trata de apoyar ideas y acelerarlas, sino de apoyar a empresas con un producto creado y probado, con dos o cuatro clientes, con diez a 20 empleados, y que quieran pasar al siguiente nivel, en usuarios y en países", señala Barahona.
El cambio de modelo viene apalancado con recursos para capital de riesgo. A nivel global Wayra invierte US$ 10 millones y los planes en Chile son invertir US$ 400.000 al año, directamente a un emprendedor o bien en rondas de inversión serie A en las que participan junto a fondos de inversión y otros corporate venture capital.
Barahona comenta que en cada startup invierten entre US$ 50.000 y US$ 200.000 y entre las tres, invirtieron US$ 400.000 el año pasado.Por cada inversión, Wayra se queda con una participación que va de un 4% a un 10% máximo, y en caso de venta de una solución a clientes de Telefónica, se quedan con una comisión cuyo monto depende caso a caso.
"El aporte va más allá de los fondos. El core de Wayra es lo que llamamos el ´fit´, desarrollo de negocios entre las startups y Telefónica. Cómo podemos trabajar juntos", precisa.
El negocio de Telefónica es digital, por lo tanto, en esta búsqueda de startups privilegian aquellas que tienen soluciones en inteligencia artificial; ciberseguridad, big data, cloud, IoT, soluciones digitales para empresas, hogar inteligente y auto conectado, entre otras.
Wayra cuenta con un portafolio de 23 empresas. Y de ellas, 15 han logrado concretar algún negocio con Movistar Chile, y la meta es duplicar esta cifra en 2019, proyecta.
Además, este año invertirán en cuatro startups, ya tiene dos en vías de concretar en el segmento de robotización y algoritmos de inteligencia artificial. "Nos faltan al menos dos más, y nos enfocaremos en el segmento personas, cómo damos más valor a los clientes", adelanta.