La compra de una auto es una tarea que requiere una gran investigación por parte del usuario. Internet cumple un rol crucial para averiguar qué modelo será el adecuado según el presupuesto y las necesidades.
La tecnología hoy atraviesa por completo la experiencia de venta y aquellos que usan las herramientas digitales pueden hacer una gran diferencia.
Víctor Moure y Gastón García trabajaron en la industria automotriz y, tomando nota de los desafíos que encontraron, crearon Redoo en 2022.
Comprar un auto: cómo tomar la mejor decisión
"Queríamos repensar el sector, mejorándolo en una industria con manos de obra intensiva. Queríamos mejorar la relación con el cliente y que se vuelva a interesar", menciona Moure.
Y agrega: "El contexto hace que se necesite más tecnología, lo ayudamos a poder elegir su producto indicado con los colores, capacidad de carga o las variables más soft".
De esta manera, los emprendedores buscaban ayudar a los concesionarios a aggiornarse a eso es que surgió Redoo.
Los Founders de Redoo, Victor Moure y Gastpon García
Experiencia e innovación
Moure y García contaban con más de 25 años de experiencia en la industria: se conocieron cuando trabajaban en Iveco.
Moure es ingeniero industrial y García administrador de empresas. Aprovechando el expertise de cada uno, comenzaron con un proyecto de automatización para un cliente y, de a poco, fueron escalando el negocio. Al día de hoy trabajan con 40 concesionarios y procesan 260.000 mensajes de WhastApp al mes.
Para dar vida al emprendimiento invirtieron u$s150.000 de su bolsillo y su propuesta de valor se basa en ayudar a las firmas a dejar atrás los procesos analógicos y convertirlos en data útil para tomar decisiones.
Una marca diferente
"Una de las formas era poder facilitar el proceso de patentamiento. Queríamos generar un mayor valor en un mercado cambiante. Buscamos generar una revinculación del cliente", explica el founder.
Una diferencial de Redoo es que ambos fundadores entienden de la industria automotriz y hablan el mismo idioma que los concesionarios.
"Más allá de la integración de algunas herramientas digitales, la realidad es que los procesos todavía son analógicos porque no se repiensa la vinculación con el cliente, sino que se sigue haciendo lo mismo pero con algún sistema de gestión o un CRM", plantea Moure.
Esa realidad fue lo que lo llevó a pensar cómo se podía inyectar tecnología a la industria para realmente revolucionarla.
"Hoy el cliente te exige que le respondas en un tiempo menor a una hora. Todo este tipo de situaciones cambia el paradigma de consumo", explica el emprendedor.
Desde Redoo detectaron que el 30 % de las interacciones con los clientes suceden fuera de la ventana de atención al cliente, por lo que la automatización resulta un aliado clave para el negocio.
La plataforma de Redoo, entonces, permite dar una respuesta inmediata, sin importar el día y la hora, para tareas automatizables como dar un turno, informar sobre un producto o conocer un precio.
"Vimos en primera persona la insatisfacción de personas que no podían agendar un turno de mantenimiento e infinidad de casos en los que no te atienden el teléfono. Esa experiencia nos llevó a crear una solución. Nos preguntamos cómo podíamos hacer que el proceso fuera más eficiente", cuenta Moure.
Hoy trabajan con los principales concesionarias de Argentina que representan marcas como: Toyota, Chevrolet, Renault, Volkswagen, Nissan o Iveco.
No sólo eso: más del 20 % de la red de puntos de venta de Toyota elige su solución para ser más eficientes y mejorar la experiencia de sus clientes.
Toyota, una de las marcas que la utiliza
Crecimiento y exportación
Incluso ya están trabajando en un desarrollo para distribuidores de YPF Gas que consiste en un robot que vende, despacha y factura garrafas de gas.
"Tratamos de tener un producto de alta calidad a un costo que no implique un gasto, sino una inversión, con una misión de retorno", menciona Moure.
La empresa, que ya factura más de $20 millones mensuales, ahora está desarrollando una inteligencia artificial que tiene la capacidad de diagnosticar reparaciones.
Se trata de un robot al que se le puede consultar un código de falla y responde cómo reparar ese vehículo.
"A través del asistente virtual se puede conocer qué opina el cliente. Esto democratiza la estructura de un concesionario, donde ese conocimiento no depende de las personas, sino de quien ejecute", agrega el fundador.
A futuro, la startup planea seguir creciendo en cantidad de interacciones y se anima a pensar, incluso, en trascender fronteras.
En 2024 empezaron a trabajar en Ecuador y están en proceso de entrar a Chile y México. "Estamos creciendo en la región, son procesos que demandan mucho tiempo y calidad".
Y culmina mencionando que este año, si bien la demanda se está retrasando, es vital, poder brindar propuestas que sean útiles para el usuario.
" Hoy el usuario está optando por otras alternativas de movilidad que no sea la propia, pero nosotros asumimos este nuevo contexto y buscamos alternativas para que el usuario no tenga que usar su propio auto".