Si la década que terminó dejó un gran números de grandes compañías basadas en las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, consultoras como Accenture ya han advertido en las últimas semanas que la economía que está por llegar es la economía de la posdigitalización.
Se oirá menos hablar de las famosas TIC y quizá más de las DARQ, un concepto acuñado por esta misma firma de consultoría y que son las siglas —en inglés— de registros distribuidos en cadena —como el blockchain—, la inteligencia artificial, la realidad extendida —como la realidad virtual o la realidad aumentada— o la computación cuántica.
Mientras los progresos científicos y técnicos siguen acelerándose y sucediéndose sin cesar, la llegada de nuevas oportunidades de inversión seguirá siendo incesante.
El profesor Francisco González Bree, de la Deusto Business School, afirma a Business Insider que es "muy difícil prever qué startups serán las grandes tecnológicas del futuro". Están por un lado aquellas empresas que basan su crecimiento en hacerlo exponencial y basándose en la innovación.
Ese tipo de firmas, dice González Bree, "asumen riesgos muy altos y la gran mayoría desaparecerá porque su ratio de fracaso es alto". Además, las grandes tecnológicas que se conocen hoy tienden a comprar este tipo de firmas con potencial. Pero este docente de Innovación asegura que el futuro de las startups pasa por estas tecnologías exponenciales.
No parece alejarse mucho de la realidad más material: las inversiones de futuro que están haciendo ya hoy los grandes fondos. En este sentido, hay una española trabajando en Plug and Play, uno de los fondos de capital riesgo más conocidos en Silicon Valley. Su nombre es Paloma Mas, aunque eso sí, abre un poco el espectro.
"Hay una serie de proyectos que están transformando el mercado", asegura. Las fintechs como N26, compañías "que están cambiando la movilidad de aquí a 20 años" como Zeleros —construyen su alternativa al HyperLoop en Europa y son españoles— o incluso otras emergentes en sectores como el sanitario.
"El ámbito médico que conocemos ahora, dentro de 5 ó 10 años, distará mucho de lo que conocemos ahora. No esperaremos dos días para un análisis: automatizaremos procesos muy sencillos. Vamos a vivir mucho más que las generaciones que nos precedieron, nos tendremos que cuidar más", manifiesta.
O incluso en un sector tan consolidado como el de la distribución. Las transformaciones van a ser más hondas de lo que parecen, detalla Mas. A continuación, una selección de 17 startups que podrían despuntar en los próximos años.
N26 es una de las fintech con más proyección de Europa y permite en España operar una cuenta bancaria en línea con una tarjeta MasterCard. En las dos rondas de financiación que ha protagonizado este año ha conseguido reunir cerca de 500 millones de dólares.
Es una compañía de ciberseguridad que crece a pasos agigantados, en la que ha invertido Google, y que ha estado en la terna mediática: demostró en menos de 48 horas que el ciberataque a Sony de 2016 fue responsabilidad de Corea del Norte e incluso se ha visto involucrada en la famosa llamada entre Trump y el presidente ucranio, objeto de su impeachment.
Nace con la firme vocación de "democratizar" el desarrollo de la inteligencia artificial. Esta plataforma desarrolla, gestiona y opera diversos programas para entrenar a las IA o mejorar sus flujos de trabajo. Google apostó fuerte por ella en una ronda de financiación en marzo: se dejó 11 millones de dólares a través de Google Ventures, su fondo de capital riesgo.
Provee de servicios de IA con propósitos fundamentalmente industriales. De hecho, ha sido recientemente elegida para ayudar a una de las mayores cementeras del mundo a transformar sus fábricas. Levantó 93 millones de dólares en una ronda de 2017, siendo su principal inversor el fondo de capital riesgo de Softbank.
Una plataforma que provee de API a entidades bancarias y tecnológicas financieras con tal de que cumplan la directiva PSD2 que garantiza los pagos seguros. Ha alcanzado acuerdos con múltiples entidades como la startup N26, también presente en esta lista, o con la multinacional Mastercard.
Startup francoestadounidense que ofrece una plataforma comprehensiva para el Big Data y la inteligencia artificial, que permite preparar los conjuntos de datos para su posterior explotación y el escalado de los mismos a producciones de categoría empresarial.
Compañía de coches autónomos en la que ha invertido recientemente Amazon y han fundado exmiembros de Google y Tesla. Está valorada en 2.500 millones de dólares. Aparece en un listado de Forbes de startups estadounidenses especializadas en IA a tener en cuenta en los próximos años.
Zeleros se inspira en el Hyperloop de Elon Musk y ya está reuniendo capital para poner en marcha su primera pista de pruebas. Si el desarrollo de su tecnología es concluyente, pronto podríamos ver a trenes entubados recorriendo Europa a cientos de kilómetros por hora.
Es una solución que utiliza el machine learning para monitorizar de una manera mucho más precisa los ingresos de las compañías y detectar posibles incidentes, todo ello de forma independiente y alertando a los responsables, reduciendo con sus analíticas el tiempo de detectar los errores y de solucionarlos. La sede de Anodot está en Silicon Valley.
Startup norteamericana de seguros que levantó 480 millones de dólares en verano y se ha expandido a Alemania. Nació en 2015 y tiene una app mediante la que sus usuarios pueden chatear y conseguir un seguro en menos de 5 minutos. Aparece en un listado de Forbes de startups estadounidenses especializadas en IA a tener en cuenta en los próximos años.
Ablacon levantó más de 20 millones de dólares en una ronda de financiación en abril de 2019. Su propósito: tratar las arritmias cardiacas con inteligencia artificial. Ha diseñado un interesante mapa que muestra el flujo sanguíneo mediante una pantalla con luces.
Montarse en un Uber, en un Cabify o en un taxi y tener un supermercado de golosinas a la vista. ¿Cómo pagarlas? Pues eso es lo que propone Cargo, una app que ya se ha aliado con grandes compañías de movilidad para tal efecto. Consiguieron más de 22 millones de dólares en su ronda de inversión de serie A.
La plataforma de inteligencia artificial Dataminr rastrea la web, de las redes sociales a blogs y la dark web, para detectar actividad que pueda suponer un riesgo para sus clientes. Aparece en un listado de Forbes de startups estadounidenses especializadas en IA a tener en cuenta en los próximos años.
Trabajan con usuarios de otras plataformas como Rappi, también presente en esta lista. Conecta a personas que quieren hacer compras en línea pero hacer los pagos en efectivo. Con presencia en Chile, Argentina y EEUU, también está en el portafolio de Plug & Play.
Consentio es una startup recién nacida que propone una plataforma similar a WhatsApp para conectar a productores y distribuidores del mercado hortofrutícola. Apenas han reunido 71.400 euros de capital semilla, aunque ya forman parte del portfolio de Plug & Play.
Una startup que explora el futuro del sector del retail en tecnología: vende gadgets mediante su aplicación y ha abierto un sinfín de tiendas experimentales en los EEUU. En una ronda de octubre lograron 50 millones de dólares.