Los problemas continúan en Twitter y. desde hace varias horas se especula con su cierre definitivo. Horas antes de la fecha límite que Elon Musk otorgó a los empleados para decidir si se quedaban o dejaban sus puestos de trabajo, las oficinas de la red social se transformaron en completo desorden.
Según varias fuentes que dialogaron bajo condición de anonimato, Musk y sus asesores intentaron persuadir a algunos de los empleados "críticos" para que se quedaran.
Según un mail filtrado, el propietario de la red social anunció que para crear Twitter 2.0 haría falta "trabajar muchas horas a alta intensidad" y que solo quienes ofrezcan un "desempeño excepcional" pasarán esta etapa de "corte".
"Si estás seguro de que quieres ser parte de la nueva Twitter, por favor pulsa sí en el enlace de debajo", expresaba el mensaje, el cual contenía un link a un formulario que cada empleado podía rellenar.
"Cualquiera que no lo haya hecho para las 5pm ET de mañana (jueves) recibirá tres meses de indemnización", añadió Musk, dando de plazo hasta las 17.00 del jueves, hora de Nueva York.
Luego de leer este mail, un gran número de trabajadores decidió renunciar porque no aceptaron los nuevos términos impuestos por Musk.
Además, muchos de ellos comenzaron a twittear con el hashtag #LoveWhereYouWorked (#AmaTuLugarDeTrabajo) y un emoji de saludo para mostrar que se iban de la empresa.
Es por esto que, durante la jornada del jueves, en Twitter empezó a aparecer el pánico por parte de los usuarios.
La eliminación de tantos empleados en un periodo tan reducido suscitó dudas sobre cómo seguirá funcionando Twitter de forma eficaz.
Aunque Musk incorporó a algunos ingenieros y directivos de otras empresas suyas, muchos de ellos apenas aprendieron el funcionamiento del servicio de redes sociales.
El hashtag #RIPTwitter comenzó a ser tendencia, ya que los usuarios se preguntaban si el servicio se caería. Algunos publicaron memes de lápidas con el epitafio de que Musk había matado el servicio, mientras que otros bromeaban con que sólo quedaba un empleado.
Otros usuarios, en tanto, aseveraron que iniciaron su partida rumbo a otras redes sociales.
Por otro lado, y como si fuera poco con todo lo que ya sucedía, Musk decidió cerrar temporalmente las oficinas de la red social.
Twitter informó a sus empleados el jueves que todos los edificios de oficinas se cerrarían temporalmente y que se suspendería el acceso a las credenciales.
Según un mensaje interno visto por la BBC, se les comunicó a los trabajadores que las oficinas reabrirían el próximo lunes, aunque "la empresa no dio ninguna razón para el cierre".
El mensaje también pedía a los trabajadores "continuar cumpliendo con la política de la empresa al abstenerse de discutir información confidencial de la empresa en las redes sociales, con la prensa o en cualquier otro lugar".
Algunos sospechan que la medida puede atribuirse a los temores de Elon Musk y su equipo de que los empleados descontentos puedan intentar sabotear la empresa desde adentro, según la editora gerente de Platformer, Zoe Schiffer.
Jeff Seibert, exjefe de productos de consumo de Twitter, calificó la situación de la compañía de "triste" y "decepcionante" y expresó que el liderazgo de Musk había causado "confusión" a los usuarios, anunciantes y empleados.
"Twitter, que lleva mucho tiempo lidiando con el acoso y la desinformación en su plataforma, ha estado en el centro de una vorágine durante una década", indicó.
Por su parte, un extrabajador de twitter que prefirió mantener el anonimato, en contacto con la BBC, expresó, "creo que cuando se asiente el polvo hoy, probablemente quedarán menos de 2.000 personas trabajando en la compañía".
Además, añadió que todo su equipo fue despedido. "El mánager del equipo fue despedido. Y luego el mánager de ese mánager fue despedido. La persona por encima de él era uno de los ejecutivos despedidos el primer día. Así que no queda nadie en la cadena de mando", precisó.
Otro exempleado de la red social, que también prefirió mantener el anonimato, indicó: "No quería trabajar para alguien que nos amenazó por correo electrónico varias veces diciendo que 'solo los tuiteros excepcionales deberían trabajar aquí' cuando ya trabajaba entre 60 y 70 horas semanales".
Por su parte, el flamante dueño de la empresa fue cuestionado acerca de sus "preocupaciones" por la situación de la red social, pero su respuesta -vía tuit- fue la siguiente: "La mejor gente se está quedando, así que no estoy nada preocupado".
Luego, Musk tuiteó un emoji de calavera y tibias cruzadas y por otro lado, un meme que mostraba una lápida con el logotipo de Twitter.
Como ya mencionamos, Twitter perdió a gran parte de sus empleados, y muchos de ellos eran personas que ocupaban cargos importantes y esenciales para el funcionamiento de la red social.
Es por esto que, se especula que empezará a fallar en estos días, específicamente, durante el transcurso del fin de semana que, para colmo, coincide con el Mundial Qatar 2022, organizado por la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA).
Los expertos -y los exempleados- notan que al igual que cualquier plataforma medianamente sofisticada, Twitter es un amasijo de programas y servicios interconectados, hechos a medida, algunos nuevos y otros viejos.
Entonces, si por alguna razón alguno de estos servicios tiene algún inconveniente, dejará de funcionar y arrastrará, en su caída, al resto de los servicios que hacen que la red social funcione.
Para saber si eso será así o no solamente queda esperar.