Es un hecho que la pandemia cambió la forma de trabajar en el mundo entero. La vida laboral se trasladó a la virtualidad para seguir adelante, pero en el camino quedaron aquellos espacios en los que los empleados podían compartir su vida cotidiana.
Con esa inquietud en la mente nació Coffee Break, una plataforma creada por Sergio Mandelbaum, Nicolás Cunningham y Ariel Perelman que se basa en la gamificación para ofrecer desde espacios recreativos y virtuales para trabajadores hasta herramientas que ofrecen descontracturar en medio de las clases virtuales.
Lo que hoy es Coffe Break nació casi de casualidad y sobre la marcha. Así lo explica a iProUP su cofundador, Sergio Mandelbaum.
"Nosotros veníamos teniendo mucha experiencia en todo lo que es gaming y aplicaciones de juegos, y lo que vimos con la pandemia es que todo se pasó a herramientas como Zoom, Google Meets o Webinar, pero estaba faltando lo que efectivamente era el llamado y famoso coffee break en los eventos presenciales", señala el ejecutivo.
Y añade: "Nació de manera tan rápida que primero armamos la idea y cuando ni siquiera teníamos hecho el producto ya nos había salido el primer cliente que quería usarlo, así que tuvimos que correr hasta casi un minuto antes de que arranque el evento para tener lista nuestra primera versión super beta".
Con el tiempo, los fundadores de Coffe Break descubrieron que lo que habían creado para un sólo evento podía tener múltiples aplicaciones en la nueva realidad de un mundo que atraviesa una pandemia global.
"Fuimos encontrando que tenía otras aplicaciones, en especial en las áreas de recursos humanos, que nos comentaban que se perdió un poco la cultura del encuentro que venían construyendo en la presencialidad y que algunos ya no sabían qué inventar".
"Así que nos empezaron a pedir Coffee Break como herramienta para unir equipos y recuperar esa parte importante que tiene que ver con la informalidad", explica Mandelbaum para aclarar cómo cambiaron el modelo de negocios.
"De esta manera, vimos un proyecto mucho más escalable hacia un modelo de suscripción mensual en el que las empresas acceden a la plataforma con un administrador y donde pueden usar nuestros juegos o crear los suyos de forma automática", explica.
Clima laboral
Coffee Break tiene su base en las trivias sobre todo tipo de contenidos: cine, televisión, historia, arte, geografía, etc. Hoy tiene armados más de 300 packs de preguntas. Además, el usuario puede crear sus propias trivias que, en general, apelan al humor y a las internas del trabajo.
"Los clientes generan cosas muy divertidas y juegan con preguntas de todo tipo: cómo le dicen al gerente de marketing, quién es quién en la foto de cuando eran chicos, etc. Todas cosas que tienden a unir a los equipos, divertirse y pasar un buen momento", asegura Mandelbaum.
Además, destaca: "Nosotros decimos que a Coffee Break se juega cinco minutos, pero se habla después toda la semana porque es una competencia sana y los que participan se quedan con ganas de más y quieren revancha. Después, por los canales de comunicación que tienen las empresas, empiezan a cargarse entre todos y se dan ese tipo de cosas que se vienen perdiendo con estos nuevos modos de trabajar".
Los creadores de Coffe Break confían su solución se va a poder escalar más allá de la pandemia. "Creemos que cuando pase todo va a quedar una modalidad mixta de trabajo remoto y presencial. Ahora también está pasando que se empieza a contratar gente que no vive en la zona donde están las oficinas y entonces la necesidad de generar estos espacios va a seguir existiendo", asegura Mandelbaum, convencido.
Los emprendedores también encontraron la forma de extrapolar su trabajo fuera del ámbito recreativo.
"Vimos que sirve también para las empresas que hacen capacitaciones online que cada vez son más. De esta manera, el profesor puede hacer una trivia al final para hacer más entretenidas las clases, evaluar conocimientos y además entender qué no se comprendió bien y reforzar los contenidos", explica.
"Así fue cómo se fue ampliando Coffee Break: primero empezó como una herramienta para eventos virtuales y después se transformó en un modelo por suscripción que apunta especialmente a recursos humanos con la idea de unir equipos y a capacitaciones online para hacer más entretenido el aprendizaje", resume.
Mandelbaum remarca que además ofrecen "la personalización absoluta de todo lo que es el look and feel, el branding y la estética" y completa: "Personalizamos todas las pantallas del juego con el logo del cliente por lo que queda como una marca blanca, nuestra marca casi no aparece y parece que el producto es del cliente".
Coffee Break inició su trabajo sin una inversión inicial: se financiaron con el dinero que les pagó por adelantado el primer cliente y a partir de ahí decidieron que debían escalar el negocio.
"Básicamente aprovechamos lo que teníamos: uno de los socios sabe programar y otro sabe vender, y así armamos una venta muy simple cuando ni siquiera teníamos el producto. Ahora vemos una oportunidad muy grande no solo en Argentina sino en cualquier lugar del mundo, porque es aplicable a todos lados, así que ya tenemos la versión en inglés de toda la plataforma y estamos buscando inversión para poder salir al mercado anglosajón".
El modelo de negocio
Actualmente, Coffee Break tiene unas 25 empresas cliente recurrentes que pagan todos los meses. Se trata de compañías de todo tipo y que tienen de 50 a 5.000 empleados, como La Segunda, Prudential, Colgate. Además, cuentan con los clientes que contratan el servicio por única vez para un evento.
El modelo de monetización es por suscripción y se adapta a la cantidad de usuarios que tiene cada cliente. "Estamos hablando de valores muy bajos, son suscripciones de 10 dólares por mes en adelante. Obviamente si tenés un evento muy grande donde participan 10.000 personas el monto es más alto, pero estamos hablando de 250 dólares por mes más o menos", asegura Mandelbaum.
Además, reconoce que "en todo este contexto estamos viendo que el primer cliente de suscripción empezó hace cinco meses y sigue, es decir que ninguno por ahora se dio de baja".
"Nosotros estamos buscando por lo menos un lifetime value de 12 meses, todavía no estamos ofreciendo los planes anuales con descuentos, ero es algo que vamos a hacer. También está la posibilidad de probarlo un mes y darte de baja o utilizar una versión gratuita con algunas limitaciones", explica.
Mandelbaum concluye con un objetivo claro para el 2021: "Ahora arrancamos la etapa de publicidad y de escalar al mundo entero. El momento es ahora".