Beat, una aplicación de movilidad de origen griego, anunció esta semana el lanzamiento del servicio de transporte de pasajeros en la Argentina, donde ya ofrece servicios de movilidad que están disponibles en principio desde el Gran Buenos Aires hacia la Capital Federal.
La estrategia para competir con Uber y Cabify pasará por ofrecer tarifas más baratas, de hasta un 20 por ciento más bajo, y descuentos de hasta un 50 por ciento, según dijeron voceras de esta empresa europea.
Sanja Ilic, directora de Operaciones global de Beat, explicó que el objetivo de la compañía es ofrecer "oportunidades económicas a todas las personas y, al mismo tiempo, ofrecer a los pasajeros una opción de transporte eficiente, segura y accesible".
Con sede en Atenas, la capital de Grecia, donde también presta servicios, Beat ha centrado su estrategia de crecimiento en América Latina. Según informó la empresa, es la aplicación de transporte de pasajeros número 1 en Grecia, su tierra natal, y Perú, donde llegó en 2014; la número 2 en Colombia y Chile, y ya está en el tercer puesto de aplicaciones de transporte de viajes en México, a sólo tres meses después de su lanzamiento.
Más de 438.000 conductores están registrados en Beat, con más de 14 millones de pasajeros transportados a nivel global. Para Buenos Aires, la expectativa es llegar antes de un año a 20.000 conductores y unos 100.000 pasajeros registrados.
La firma, que ya tiene oficinas en Buenos Aires, donde está constituida como Sociedad Anónima Unipersonal, apunta a ampliar su equipo local y cerrar el año con aproximadamente 30 personas.
"Actualmente tenemos más de 700 empleados a nivel mundial y la mitad se encuentra en América Latina. Queremos que la operación local acompañe nuestro crecimiento y para esto estamos buscando a los mejores talentos del mercado argentino", explicó Patricia Jebsen, gerente general de Beat para la Argentina, una de las ejecutivas de mayor experiencia en el comercio electrónico argentino: fue gerenta de omnicanalidad de supermercados de Cencosud para la región y es presidente honoraria de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE).
¿Cómo funciona? Al igual que Uber y Cabify, la aplicación, disponible en Android e iOS, utiliza la ubicación del pasajero y la compara con los conductores cercanos. Cada persona puede pedir un Beat desde su teléfono móvil y verlo acercarse. El servicio se puede abonar con efectivo o tarjeta.
La compañía fue fundada en 2011 y adquirida por Mytaxi, la aplicación de taxis más importante de Europa, propiedad de Daimler Mobility Services, parte del grupo alemán Daimler, en febrero de 2017.
En 2018, BMW y Daimler firmaron un acuerdo estratégico para aliar sus unidades de negocio de servicios de movilidad. Beat está disponible en Atenas (Grecia), Lima (Perú), Santiago (Chile), Bogotá (Colombia), ciudad de México (México) y ahora en el Gran Buenos Aires.
Estrategia
Los pasos de la llegada de Beat son similares a los de Cabify, que se registró como remisería y trató de evitar conflictos como los que tuvo y mantiene Uber con taxistas, la Justicia y el Gobierno porteño.
Por ejemplo, pagará gravámenes como IVA, impuesto sobre la renta, ingresos brutos y los impuestos de la seguridad social que correspondan, aunque los conductores deberán ser monotributistas.
Los chóferes deben tener un vehículo con su registro de conductor correspondiente y la patente al día, además de los seguros correspondientes. El auto no puede tener más de 10 años de antigüedad.
La empresa cobra al conductor una comisión del 25% sobre el valor del viaje realizado. Cuenta, además, con incentivos extra para los conductores que se basa en función de su nivel de productividad. Como hizo Cabify en sus inicios, comenzó los trámites para registrarse como agencia de remises en la ciudad de Buenos Aires.
Ilic, una ejecutiva de origen serbio quien visitó por segunda vez Buenos Aires como parte de la llegada de la empresa a la Argentina, recordó que la aplicación fue fundada por Nikos Drandakis, Kostis Sakkas, Michael Sfictos y Nikos Damilakis en 2011, durante la crisis económica griega.
Drandakis tuvo la idea de conectar a pasajeros con taxistas libres, y creó una plataforma llamada Taxibeat, y luego la adaptó el modelo de conductores independientes.
Grecia es similar a América Latina en cuanto a sus crisis económicas y urbes con uso intensivo de transporte automotor privado y hacia esta región apuntó Drandakis.
Al principio ofrecerán en el Gran Buenos Aires el servicio Beat Classic. Luego tienen previsto lanzar Beat Lite, opción de menor costo con automóviles básicos y tarifas más bajas para los pasajeros; Beat Luxi: una categoría premium con autos de alta calidad.
La aplicación comienza a estar disponible en provincia de Buenos Aires a partir de hoy, pero el plan es continuar expandiéndose por el país. La plataforma tiene 3 servicios: el servicio Beat Classic; Beat Lite: una opción de menor costo con autos básicos y tarifas más bajas para los pasajeros y Beat Luxi: una categoría premium con autos de alta calidad.
La aplicación incluye una función que ofrece a los conductores y pasajeros la oportunidad de llamar a las autoridades de emergencia con solo tocar un botón.
Ilic resaltó el interés de la empresa por Buenos Aires debido a que será, luego de la ciudad de México, el mayor centro urbano donde operará y donde hay sólo dos competidores, Uber y Cabify.
"Tenemos la intención dar servicio a toda la ciudad", dijo la ejecutiva serbia, quien explicó que la decisión de comenzar en el Gran Buenos Aires se debió a la "gran necesidad" de transporte observada en esa región.
Ilic, quien no descartó la llegada en 2020 a Buenos Aires del servicio de monopatines eléctricos de alquiler que ya ofrece en otras ciudades, informó que en estos próximos la difusión será sólo a través de redes sociales y la web y otros espacios digitales, además del boca en boca. En 2020 la empresa hará una inversión grande en el "off line", con cartelería pública y radio.
Las dos ejecutivas resaltaron que la empresa es diferente de otras aplicaciones de movilidad en aspectos como su cultura organizacional, al promover, por ejemplo, la equidad de género: el equipo ejecutivo está compuesto a nivel global por 57% de hombres y 43% de mujeres, indicó iProfesional.