Las hamburguesas y las piezas de pollo fueron los primeros productos que buscaron reemplazar el uso de la carne con preparados vegetales que emulan la textura y el sabor de la carne. Impossible Foods y Beyond Meat son solo algunas de las empresas interesadas en explotar esta fórmula creada en respuesta a los problemas que genera la industria de la carne en la producción a gran escala.
Algunas iniciativas buscan desarrollar una carne de laboratorio, un método que busca producir carne sin la necesidad de criar y sacrificar animales. Investigadores de la escuela de ingeniería y ciencias aplicadas John A. Paulson de Harvard lograron desarrollar músculos de conejo y vacas en una estructura de gelatina comestible que simula la textura y la consistencia de la carne, informó La Nación.
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La carne artificial creada por los investigadores de Harvard emula la textura y las fibras de un corte tradicional, pero aún está en una etapa incipiente de desarrollo. "Con el uso de células sanas combinadas con la estructura correspondiente, el desarrollo de la carne artificial tiene las mismas reglas y objetivos: la salud humana", dijo Kit Parker, uno de los autores del estudio.
El mayor desafío estuvo en el desarrollo de las fibras delgadas y largas que forman parte del músculo esquelético animal, una característica distintiva de la carne vacuna, porcina o aviar. Para esto utilizaron un mecanismo basado en una gelatina comestible segura que sirvió de estructura para el crecimiento de las células utilizadas para emular el crecimiento muscular.
Este prototipo de carne de laboratorio aún le falta un tiempo de desarrollo pero los investigadores están convencidos que permitirá crear cortes y platos a medida. "Con estos métodos se podrán crear texturas, gustos y perfiles nutricionales definidos, algo parecido al proceso de producción de la cerveza", dijo por su parte Luke MacQueen, investigador del Instituto Wyss de ingeniería bioinspirada.