El escenario económico aún no da muestras de una mejoría. Los asalariados sufren una degradación notable del poder adquisitivo (con caída del sueldo real de entre 10% y 12%, según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal), mientras que los cierres de fábricas y suspensiones de personal están a la orden del día.
Todo esto queda corroborado en las cifras oficiales: según la Secretaría de Trabajo, los últimos 12 meses mostraron la cara más ríspida de la crisis, ya que se perdieron 270.000 empleos.
Ese mismo organismo da cuenta de que sólo en el primer trimestre se destruyeron unas 86.000 puestos. Si se amplía la mirada a lo ocurrido en los últimos tres años, el sector más golpeado viene siendo el industrial, donde 137.000 personas perdieron su trabajo.
Sin embargo, existe un segmento al que la crisis le pasa por el costado y es la perfecta excepción a la regla. Se trata de los profesionales que se desempeñan en el sector TIC (Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación). Más aún, tal como viene dando cuenta iProUP, en esta actividad la demanda supera la oferta y las empresas están permanentemente buscando personal, ya sea para cubrir vacantes o para reforzar su dotación en el área.Los directivos de las compañías saben de la importancia estratégica que revisten este tipo de recursos de cara a lo que viene. En consecuencia, no escatiman con los sueldos ofrecidos que, por cierto, superan por varios puntos a los de otras actividades.
Un estudio elaborado por Prince Consulting para Comunidad IT (ComIT) estima que este año:
- La necesidad de las empresas se aproximará a 12.900 posiciones, para una oferta laboral que apenas será de 9.500 profesionales
- En consecuencia, la demanda insatisfecha rondará 3.400 puestos, un 31% superior a la de 2018
Es cierto que se observa un leve repunte en la oferta (3% en comparación con el año anterior), pero también es verdad que el total de requerimientos, en términos porcentuales, se triplicó (9%).
En rigor, el capital humano al cierre del año pasado alcanzó los 432.300 puestos y se estima que para fin de este año ascenderá a 441.800 posiciones, lo que representa poco más del 2.2% de la población económicamente activa.
"Las modificaciones en el escenario económico y la evolución del tipo de cambio real pueden impulsar la exportación de esta actividad a muy altos niveles", asegura a iProUP Pablo Listingart, director ejecutivo de ComIT.
Y agrega: "Esto estará acompañado de un crecimiento en la demanda laboral, algo en lo que coinciden casi 8 de cada 10 referentes de la industria consultados", quienes además prevén una tendencia favorable y sostenida para este rubro.
En 2018 la industria IT exportó u$s1.700 millones (sobre un total de u$s3.283 de facturación total), y se perfila como una de las de mayor proyección a futuro.
Las últimas escalas salariales demuestran que el rubro goza de un nivel envidiable de ingresos. Como la demanda supera a la oferta, las firmas procuran por todos los medios que sus profesionales no les sean "robados" por la competencia o decidan trabajar para el exterior.
Según un relevamiento de la consultora de recursos humanos Adecco:
- El gerente de informática de una empresa grande ubicada en Buenos Aires puede ganar $242.829 por mes en promedio, mientras que un colega que trabaja en una firma de tamaño chico de la zona de Cuyo, $107.760 mensuales.
Lo mismo ocurre con la remuneración de un líder de proyectos:
- Si es empleado de una compañía importante de Capital Federal puede percibir un sueldo de $102.647, pero si lo hace en una Pyme de la zona Centro su compensación baja a $57.266
En el caso de los puestos iniciales, la brecha se mantiene:
- Mientras que un analista de Help Desk gana $66.485 por mes si trabaja en una compañía grande de Buenos Aires, el mismo puesto obtiene $37.267 en una Pyme de la Patagonia
En tanto, si se trata de un analista programador semisenior:
- Cobra $52.570 promedio mes si se desempeña en una empresa mediana porteña, y $36.453 si lo hace en una firma pequeña de la zona Centro
Pese los envidiables incentivos salariales, un estudio elaborado por ComIT revela que los principales problemas de los profesionales TIC siguen siendo la falta de interés vocacional y el abandono de la carrera de los estudiantes.Esto ocurre, en general, a raíz de las propuestas laborales tentadoras que reciben antes de obtener el título, que los lleva a elegir el trabajo y relegar los estudios o directamente darlos por concluidos. Esta situación genera un círculo vicioso: ante la falta de profesionales, las empresas terminan contratando cada vez más estudiantes. Carreras largas y poco actualizadas empeoran este escenario.
"Si bien existe una gran demanda, el desarrollo del talento humano conlleva largos procesos de formación. Lo ideal sería trabajar de forma colaborativa, generar academias y polos de capacitación entre todas las partes y no en forma independiente, ya que suele desenfocar a las compañías de su core business", dice el Managing Director de Experis Argentina.
Por su parte, Acuña agrega: "Resulta necesario poner atención en los programas de formación de talento y discutir el sistema de capacitación en forma integral para aprovechar un eventual crecimiento económico y contribuir al crecimiento del empleo".
Las compañías son saben que no pueden esperar a que los profesionales estén disponibles cuando ellas lo necesitan; por ende, deben cultivarlos puertas adentro. En este marco, además de proporcionarles formación interna, también han comenzado a aprovechar recursos externos: 15% de las firmas ya se asoció con universidades y organismos de la industria para construir comunidades de talento.
Con la reciente aprobación unánime de la Ley de Economía del Conocimiento, tanto el informe como los especialistas auguran un futuro promisorio para la industria. Los más optimistas vaticinan la creación de más de 250.000 puestos, inclusive llegando hasta de 441.800 a mediano plazo.
"La mejor opción para aggiornar al sector ante la creciente demanda laboral es unificar los esfuerzos del sector privado y público. Todos los actores tenemos la responsabilidad de potenciar y maximizar la cantidad y calidad del crecimiento del rubro IT", asegura a iProUP Roberto Manguel, Managing Director de Experis Argentina.
La incorporación progresiva que hacen las empresas de las nuevas tecnologías "4.0" ampliará aún más la brecha entre esa oferta y demanda.
En este sentido, Soledad Acuña, directora operativa de ComIT, destaca: "La cantidad de trabajadores de esta rama de actividad permaneció casi estática en los últimos años. El sistema de capacitación, incluyendo carreras universitarias y otras alternativas, sigue siendo poco flexible".
Y es, en este contexto, que emerge la flamante Ley de Economía del Conocimiento, una continuidad de la ley de Promoción del Software. "Entendemos dará fuerte impulso al crecimiento de compañías. Se abrirán oportunidades para todos los integrantes del ecosistema", anticipa Guillermo Bracciaforte, co-fundador de Workana.
De esta forma, la Industria del Conocimiento se posiciona como una de las más prometedoras de Argentina, aunque también tiene el desafío de capacitar al personal necesario cubrir las miles de posiciones vacantes y así achicas la brecha entre oferta y demanda.