Blue Origin, la empresa espacial fundada por Jeff Bezos, se prepara para lanzar su cohete New Glenn que competirá con los ultimos modelos de SpaceX, la firma de Elon Musk que hasta el momento domina el mercado de los viajes orbitales.
Según la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA), el cohete despegará de la plataforma espacial de Cabo Cañaveral, ubicada en Florida a las 01:00 horas.
Si bien aún falta la confirmación del lanzamiento, el creador de Amazon publicó en su cuenta de X "Próxima estación: el despegue".
New Glenn ya completó con éxito la prueba decisiva antes de su primer vuelo. En su próximo despegue, el cohete llevará un prototipo de Blue Ring, una nave espacial financiada por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos para lanzar satélites al espacio.
El nuevo cohete reutilizable puede aterrizar de forma vertical en un barco en el océano. Mide 98 metros y puede llevar cargas grandes y pesadas. Además, utiliza gas natural líquido, que es más limpio que el queroseno, y tiene menos motores.
A partir de este lanzamiento, Blue Origin ingresa al mercado de los cohetes orbitales. Hasta el momento, la empresa solo transportó pasajeros y cargas útiles en viajes cortos al borde del espacio.
Laura Forczyk, fundadora de la consultora Astralytical, indicó que este es un mercado verdaderamente orbital. "El suborbital solo te lleva hasta cierto punto: hay un número limitado de cargas útiles y clientes para un vuelo rápido al espacio", agregó la empresaria.
Una nueva rivalidad entre dos gigantes
El nuevo cohete intensificará la rivalidad entre los empresarios más ricos del mundo, Elon Musk y Jeff Bezos.
Hoy en día la compañía de Musk es la líder en los viajes espaciales comerciales. Además, posee influencia política, ya que el empresario es cercano a Donald Trump, el nuevo presidente de EE.UU.
Distintos operadores de satélites comerciales, como el Pentágono y la NASA, utilizan los cohetes Falcon 9 de SpaceX. Sus competidores, como United Launch Alliance, Arianespace y Rocket Lab, están lejos de alcanzarlo.
"Si todavía fuera un ejecutivo de la NASA, estaría encantado de tener finalmente un competidor para el Falcon 9", manifestó el investigador G. Scott Hubbard. Según él, una mayor competencia podría reducir los costos iniciales.
Jeff Bezos fundó Blue Origin en el año 2000, dos años antes de que Elon Musk creara SpaceX. Sin embargo, Blue Origin adoptó un enfoque más cauteloso.
Si el próximo vuelo de prueba resulta exitoso, el cohete New Glenn podría ser una alternativa en caso de fallos de otros sistemas. Esto es clave porque SpaceX planea reemplazar el Falcon 9 por Starship hacia finales de la década.