El Gobierno acelera su plan de privatización de empresas estatales. Una de Arsat y el anuncio de la "puesta a disposición" del espectro para 5G que la empresa nacional de telecomunicaciones y Enacom tenían reservado. El anuncio avivó rumores sobre un nuevo negocio para Elon Musk.
Arsat: qué quiere privatizar el Gobierno
Con el objetivo de garantizar la "protección de los derechos de los consumidores" y avanzar en "la apertura del mercado" y lograr un "mejor servicio", el gobierno anunció que:
- Pondrá a disposición 100MHz de espectro que el Estado Nacional le reservó a ARSAT para comunicaciones móviles y no está utilizando
- También dispondrá 50MHz que quedaron sin comprador en la licitación de 2023 y en manos de Enacom
- Volverá a licitar el contrato de prestación del servicio de conectividad a las a 16.000 escuelas públicas en todo el país, que tiene un costo anual aproximado de $60.000 millones
En diálogo con iProUP, Gustavo López, ex vicepresidente de Enacom, señala a iProUP que a fines de 2023 y luego de un trabajo de limpieza de espectro que hizo el organismo durante más de un año y medio, el gobierno anterior licitó tres bandas: de la 3200 a la 3600 MHz, y decidió hacer una reserva por cuestiones estratégicas del Estado en cabeza de ARSAT.
En la subasta de diciembre, se ofrecieron tres bloques de 100 MHz cada uno. Claro y Personal, compraron los bloques enteros y Telefónica compró solo la mitad. Así, además de la reserva de espectro de 100 MHz quedó un espectro de 50 MHz que es el sobrante de Telefónica, explica López.
"Ese espectro está perfectamente bien. Para nosotros era importante que el Estado se quedara con eso por si el día de mañana lo necesitaba por cuestiones geopolíticas y estratégicas, de defensa o seguridad. Pero bueno, pareciera que el Gobierno tiene intención de venderlo a través de una licitación", añade López.
Por su parte, Silvana Giudici, diputada nacional y expresidenta de Enacom, calificó el anuncio de "muy positivo para el crecimiento y desarrollo de las telecomunicaciones en el país y, en especial, para el servicio de 5G". De hecho, ella misma presentó en marzo un proyecto para recuperar las frecuencias en poder de Arsat.
"Como miembro de la oposición, me negué en el directorio de Enacom cuando, en su momento, por orden de Massa, se reservaron y transfirieron a Arsat 100 MHz de bandas altas, las más valiosas para prestar 5G. Me opuse por la falta de transparencia que eso implicaba, ya que Arsat podía disponerlas sin concurso ni licitación, y asociarse a privados para ofrecer ese negocio", señaló Giudici.
Licitación de espectro para 5G
El Gobierno no dio detalles todavía sobre cómo será la licitación, por eso no se sabe si quedará reducida a los tres grandes operadores (Telecom, Telefónica y Claro), que ya participaron de la subasta de 5G en 2023, o se permitirá la entrada de un cuarto jugador.
Para Giudici, al recuperar esas bandas y unificarlas con los otros 50mhz por las que nadie ofertó y quedaron del concurso anterior, el Estado tendra 150 mhz para decidir entre dos opciones al abrir la licitación.
"O bien priorizar a los tres operadores móviles de Argentina para que mejoren la calidad y velocidad de las comunicaciones, o bien promover el ingreso de un cuarto. Cualquiera de las alternativas es buena para el país, para promover la competencia y calidad de servicio, y obligar a la baja de tarifas según como se diseñe el pliego", puntualiz1.
Por su parte, López no descarta que Claro y Personal puedan tener interés en comprar parte del espectro sobrante, aunque no cree que Telefónica participe en la licitación, ya que solo tomó la mitad de lo ofertado en la última subasta.
En cuanto a la entrada de un cuarto operador, López agrega que podría ser una posibilidad. "Si bien había 17 operadores locales que podían comprar y sólo lo hicieron los tres que estaban, para que entre un cuarto operador deberían cambiar la forma de convocatoria".
Consultados por el interés de participar en una futura licitación, en Telecom dijeron a iProUP que "el espectro siempre es necesario en tanto el trafico de datos crece exponencialmente a la par que se van generando servicios y soluciones que funcionan sobre plataformas convergentes. En tanto la regulación y condiciones de mercado lo permitan, vamos a tener interés en el espectro".
Para Enrique Carrier, experto en Telecomunicaciones, es poco probable que venga un cuarto operador de afuera, en tanto el espectro es fundamental, pero no alcanza solo eso para comenzar a ofrecer un servicio.
"En términos de inversión, el espectro puede representar solo el 10%, o menos, de lo que necesitás para dar servicio. Después te falta toda la infraestructura que es mucha inversión para un mercado que no crece. Me parece más razonable que el Gobierno le entregue ese espectro a los operadores a cambio de compromisos de despliegue de conectividad. Habrá que ver qué sucede", explica.
Privatización de Arsat: qué negocio abre a Starlink
El anuncio sobre la privatización del espectro de Arsat y Enacom generó algunas especulaciones sobre la posibilidad de que el Gobierno estuviese buscando facilitar algún negocio con Elon Musk, propietario de Starlink, la empresa de internet satelital que está operativa en el país desde marzo.
Para López, esta podría ser una posibilidad. Si bien Starlink no desarrolla esta tecnología, el interés podría ser más quedarse con ARSAT que participar de la quinta generación de redes celulares.
"Lo que sí me parece que es un negocio a la medida de Starlink es sacar la conectividad de las escuelas públicas que hoy se está dando a través de ARSAT para que lo haga directamente una empresa privada. La única que estaría en condiciones, entre las que operan en la Argentina actualmente, sería Starlink, si es que le interesa el negocio", completa.
Carrier, en cambio, ve difícil que Elon Musk pueda tener interés en quedarse con este espectro. "Sería como decir que Starlink es el Real Madrid y vos le estás proponiendo que juegue un partido de la D. Como negocio es insignificante para ellos".
Por otra parte, el negocio de la firma de Musk es internet satelital. Aunque puede usarlo para dar servicios Direct to Device (D2D), conectividad directa a dispositivos, todavía es algo incipiente, por lo que Carrier descarta que quiera meterse ahí".
Aunque ve más factible que pueda haber cierto interés por entrar al sistema de provisión de conectividad para escuelas. "Pero aun así faltaría ver cómo sería en detalle esta re-licitación que anunció el Gobierno", concluyó el analista.