La industria manufacturera experimentó una transformación significativa en las últimas décadas, impulsada por avances en automatización, inteligencia artificial e Internet de las Cosas (IoT).
Un ejemplo destacado de esta revolución es la Smart Factory de Xiaomi, una instalación que no solo optimiza la producción de smartphones, sino que también redefine los estándares de eficiencia y sostenibilidad.
Smart Factory de Xiaomi: las claves de la fábrica del futuro
Inaugurada en Beijing, la Smart Factory de Xiaomi es una planta de vanguardia que opera 24/7 sin la necesidad de intervención humana directa. La fábrica abarca un área de 80.000 metros cuadrados y está equipada con más de 1.200 robots industriales que realizan tareas de ensamblaje, prueba y empaquetado de dispositivos electrónicos.
La instalación, que produce los modelos Xiaomi MIX Fold 4 y MIX Flip, requirió una inversión de 2.400 millones de yuanes, equivalentes a unos u$s330 millones.
1. Producción de celulares
La capacidad de producción de la Smart Factory de Xiaomi es verdaderamente impresionante. La fábrica puede producir hasta 60 smartphones por minuto, lo que equivale a aproximadamente 1 millón de unidades al mes.
Esto se traduce en una capacidad anual de alrededor de 12 millones de smartphones para el tercer fabricante global de teléfonos, con 42,3 millones de unidades en el segundo trimestre, sólo detrás de Samsung (53,5 millones) y Apple (45,6 millones) según Canalys.
2. Ahorro económico
Uno de los beneficios más destacados de la automatización completa es el significativo ahorro en costos operativos. Al eliminar la necesidad de intervención humana, Xiaomi redujo los costos laborales de manera drástica.
Además, la precisión y velocidad de los robots minimizan el desperdicio de materiales y reducen los costos asociados con el reprocesamiento y la reparación de productos defectuosos.
Aunque las cifras exactas del ahorro económico no han sido reveladas públicamente, se estima que el podría alcanzar varios millones de dólares anuales.
Por ejemplo, una fábrica tradicional con una producción similar podría requerir cientos de empleados, con costos laborales anuales que fácilmente superan los u$s10 millones.
3. Eficiencia energética
La Smart Factory de Xiaomi también se destaca por su eficiencia energética. La instalación utiliza fuentes de energía renovable y tecnologías avanzadas de gestión energética para minimizar su huella de carbono.
Esto ha permitido a Xiaomi reducir su consumo de energía en un 20% en comparación con fábricas tradicionales.
4. Reducción de empleados
La completa automatización de la Smart Factory significa que no se requieren operarios humanos. Sólo tiene una "Sala de Guerra" compuesta por ingenierios que fijan las metas de producción y supervisan el funcionamiento de las instalaciones.
En una fábrica tradicional de tamaño similar, se necesitarían cientos de empleados para mantener los niveles de producción, lo que supone un ahorro de decenas de millones de dólares anuales. Apenas posee menos del 10% de personal que requiere una planta de dimensiones similares.
5. Autogestión
La planta inteligente de Xiaomi es capaz de analizar los niveles de producción, acelerar o ralentizar los procesos de acuerdo a la demanda, detectar si la línea de ensamble se demora en algùn punto y tomar decisiones para mejorar la eficiencia o solucionar problemas.
También puede gestionar por sí sola los pedidos de componentes y materiales necesarios para la producción de smarphones, sin la necesidad de ningún empleado humano.
Con cifras impresionantes de productividad, eficiencia y ahorro, la Smart Factory instalación se destaca como un ejemplo de lo que es posible en la era de la Industria 4.0, estableciendo nuevos estándares que podrían transformar la industria global.