La inteligencia artificial (IA) tomó mucha repercusión en los últimos meses, gracias a herramientas disruptivas como Chat GPT, la cual promete cambiar el trabajo, el aprendizaje y los negocios, para siempre.
Es así como, desde su rápida masificación, prácticamente todos los gigantes especializados en tecnología se lanzaron a sus propias creaciones IA, con usos y aplicaciones de todo tipo.
La última en sumarse a este prestigioso grupo, que ya tiene a Meta y Microsoft entre sus filas, es el gigante de internet Google con su esperado chatbot, Bard.
Y si bien la nueva IA ya estaba disponible desde marzo en Estados Unidos y Reino Unido y llegó a la Argentina en mayo, desde este jueves ya se puede acceder desde nuestro país a la versión en español.
"Trabajamos en un enfoque por fases: llegando a cada vez a más usuarios, lanzando nuevas capacidades de a poco, viendo cómo la gente usa la herramienta. Y todo ese aprendizaje lo vamos usando para mejorar en la siguiente etapa", explicó la argentina Romina Stella, gerente de Producto en Responsabilidad para Bard, durante una conferencia de prensa en la que se realizaron los anuncios.
Bard: cómo funciona la nueva inteligencia artificial de Google
Al igual que ChatGPT de OpenAI y Bing de Microsoft, Bard es un modelo de lenguaje bidireccional que fue entrenado en una multiplicidad de aplicaciones y lenguajes para facilitar la comunicación con cualquier persona.
La herramienta combina la amplitud del conocimiento del mundo -las bases de datos de Google- con la potencia, inteligencia y creatividad de los grandes modelos lingüísticos de la compañía.
Entre las nuevas funciones de Bard presentadas este jueves está la posibilidad de escuchar las respuestas de la herramienta en voz alta. Esto es útil para oír la pronunciación correcta de una palabra o escuchar un poema o guion. Para utilizarlo, simplemente se debe escribir y luego, seleccionar el ícono de sonido.
También se podrán fijar y renombrar conversaciones. Esta acción se puede realizar cuando se inicie un chat, y allí aparecerán opciones para fijar, renombrar y retomar conversaciones recientes en la barra lateral de la herramienta.
En cuanto a tareas de programación, la nueva función permitirá exportar código Python a la plataforma online Replit, además de Google Colab.
Por otro lado, se podrán compartir respuestas a partir de la generación de un link, por ejemplo, ya sea una parte o la totalidad de un chat de Bard.
La creatividad también juega un papel clave, dado que la herramienta puede generar diferentes formatos de textos creativos, como relatos, código, correos electrónicos, letras de canciones, cartas, etc. Por ejemplo, se le puede pedir "escribir una canción sobre el amor en el siglo XXI", o que genere un código para una aplicación simple.
Otro de los usos es el de resumir temas complejos: para las ocasiones en que puede ser difícil entender un artículo complejo o simplemente no se dispone del tiempo suficiente para leerlo con suficiente atención. Aquí Bard puede ayudar a resumir un texto para su fácil comprensión y pedirle, por ejemplo, que haga un "resumen sobre la literatura en Hispanoamérica y su influencia en el mundo".