En la actualidad existe una manera para sacarle provecho a la gran tendencia de la Inteligencia Artificial y conseguir un dividendo del 10%. Pero no solo eso, sino que además se trata de un pago que te llegará todos los meses.
Esta estrategia es notablemente superior a lo que la mayoría de las personas realizan, la cual se trata de enfocarse únicamente en unas pocas acciones tecnológicas de primer nivel que otorgan dividendos, como Microsoft.
Esto no quiere decir que Microsoft presente desventajas. Sin embargo, su rendimiento es solo del 0,8%, lo que equivale aproximadamente a la mitad de lo que ofrecen las acciones comunes del índice S&P 500.
Por lo tanto, si se encuentran en búsqueda de un ingreso sustancial en la actualidad, deberán prestar atención al fondo de dividendos AllianzGI Artificial Intelligence & Technology Opportunities Fund (AIO). Se trata de un fondo cerrado (CEF) que incrementó sus dividendos desde su creación y mantuvo estabilidad durante la pandemia.
Luego está la cartera, que cuenta con pilares tecnológicos como Microsoft y Apple, junto a otras importantes empresas del sector como Meta Platforms (META), NXP Semiconductors, Motorola (MSI) y Oracle. Estas compañías tienen el potencial de beneficiarse a medida que la inteligencia artificial, aún en sus etapas iniciales, gane impulso.
Incluso mejor, gracias al impresionante rendimiento de AIO, obtenemos dividendos significativos de estas acciones, muchas de las cuales pagan dividendos bajos o incluso ninguno por sí mismas.
El fondo que convierte la fiebre por la IA en dividendos del 10%
Este fondo excepcional ofrece mucho más que solo tecnología: además de contar con las principales acciones de este sector, también incluye acciones de alto valor en otras industrias, como AstraZeneca (AZN), Hilton Worldwide Holdings (HLT) y Deere & Co. (DE).
El resultado se evidencia por lo siguiente: la cartera subyacente de AIO que se muestra en naranja, superó al S&P 500 cuando el sector tecnológico experimentó un crecimiento notable en 2020 y 2021, mientras que en 2022, un año desafiante para la tecnología, logró igualar la rentabilidad del índice.
Otra de las razones por la cual AIO fue incluida en nuestra lista de compras es la diferencia entre su NAV por acción y su precio de mercado (con descuento). Sólo se obtienen estos descuentos con los CEF, y se derivan del hecho de que un CEF, una vez lanzado, no puede emitir nuevas acciones a nuevos inversores.
Esto genera una desconexión que conlleva a tener un valor liquidativo (VL) y un precio de mercado distintos.
Si el mercado vuelve a adoptar una postura completamente alcista en el sector tecnológico, es probable que los rendimientos de AIO superen a los del S&P 500, al igual que ocurrió en 2021. La diferencia fundamental radica en que en ese momento, el impulso tecnológico estaba respaldado por la burbuja de las criptomonedas y la política monetaria expansiva de la Reserva Federal.
Esos factores eran insostenibles, mientras que la inteligencia artificial es una tecnología genuina que genera ganancias reales para muchas empresas.
Entonces, uno podría preguntarse, ¿por qué la rentabilidad del valor liquidativo de AIO aún no superó la del mercado en general en 2023?
Parte del motivo es que el descuento de AIO no desapareció por completo. Sin embargo, lo más importante es que, a pesar de su reciente aumento, el rendimiento del NASDAQ aún está atrasado en comparación con el desempeño a largo plazo del S&P 500.
Es decir, no nos encontramos en un verdadero mercado alcista para la tecnología, ya que la misma experimentó un aumento del 12,7% desde principios de 2021. Esto implica que aún hay margen para que el precio de AIO aumente a medida que su cartera se revalorice y su descuento disminuya más.
Estas posibles ganancias se suman al atractivo dividendo del 10,3% que recibiríamos al comprar en este momento.