Lo que hace algunos años se veía como un negocio de nicho, hoy es una realidad que alcanza a todos, en todos el mundo. Y el futuro es aún más prometedor.
La industria de videojuegos dejó hace rato de ser algo para pocos y crece fuerte año a año, consolidándose como uno de los sectores más prometedores y rentables. Por lo pronto, conviven tres factores claves:
- La creciente demanda de los consumidores
- El avance de las tecnologías como el Metaverso
- Los nuevos modelos de monetización
Esto provoca que, según un análisis de la consultora Bain & Company provisto a iProUP, los ingresos globales crecerán más del 50% en cinco años, superando los u$s300.000 millones.
Esto va de la mano con un crecimiento abrumador de la cantidad de gamers que, en América Latina, llegará a la impresionante cifra 315 millones para fin de año, según la firma Newzoo.
"Es uno de los segmentos de la industria IT que más creció en la última década", explica a iProUP Ariel Plabnik, gerente de Negocios para América Latina de la marca de periféricos HyperX.
"Viene acompañado de un cambio cultural de la sociedad, porque fue diluyéndose el concepto de nocividad que el gaming tenía, como si se tratara de un vicio. Fue mutando y apreciándose mucho más sus factores positivos, como la planeación, trabajo en equipo, conducta física y mental, entre otros", completa.
Según su análisis, "este mismo cambio es parte fundamental de la decisión de esas otras compañías que no eran del sector, de sentirse parte y querer participar de esta industria".
Mariano Rubinstein, CEO y cofundador de Sura Gaming, asegura a iProUP que "la gente jugó toda la vida y va a seguir jugando. Ahora se le pone una categoría de negocios llamada gaming, pero no es más que las transformacionales de lo que pasó siempre".
"Las economías e industrias se van gamificando por una simple razón: lo lúdico mueve a la gente. Es mucho más fácil y divertido hacer lo uno quiere jugando, incluso ganar plata", agrega.
Gaming: cómo es este negocio
Desde 2019, la industria recibió inyecciones por más de u$s240.000 millones provenientes de capital de riesgo, inversores privado, fusiones y adquisiciones (M&A) de gigantes tecnológicos y de medios, y sólidos fondeos de compañías de juegos tradicionales.
"Tal como hemos visto con las empresas de transmisión de video en los últimos años, en las que la inversión descomunal generó una ola de contenidos, es el momento para que las compañías de juegos apuesten en grande y pasen al siguiente nivel", anticipa a iProUP Alejandro Perez De Rosso, Partner de Bain & Company.
El crecimiento de la industria se está acelerando por la gran participación de los más jóvenes (de 13 a 17 años) que pasan un 40 % más de tiempo en entornos de videojuegos que en cualquier otra forma de medios, incluidas redes sociales, música y televisión.
En comparación con los usuarios de 18 a 34 años, esperan pasar más tiempo en mundos digitales, jugar con realidad virtual y aumentada y ver partidas de deportes electrónicos.
"Se sienten más cómodos en entornos virtuales: poco más de la mitad de ellos prefieren pasar el rato con amigos en un juego que en persona", remarca Perez de Rosso. Entendiendo estos factores, hay varias tendencias que marcan el pulso de lo que viene:
- Netflix –orientada al consumo a partir del streaming de contenidos– abrió su propio estudio de videojuegos y compró otros
- Ford, Gillette o marcas de bebidas energéticas destinan parte de su presupuesto de marketing a los esports, rama competitiva de los videojuegos
"Por la expansión del gaming a otros espacios de la vida social comenzó a darse un cruce entre industrias o sectores. Un ejemplo es el cine. Hay innumerables adaptaciones a videojuegos de producciones cinematográficas y está sucediendo la inversa: los grandes éxitos del gaming son llevados a la pantalla grande y plataformas de streaming", cuenta a iProUP Lucas Landa, Product Marketing Manager North & South Cone Region de Logitech.
Según Landa, la pandemia tuvo un papel fundamental. "Las relaciones sociales pasaron por una etapa de fuerte transformación, se resignificaron. Esto significa que el gaming no solo constituye una actividad de ocio y esparcimiento individual; es en sí mismo un espacio para las relaciones sociales".
"Es uno de los motivos por los que más empresas quieren entrar: entienden que ya no es una actividad de nicho y meramente recreativa, sino que logró penetrar en otros espacios sociales. En ese marco, las compañías comenzaron a pensar en la tecnología y el gaming como una posibilidad de crecimiento", completa.
Gaming: cómo será el futuro de la industria
Si hay algo que define al revenue de este sector es el gran abanico de posibilidades que ofrece. Incluso, la de generar ingresos.
"El auge de contenido generado en música o video gracias a plataformas digitales y redes sociales también está revolucionando el gaming de la mano de los juegos gratuitos, el multijugador y el Metaverso", puntualiza Plabnik.
Afirma que el crecimiento de los juegos móviles se potenció en los últimos años. Tanto es así que a nivel global más del 60% de los ingresos de la industria del gaming viene del sector mobile.
"Hay juegos preparados para ser móviles y otros que no, pero lo natural es que la gente juegue en cualquier dispositivo. Claramente, mobile es lo que todos tienen en el bolsillo o al alcance de la mano las 24 horas por lo que ese mercado crecerá muchísimo", suma Rubinstein.
Las nuevas tecnologías no solo permiten que las propuestas sean más veloces y visualmente más atractivas; también está cambiando la naturaleza de los juegos. Perez de Rosso señala que "el aumento de la potencia de procesamiento y la reducción de latencia permiten a los desarrolladores crear mundos virtuales más grandes que se ejecutan en cualquier dispositivo".
Según Landa, "la versatilidad del gaming abre un mundo de posibilidades para expandir los negocios, ya que se convirtió para muchos en una profesión a la que le dedican parte importante de su día: es una industria que está generando una gran cantidad de puestos de trabajo".
Plabnik remarca que Latinoamérica está viviendo "una etapa de mayor madurez", con las principales marcas consolidando su posición, aún inmersas en una realidad macroeconómica regional y global "que no ayuda demasiado".
De cara a lo que viene, los expertos aseguran que el Cloud Gaming –jugar títulos sin instalarlos, es decir, reproduciéndolos desde la nube como si fuera Netflix– "traerá grandes satisfacciones".
Con un mercado cada vez más pujante, empresas de calibre global sumándose a la escena y una masa de jugadores que crece todo los días, los videojuegos demuestran que ocupan (y ocuparán) un lugar privilegiado en la industria del entretenimiento.