Cuando empezó la pandemia en marzo de 2020, las instituciones educativas tuvieron que migrar a un entorno puramente virtual. Profesores y estudiantes se apoyaron exclusivamente en la tecnología para poder continuar con el desarrollo de los contenidos. Sin tecnología y sin Internet, gran parte de los jóvenes no hubiesen podido seguir estudiando.
En la actualidad, la situación generada por el Covid-19 aún mantiene ciertas restricciones que han llevado a los jóvenes y adultos a tener cambios adaptativos en sus comportamientos, generándose un alto consumo de internet que los ha llevado a usar permanentemente diferentes plataformas virtuales.
Es un hecho alentador que las escuelas regresen a las clases presenciales. En este contexto, ¿quedarán relegadas las herramientas digitales empleadas durante los dos años anteriores? La respuesta debería ser "no", y por diversos motivos.
Aportes de la tecnología en la educación
Según la UNESCO, las tecnologías de la información y la comunicación (TICs) son capaces de complementar, enriquecer y transformar la enseñanza, reduciendo las diferencias en los aprendizajes. Existen múltiples plataformas, webs, aplicaciones y herramientas que permiten optimizar la labor docente y facilitar la adquisición de conocimientos, así como fortalecer el compromiso en los estudiantes.
Por otra parte, el uso de las TICs en las escuelas ayuda a reducir la brecha digital entre los estudiantes, lo cual es un factor altamente importante en los tiempos que corren. Más que un recurso opcional en la educación, las competencias tecnológicas deben ser pensadas como habilidades indispensables que preparan a los jóvenes para el competitivo mercado laboral.
Si no fuera así, no existirían eventos como "Reimagine Education Awards" (o más conocido como los "Oscars" de la Educación) donde, en la edición del 2021, se presentaron más de 1.000 iniciativas de innovación tecnológicas para perfeccionar el aprendizaje.
Cómo aprovechar la tecnología en clase
Llevar a cabo un modelo híbrido de enseñanza en las escuelas (presencial y virtual) es la mejor alternativa para este 2022. Existen muchas opciones para implementar la tecnología en el ciclo escolar, desde herramientas digitales hasta propuestas educativas online que complementan lo desarrollado en clase. Acá te compartimos algunas de ellas:
- Herramientas de Email Marketing:
Las instituciones educativas necesitan mantener informados a los estudiantes, padres y tutores sobre sus novedades. Muchas veces, la comunicación entre las partes también se realiza para saber el grado de satisfacción y conocer en qué puntos se puede seguir mejorando.
Lo que antes se hacía mediante una encuesta impresa o cuaderno de comunicaciones, hoy se puede agilizar y optimizar. Escuelas de todo el mundo ya están haciendo Email Marketing para mejorar sus comunicados. En el mercado, existen muchas herramientas, como EnvíaloSimple, que permiten crear emails profesionales y creativos de forma muy sencilla. Además, suelen tener un plan gratuito, siendo esto un beneficio para la institución.
Otra ventaja del email marketing es que posibilita realizar un seguimiento de la comunicación, pudiendo controlar si recibieron el email, lo abrieron, interactuaron, etc. Esta es una excelente opción para conectar con los alumnos y tutores desde un lado diferente, original y llamativo.
- Webs de cursos y talleres gratuitos:
La educación no finaliza al salir de un salón de clases. A toda hora y lugar, los jóvenes siguen formándose. Desde las escuelas, es interesante invitarlos a reformar lo aprendido con cursos gratuitos disponibles en internet.
Hay muchas páginas web y canales de YouTube que ofrecen talleres sobre distintos temas de relevancia. Por ejemplo, Talleres DonWeb publica cada semana nuevas capacitaciones en línea donde especialistas de toda Latinoamérica enseñan sobre marketing digital, estrategias de comunicación, e-commerce, tecnología, negocios, fotografía y mucho más.
- Plataformas educativas con Cloud
Si las clases se realizan de manera híbrida, el soporte digital será un punto clave. Todos los documentos, presentaciones, tareas, exámenes online y procesos de interacción entre docentes y estudiantes, necesitarán de una plataforma con buena infraestructura. Sobre todo, un lugar rápido y de buen rendimiento para no limitar el proceso de enseñanza y aprendizaje.
Moodle y el soporte de Cloud Hosting fueron los más elegidos en el 2020 para garantizar un buen funcionamiento del aula virtual. Lo que hay que analizar es la rapidez que brinda el servicio, seguridad y flexibilidad, ya que a medida que se necesiten más recursos (como RAM, espacio en disco y CPU) es bueno poder incrementarlos sin ningún problema.