En un escenario con una inflación acumulada de 51% en 2021 y la evolución salarial que –en la mayoría de los casos– se ubicó por debajo del incremento de precios, el poder adquisitivo de los argentinos se deteriora día a día de manera inexorable. Los aumentos se dan aquí y allá: alimentos, prepagas, servicios, educación, y cada vez quedan menos gastos que recortar.
Los servicios de telecomunicaciones (Internet, telefonía móvil, fija y TV paga) también son una carga en la endeble economía familiar, sobre todo en un contexto en el que la pandemia mantiene todavía a muchas personas en sus hogares trabajando o estudiando de manera remota.
Durante todo 2021, el rubro Comunicación fue el segundo que menos aumentó: 36%, sólo superado por servicios públicos y mantenimiento del hogar (28%). Y se ubicó bastante lejos del 55% de bebidas alcohólicas o el 50% de alimentos.
Por la aplicación del DNU 690 (agosto 2020), que declaró servicio público a las telecomunicaciones y determinó que los aumentos deben ser fijados por el Gobierno nacional, las tarifas se mantuvieron prácticamente planchadas.
En tanto, las diferentes medidas cautelares presentadas por los operadores dejó al margen del decreto a Telefónica, Telecom (Cablevisión y Fibertel), Telecentro, DirectTV y la Asociación Argentina de Televisión por Cable (ATVC), que tendrán libertad para establecer las subas en los servicios que crean oportunas.
En ese sentido, probablemente se vean aumentos más contundentes este año, ya que los operadores buscarán compensar un rezago en las boletas que, según estimaciones del sector, rondaría entre el 60 y 70%, para retomar sus planes de inversión y despliegue y mantenimiento de redes.
En diálogo con iProUP, Marina Rosso Siverino, vicepresidenta del Departamento Técnico del Centro Argentino de Ingenieros, opina que el congelamiento de tarifas perjudicó a los operadores y generó desinversión y el cierre de puestos de mantenimiento. En definitiva, deterioró los servicios prestados a los usuarios.
A las dificultades que trajo el DNU, Rosso Siverino suma otras variables que complican todavía más el escenario: los salarios de los trabajadores, el precio del combustible, los aumentos de los servicios, los costos asociados del coronavirus, más el precio de la banda y los equipos que están dolarizados.
"Con tarifas congeladas no hay inversión y, por el momento, los únicos incentivos que hay son los Aportes No Reembolsables (ANR) que otorga Enacom para el segmento de empresas pequeñas o medianas y ahora, para las más grandes, la posibilidad de usar los fondos del servicio universal para ampliar la cobertura de fibra óptica en localidades pequeñas", explica a iProUP.
La situación es compleja. De cara al despliegue de esta tecnología, también necesaria para avanzar en el desarrollo de 5G, el Cabase Internet Index, señala que solo 10 de cada 100 hogares de Argentina tienen conexión a Internet por fibra óptica, mientras que la tasa de crecimiento -que había superado el 140% en 2019-, cayó al 39% en 2020.
Considerando que una familia tipo necesita –según el INDEC– unos $76.000 mensuales para no ser pobre, saber qué porcentaje de los ingresos se destina a servicios de telecomunicaciones es clave para entender qué lugar ocupa este gasto en la economía doméstica.
Los precios varían de operador a operador (aunque no demasiado) y casi todos ofrecen bonificaciones por varios meses, descuentos de hasta el 65% y una oferta de servicios empaquetada para alivianar la carga de los consumidores.
A continuación, se detallan ejemplos para un matrimonio con dos hijos pequeños para calcular el importe de la "canasta tecnológica" con los tres operadores más importantes del país.
Se puede pensar en planes celulares de 5 GB de $2.490 mensuales cada uno ($4.980) para los padres y de 3GB $1.850 por mes ($3.700) para los chicos. Hasta aquí, una familia desembolsa $8.680 solo en concepto de telefonía móvil.
Además de las prestaciones básicas del plan, Claro ofrece tres meses de Amazon Prime Video, roaming de datos en América y países limítrofes según el plan y Claro Drive incluido.
A los gastos en conectividad móvil deben sumarse los servicios del hogar. El operador ofrece un pack de Internet WiFi de 50 Mb más línea fija a $3.000 que, con bonificación de 65% durante 11 meses, desciende a $1.000 mensuales. El plan incluye llamadas ilimitadas a destinos Claro, 4.000 minutos para las locales, 4.000 minutos de larga distancia nacional y el costo de instalación bonificado, según términos y condiciones.
Además, se puede completar la oferta con TV HD por $1.500, más tres meses de Amazon prime video bonificados. Esta familia está pagando por sus abonos de telefonía móvil, TV e Internet, un total de $11.000 al mes.
Suponiendo que esa misma familia decida centralizar sus servicios en Telecom, deberá contratar dos planes de 5GB cada uno a $1.450 por mes (están bonificados al 50%) y dos de 3GB para los más chicos, que se abonan $1.325 por mes. Los cuatro pagarían $5.550.
En cuanto a los servicios para el hogar, cuenta con un plan de Internet de 50MB que tiene un precio de lista de $4.300, pero se ofrece a los clientes por $1.990 final, más la contratación del servicio de TV Clásico a $1.850 final por mes (precio de lista $2.552).
Así, abonará por todos los servicios $9.400 mensuales. Para un mayor ahorro, también puede contratar alguno de los planes convergentes que propone, como el Plan móvil 5 GB Internet 100 MB por $2.500 o el Plan móvil 5 GB Internet 100 MB Flow Box Telefonía Fija a $3.800.
El operador de capitales españoles ofrece el abono de 3GB a $1.800 y el de 5G a $2.500. Esto lleva el gasto de telefonía móvil para una familia de cuatro integrantes a $8.550.
En lo que respecta al hogar, es posible contratar el servicio de Internet Fibra Simétrica de 50MB por $4.300 que, con la bonificación del 65% durante 11 meses, queda en $1.500 mensuales.
El operador también propone Movistar TV, plataforma de video online con 97 canales de TV, series y películas que cuesta $1.670 pero que con la bonificación del 50% por un año baja a $835, y el pack con fútbol $1.330. El total desembolsado por una familia tipo en este caso ronda los $11.000.
Estos ejemplos son solo algunos esquemas posibles, porque la oferta de servicios y combinaciones disponibles son varias. Apoyados en la convergencia, y para retener a los clientes, casi todos brindan packs que resultan más convenientes que contratar todo por separado. Así, buscándole la vuelta, el cliente siempre puede obtener algún beneficio y pagar menos por sus servicios.
En ese sentido, desde Telecom explican a iProUP que en el marco de la convergencia integran beneficios en ofertas de TV paga con Flow, Internet y telefonía fija y movilidad, con Personal, que permitan a los usuarios acceder a promociones muy convenientes sobre el valor del servicio.
"Queremos brindarles a nuestros clientes conectividad total y permanente, y entretenimiento en todas las pantallas que elijan. Por eso, estamos buscando nuevas formas de sumarle valor a nuestros productos y servicios, y alentar las nuevas tendencias de consumo que van incorporando", completan.
Para Rosso Siverino, los operadores no tienen propuestas diferenciadas y es necesario avanzar en un cambio en la oferta de Internet que contemple la posibilidad de que no todas las personas vuelvan a trabajar a las oficinas.
"Las instalaciones domiciliarias están pensadas para que la gente use Internet a la noche cuando vuelve a su casa, pero ahora el uso residencial es casi corporativo, porque lo que subías en la oficina, hoy lo subís en tu casa. Necesitamos redes simétricas, porque cambió el tráfico", enfatiza.
Será cuestión de aguzar el ingenio para armar el combo de servicios que más se ajuste al bolsillo de cada uno, aprovechar los descuentos y recordar darlos de baja antes de su vencimiento y esperar que los aumentos programados para este nuevo año no sean desmedidos.