Mark Zuckberg es un innovador nato y símbolo de Internet "social". La aparición de Facebook bajo el nombre de FaceMash en 2003 y con el cambio a TheFacebook en 2004, sentó las bases del imperio tecnológico que lo posicionó como una de las grandes mentes de la era 4.0.
El rápido crecimiento de la plataforma y las sucesivas y exitosas compras de otras (Instagram y WhatsApp), permitieron que Zuckerberg se codee con otros gigantes de la industria, como Apple y Microsoft.
Luego de un año turbulento, en el que la privacidad y el uso de los datos estuvo bajo escrutinio público, pateó nuevamente el tablero, reacomodó las fichas y arrojó sobre la mesa un concepto inspirado en la ciencia ficción, pero que promete marcar el futuro de la humanidad: el metaverso.
"Modificará radicalmente la forma en la que trabajamos y hacemos las cosas en nuestra vida personal. El mundo está cambiando y nuestra forma de trabajar debe ir a la par", señalan a iProUP desde Meta, nueva identidad del holding que nuclea a todas las empresas de Facebook.
También remarca que el "trabajo remoto ofrece la flexibilidad de trabajar desde cualquier lugar, pero esa flexibilidad trae ciertos desafíos, como sentimientos de soledad y sensación de aislamiento o dificultad para concentrarse frente a las distracciones propias del entorno hogareño".
"Por eso, necesitaremos mejores herramientas, que nos permitan lograr más productividad, estar presentes y mantenernos en contacto con nuestros compañeros sin perder esa flexibilidad. Es allí donde la realidad virtual puede ofrecer una sensación real de presencia, favoreciendo la productividad y la colaboración de las personas, estén donde estén", completan.
Aunque suene ambicioso, el plan tiene sentido, al menos considerando los saltos de innovación de las últimas décadas. La evolución tecnológica alcanza cada varios años hitos que revolucionan para siempre al mundo y la forma en la que las personas se relacionan entre sí.
La escritura, los diarios, la radio, el correo, el telégrafo, el teléfono, la TV y, hasta hoy, las pantallas de los smartphones, fueron medios que el ser humano encontró para comunicar y comunicarse.
Si bien el metaverso no es un concepto creado por Meta, será quien porte la bandera de este nuevo cambio de época detrás del cual vendrá una ola de empresas que no querrán quedarse afuera. ¿El premio? Un negocio de u$s800.000 millones.
Un premio gordo pero no inmediato
Ambicioso, sí. Inmediato, no tanto. La tecnología que respalda la visión de metaverso como la presentó Zuckberberg todavía está lejos en el horizonte.
Si bien ya hay casos de uso de realidad virtual y aumentada (especialmente en el mundo del gaming), desde Meta confirman a iProUP que quedan por construir "una gran cantidad de tecnología e infraestructura que llevará entre 5 y 10 años antes de que sea una realidad". Para ello:
- La infraestructura debe transformarse con nuevas tecnologías, hardware y especificaciones de refrigeración para respaldar un servicio sólido
- Se requiere construir nuevo equipamiento que incluya pantallas holográficas, proyectores, baterías, chips de silicio personalizados, cámaras, parlantes y sensores, entre otros
"En esencia, es un cambio profundo de internet en general. Es una propuesta diferente de utilizar la red e integrar plataformas en un solo concepto: un universo digital", revela a iProUP, Facundo Tula, Fundador de Diacrítica Consultores, agencia digital especializada en estrategia digital
Según su visión, "el metaverso no es algo que esté inventando Facebook. Es un concepto de la ciencia ficción y que hace unos años resuena de forma muy sutil en internet en general".
Se trata de un modo de interactuar diferente. En este sentido, Tula ejemplifica lo que será el cambio entre el presente y el futuro:
- "Ahora, podés entrar a Facebook en una pestaña del navegador, usar Whatsapp en otra o en el teléfono. A la vez, podés estar jugando con amigos mediante alguna plataforma web o una consola
- "Si cruzamos todo eso agregando realidad virtual, en lugar de tener pestañas en una pantalla y acciones que comandás con un joystick, teclado o mouse, podés colocarte un casco y vivenciar todo eso, pero en primera persona"
En este cambio de paradigma aparecen las oportunidades, tanto para empresas como para los usuarios.
Nuevo modelos
"Según Bloomberg Intelligence, el metaverso supondría para 2024 un negocio de u$s800.000 millones. Se abre un panorama comercial impresionante para las marcas, que desde ahora deberían pensar en estrategias que contemplen esta 'hibridez' de mundos físicos y digitales", señala a iProUP Santiago Olivera, presidente de Interact, la Unión de Agencias Interactias.
Asimismo, de acuerdo a un estudio de Wunderman Thompson al que accedió iProUP, los usuarios podrán acceder a bienes que solo existirán en el metaverso: desde obras de arte y prendas de ropa hasta propiedades que se venderían a u$s76.000 en promedio.
Una de las industrias con más "futuro" para las marcas es la de los videojuegos, que ofrece más potencialidades que la de la música o la del cine combinadas: gamevertising. "Ya pudimos acceder a esta experiencia en juegos como Fortnite o Roblox, en las que marcas como Ferrari o Hyundai se incorporaron a estos mundos digitales. El gran atractivo en el caso del gaming es la posibilidad de construir engagement con usuarios altamente fidelizados", señala Olivera.
Juanma Linares, Strategy Director de R/GA, remarca a iProUP que lo más interesante está en las oportunidades que "aún no podemos ni imaginar".
Para los expertos, el metaverso traerá nuevas posibilidades difíciles de imaginar hoy
"Pueden ser nuevas formas de vender productos digitales existentes, creación de versiones digitales de artículos físicos, mejorar el relacionamiento con audiencias y el engagement de los procesos de trabajo remoto o híbrido, o proveer servicios a compañías comercializando el espacio del metaverso, entre otras", adelanta.
Según el directivo, "cuando el cambio es tan radical en los paradigmas, el pensamiento tradicional no nos sirve para aprovechar todo el potencial que generan esas innovaciones".
Por su parte, Andrés Pagella, Senior Technology Director de R/GA, pone de manifiesto que el principal desafío hoy es la falta de estandarización y avances tecnológicos.
"En ocasiones anteriores, esto ha requerido de la conformación de comités de empresas líderes que deben proponer y debatir potenciales maneras de interconectarse entre sí, proceso que lamentablemente es bastante burocrático", indica.
Además, comenta que otra línea de pensamiento que insiste con que el metaverso va a ser, o al menos debería ser, descentralizado. Hasta hoy, poco se ha avanzado en esta otra dirección, lo cual hace que sea más probable que el desarrollo sea impulsado por corporaciones que por organizaciones sin fines de lucro".
Ecosistema profundo y (necesariamente) colaborativo
Para que toda esta visión prospere, el trabajo tendrá que estar repartido entre sus principales actores. No solo las empresas como Meta tendrán un rol fundamental, sino que, en esta visión de nuevo ecosistema, los usuarios y creadores de contenido jugarán un papel principal.
"Toda la industria tendrá que trabajar en estándares para hacer de esta una plataforma abierta, tal y como lo es Internet. El metaverso se parecerá más a cómo funciona Internet qué a cómo lo hacen los teléfonos móviles, en los que existen ecosistemas separados y no podés moverte fácilmente entre ellos", comentan desde Meta a iProUP.
Desde el gigante remarcan que "el éxito del metaverso depende de la construcción de una interoperabilidad sólida entre los servicios, por lo que las experiencias de diferentes empresas puedan funcionar juntas".
"El metaverso no se puede construir de otra manera: lograr que este sea el estándar en toda la industria será un desafío técnico, como así también lograr un acuerdo al respecto", completan.
En este sentido, ya son varias las compañías que están trabajando para integrarse al metaverso. El unicornio argentino Globant es una de ellas, y lanzó recientemente el Globant Metaverse Studio, plataforma que utilizará sus capacidades ya existentes en áreas como la digitalización, medios, videojuegos y blockchain para desarrollar estas experiencias.
"Más de 2.000 Globers en todo el mundo trabajarán en proyectos relacionados al nuevo Studio, ayudando a construir herramientas, tecnologías y estrategias que permitirán que los clientes se reinventen y surjan como líderes en sus industrias", anticipa a iProUP Kevin Janzen, Managing Director de Gaming & Metaverse en Globant.
Además, el ejecutivo asegura que estos metaversos abrirán las "posibilidades de la reinvención" a las interacciones entre marcas y consumidores, así como el crecimiento de los negocios digitales: "Será en estos nuevos espacios donde las compañías podrán extender su presencia, oferta y creatividad, amplificando la participación de clientes y empleados".
El metaverso será la próxima internet. Por lo tanto, los grandes players deberán garantizar interoperabilidad entre sus mundos virtuales
En este sentido, Martín Sciarrillo, director de Tecnología de Microsoft Argentina, resalta a iProUP que actualmente la sociedad está viviendo tiempos de una gran convergencia y disrupción de nuevas tecnologías:
- El cómputo en la nube (Cloud Computing) y en el borde o fronterizo (Edge Computing)
- Gemelos digitales (Digital Twins)
- Internet de las Cosas (IoT) y automatización
- Rrealidad aumentada, mixta y virtual (RA, RM y RV)
"Las oportunidades son tan diversas como la cantidad de industrias que pueden favorecerse con el metaverso: ensayar protocolos de cuidado para volver a la oficina y estimar su efectividad; crear una nueva planta de trabajo y conocer cuántos recursos y tiempo demandará, hasta diseñar nuevas ciudades y anticipar la inversión en infraestructura", explica.
La realidad es que si este nuevo mundo es controlado por pocas empresas, será difícil que tenga un alcance masivo. O, al menos, abierto, como proponen las firmas que ya están trabajando el concepto. Sin embargo, cada una de ellas ya está dando sus primeros pasos en un terreno aún inexplorado.
"Meta hoy es el principal exponente y quien está dirigiendo el viaje. El resto, Microsoft, Adobe, Twitter y Google, empezarán a pensar cómo integrarse al metaverso de Meta o crear los propios que puedan integrarse con el de Meta y entre sí", reflexiona Tula.
Y concluye: "Si todo este nuevo concepto tiene efecto y logra la penetración adecuada en el mercado, será necesario que todas las plataformas se preparen para funcionar e interoperar".
El metaverso parece aún lejano y con tintes de ciencia ficción. Pero la tecnología, que no frena su paso, ya activó los engranajes de un nuevo paradigma que promete cambiar el mundo tal como se lo conoce hoy.