La pandemia puso en jaque al sistema de salud en la Argentina. Si bien el Gobierno había utilizado las cuarentenas para reforzarlo, la infraestructura sanitaria se resintió con la segunda ola y sin dudas dejará sus cicatrices de cara a los próximos años.
En consecuencia, la ola de digitalización alcanzó a un rubro que, de forma indefectible, tuvo que abrazar estas transformaciones para acompañar el avance de la enfermedad. En este contexto, para fin del 2020 las tarifas de la medicina privada aumentaron 15% (producto del congelamiento), mientras que en los primeros cinco meses del 2021 ya se acumulan un 14,5%.
Según datos del comparador de prepagas ElegíMejor provistos a iProUP, la cobertura en los prestadores tradicionales tiene un abanico gigantesco de precios:
-
Una persona soltera sin hijos accede a planes que oscilan entre $3.900 y $61.500 mensuales
-
Una familia tipo (matrimonio con dos hijos) puede gastar entre $10.500 y $127.000
Por otro lado, según cifras de la consultora Grupo Gestión suministradas a iProUP, el sector incrementó, en promedio, 53% la demanda de empleo en los primeros nueve meses de 2020. Esta cifra impactó en el negocio de los prestadores de salud.
Según revela Galeno a iProUP, durante el año pasado:
- Pasó de tener 400 consultas mensuales a picos de 3.000 diarias
- Se sumaron las recetas digitales, que crecieron significativamente el último año (50.000 por mes)
En este nuevo contexto, las teleconsultas, las aplicaciones de las prepagas y las plataformas online que comparan planes, prestaciones y precios, tomaron la delantera y acentuaron este cambio.
Aliado del bolsillo
En lo que respecta al cambio que sufrió el rubro el año pasado, Andrés Lawson, fundador y CEO de Osana (una healthtech local), afirma a iProUP que "la pandemia aceleró significativamente la adopción de nuevas herramientas tecnológicas, tanto por parte de los prestadores como de los financiadores".
"Por un lado, hemos presenciado el auge de nuevas formas de brindar servicios, como ser la telemedicina, en la que se vio una gran adopción tanto de los profesionales como de los pacientes", agrega.
Andrés Lawson, fundador y CEO de Osana
Además, el CEO de Osana remarca que si bien fue una situación forzada, la pandemia puso en evidencia que las nuevas modalidades generan una mejor experiencia para el paciente y una optimización en el uso de los recursos a lo largo de la cadena de valor.
"Del mismo modo, la receta electrónica genera más comodidad para el paciente, contribuye a su historia clínica y provee mayor grado de seguridad. Si bien se aceleró con la digitalización, aún estamos en los albores de una gran transformación, sembrando los pilares fundacionales", anticipa.
Por otra parte, comenzaron a tomar fuerza nuevos jugadores del mercado que ofrecen plataformas de salud paralelas al sistema tradicional, que, además, ayudan a cuidar el bolsillo de los argentinos.
Wiri es uno de estos nuevos exponentes. Se trata de una plataforma de acceso a la salud privada, sin cuotas mensuales, en la que las personas solo abonan los servicios médicos que utilizan. No obstante, no es una obra social, ni una empresa de medicina prepaga, sino un complemento.
Dentro de su oferta, Wiri permite acceder a las prestaciones que brinda el sector privado y médicos particulares a precios preferenciales. Por ejemplo, se puede conseguir un turno con un profesional presencialmente o por videollamada desde $650.
De acuerdo con la compañía, los servicios más populares son:
- Consulta pediátrica: desde $500
- Clínica médica-videoconsulta 24 horas: a partir de $600
- Control general en laboratorio clínico: arranca en $975
- Consulta de ginecología: parte de $1.200
Asimismo, posibilita el acceso a descuentos en más de 6.500 medicamentos dentro de la plataforma, de hasta el 30%. Marcelo Aguilera, CMO en Wiri Salud, revela a iProUP que durante 2020 se sumaron más de 15.000 personas nuevas.
"Inicialmente, nuestros usuarios eran quienes no tenían acceso a ninguna cobertura: ni obra social ni prepaga. Wiri Salud les posibilitó contar con servicios de calidad a un precio accesible para el 75% de la población", explica.
Asimismo, destaca que a fines del 2020 había sido adoptado por muchos afiliados a una obra social que no podían acceder a un turno médico cercano, tenían urgencia por videollamada o debían realizarse estudios médicos el mismo día o un test COVID a domicilio.
Según sus responsables, los beneficios son:
- Precio: las consultas arrancan en $500
- Optimización de tiempos: la espera de un turno no excede la semana
- Aprovechamiento de la tecnología: videollamadas con médicos
- Gestión online: se efectúa completamente por la web
- Sin intermediarios: el pago realizado por la plataforma va al médico
- Sin mensualidad: no hay obligación de abonar todos los meses por el servicio
"El 60% de los usuarios tiene cobertura médica y utilizan Wiri para complementar servicios que su obra social no les ofrece. Ahorran, en promedio, $14.000 por mes de prepaga del grupo familiar", afirma.
Digitalizar todo
Si bien las healthtech ganan espacio entre los prestadores tradicionales, de la misma forma que las fintech buscan "comerle" mercado a los bancos, la realidad es que hay "ancho de banda" para todos y, en muchas ocasiones, los grandes también se están digitalizando para atender mejor a sus clientes.
Miguel Angel Urrutia, Director de Tecnología de Galeno, afirma que hace dos años empezaron a integrar la consulta médica digital en su app gracias a la función "Llamando al Doctor", que ya venía creciendo antes de la pandemia. "Por supuesto que, a partir del Covid-19, la plataforma tuvo un crecimiento exponencial", comenta.
Por otro lado, Urrutia remarca que algo similar ocurrió con la gestión digital, ya que es notoria la gran adhesión de clientes para resolver cuestiones administrativas –como reintegros y autorizaciones– a través de la app.
"El año pasado existía todavía cierto temor a utilizar tan masivamente estas herramientas digitales, pero hoy ya es sin dudas el canal de atención y gestión más elegido y valorado", expresa.
Por su parte, Fabián Barralón, CEO y cofundador de ElegíMejor, asegura a iProUP que las empresas de medicina prepaga se "digitalizaron de manera lenta".
"Algunas habían empezado a utilizar el sistema de consulta médica online o de historial médico en la web. Sin embargo, con la pandemia este tipo de herramientas se popularizó y se sumó la venta de planes online".
Según Barralón, "lo que quisimos lograr fue ir más allá de comparar entre prestaciones de salud. Apuntamos a que los usuarios puedan adquirir el plan que más les convenga a distancia, vía web, algo que antes no era posible porque demandaba presencialidad".
El ejecutivo cree que la digitalización en el rubro se dio rápidamente por una cuestión de supervivencia, para poder mantener cierto nivel de ventas.
Recuerda que en sus comienzos, ElegíMejor se reunió con las prepagas para contarles que su visión era brindarle a los particulares la opción de afiliarse online de forma fácil y simple, a lo que estas dieron su veredicto tajante: "Eso no iba a pasar nunca". Pero el tiempo les demostró lo contrario.
A fines de 2020, ElegíMejor terminó con un promedio de 350.000 visitas mensuales de personas que buscaban por Internet mejores opciones para contratar un servicio de medicina. "Para 2021 el objetivo es tener el mismo servicio que tenemos para individuos o familias, pero para empresas y que ellas puedan comparar planes corporativos", adelanta Barralón.
Y asegura que "lo que no saben muchas compañías es que hay muchas otras opciones económicas y con muy buenas prestaciones. Nuestra idea, de cara al 2021, es centralizar la búsqueda de cada compañía y cotizar en poco tiempo los mejores planes corporativos para sus empleados".
De esta forma, las healthtech se posicionan como una alternativa, mientras que los prestadores tradicionales se digitalizan en pos de cuidar mejor la salud de sus pacientes y también sus bolsillos.