Perdiste la cartera? No se acaba el mundo. Ahora está el AirTag. Se trata del nuevo dispositivo que lanzó Apple durante su primer encuentro online del año.
Es un producto completamente nuevo de Apple. Son pequeñas etiquetas redondeadas con las que se pueden encontrar objetos perdidos fácilmente a través de la red global Buscar o "Find my".
Se puede adherir a una cartera, a las llaves o cualquier otro elemento. Lleva un altavoz incorporado y se puede hacer que suene para localizarlo. Basta con abrir la nueva pestaña Objetos de la app Buscar o decir "Siri, ¿dónde está mi cartera?". Si se cayó cerca, como debajo del sofá, o está en la habitación de al lado, solo tendrás que seguir la pista del sonido.
AirTag está diseñado desde cero para mantener los datos de ubicación privados y seguros. No se almacenan físicamente datos de ubicación ni historial de ubicaciones dentro de AirTag.
EL PAÍS ha probado los nuevos AirTag, que han salido a la venta el 30 de abril por 35 euros. Un pack de cuatro aparatos cuesta 119 euros. El dispositivo es bastante compacto. Es del tamaño de una moneda de dos euros y recuerda a los clásicos pines redondos. Por uno de sus laterales, es de color blanco. El usuario puede escoger si grabar en él emojis, textos y números. Por el otro lado, la superficie del AirTag se asemeja a un espejo. En la mitad del mismo, tiene la famosa manzana de la compañía de Cupertino.
Estos aparatos son resistentes al agua. El fabricante indica que se pueden sumergir hasta un metro durante 30 minutos. Su batería, que es reemplazable, "dura más de un año". Para poder acoplar un AirTag a cualquier objeto es necesario comprar algún accesorio que lo sujete, salvo que queramos por ejemplo llevarlo suelto en el bolso. Los precios de los llaveros o correas que vende Apple con esa finalidad igualan o incluso superan los de los propios dispositivos. Mientras que las correas de piel cuestan 35 euros, los llaveros valen 39 euros. Sin embargo, en algunas tiendas venden complementos no originales que se ajustan al AirTag por precios muy inferiores.
Como suele ocurrir con los aparatos del ecosistema de Apple, los AirTag solo pueden utilizarse si se tiene un iPhone o un iPad. Configurarlos es muy sencillo. Para ello, hay que tener el iPhone con la última actualización de software disponible y activar el bluetooth. Al poner el AirTag a menos de cinco centímetros del móvil, aparecerá un aviso en la pantalla para conectar el aparato. El usuario puede escoger qué nombre poner a cada dispositivo en función de dónde lo vaya a poner: de los auriculares al bolso pasando por la bici, una cámara, la cartera, una mochila, una chaqueta, el equipaje, las llaves o un paraguas. También le puede cualquier otro nombre.
Cuando se pierde un objeto, existen diferentes formas de encontrarlo. El primer paso es abrir la aplicación Buscar. Si lo que se ha perdido está cerca, la mejor opción probablemente sea activar la "búsqueda de precisión". Una flecha indicará la ubicación exacta del objeto en cuestión. "Tres metros a tu derecha", indica por ejemplo la aplicación. Apple explica que el iPhone utiliza tecnología de banda ultraancha para determinar la distancia y la dirección del AirTag. Además, utiliza los datos que recoge la cámara, el acelerómetro o el giroscopio.
La búsqueda de precisión funciona bastante bien y resulta muy útil para encontrar un objeto determinado. Apple no ha especificado hasta qué distancia funciona esta opción. En las pruebas realizadas por este periódico, esta alternativa ha resultado especialmente útil al estar a unos 10 metros del aparato. En ocasiones, pese a que no se está muy lejos del aparato, se indica que "la señal es muy débil" y se pide al usuario que pruebe a desplazarse a otra ubicación. Esta opción no resulta útil cuando el AirTag no se encuentra quieto. Si el objeto está en movimiento, la app indica que no puede detectar "información precisa".
Otra opción útil para cuando se está cerca del objeto en cuestión es la de hacer sonar el dispositivo. Basta con pronunciar "oye Siri, dónde están mis llaves" para hacer que empiece a pitar. También es posible elegir esta opción desde el móvil. Al hacerlo, el AirTag comienza a emitir una serie de pitidos. Esta opción resulta muy útil en un lugar silencioso. No obstante, en ocasiones se echa en falta que sea más fuerte. Aparatos como el Samsung Galaxy SmartTag emiten un sonido más potente. En un bar o en un lugar con gente hablando es muy probable que el usuario no escuche los pitidos del AirTag.
Dispositivos que están lejos y "modo perdido"
Pero, ¿qué ocurre si el objeto perdido está lejos y no se pueden utilizar estas opciones? "Si te has dejado algo en la playa o en el gimnasio, que no cunda el pánico", comenta la compañía. La red Buscar de Apple permite que el dispositivo sea detectado por otros usuarios con un iPhone, un iPad o un Mac que pasen cerca del mismo. De esta forma, el usuario podrá consultar las indicaciones para llegar hasta él en la aplicación Mapas. Samsung ofrece una opción similar con el Galaxy SmartTag. Permite recurrir a la red Galaxy Find para que otros usuarios puedan detectar el dispositivo.
Apple asegura que solo el usuario puede ver dónde está su AirTag y que la ubicación en ningún caso se almacena en el mismo. Además, indica que todos los datos recopilados son anónimos y están cifrados. "Los dispositivos de la red Buscar que transmiten la ubicación de su AirTag también permanecen anónimos y los datos de ubicación se cifran en cada paso del camino. Por lo tanto, nadie, ni siquiera Apple, conoce la ubicación de su AirTag o la identidad de cualquier dispositivo que ayude a encontrarlo", señala.
En el caso de no encontrar el aparato o de no poder acceder a su ubicación, el usuario puede activar el "modo perdido". De esta forma, recibirá una notificación cuando la localización esté disponible. También puede elegir qué mensaje quiere mostrar a quien encuentre el objeto y dejarle un número de teléfono de contacto. Apple subraya que como el AirTag está vinculado a una ID (una cuenta) de Apple en particular, nadie más podrá utilizarlo.