Tras sortear un año demoledor, reflejado en los principales pilares económicos sobre los que se asienta la gestión que encabeza Alberto Fernández, la minería de litio apunta al 2021 para recuperar el impulso que evidenció en el último lustro.
Confía, para ello, en un Gobierno que ya blanqueó su decisión de hacer de la extracción de ese material uno de los caminos para engrosar las arcas oficiales.
"El mundo avanza hacia vehículos eléctricos con baterías de litio o el uso del hidrógeno verde. Argentina debe ingresar paulatinamente en este sendero. Implementaremos incentivos tanto en la incorporación de movilidad sustentable como en la producción en el país de ese tipo de vehículos y su cadena de valor, que comienza en el litio", reconoce el mandatario.
La decisión oficial de poner foco en esa explotación, más allá de la condena social creciente que evidencia la minería a gran escala, está a un paso de obtener un espaldarazo legal con la llamada "Ley de Electromovilidad".
Se trata de un marco que están elaborando el Ministerio de Desarrollo Productivo que lidera Matías Kulfas y promete generar inversiones en el corto plazo del orden de los u$s5.000 millones.
Según confirman a iProUP fuentes ligadas a GEMERA, cámara que integra a las empresas que hacen exploración minera en la Argentina, la propuesta incluirá:
- Exenciones impositivas para las compañías extranjeras que apuestan por la extracción del metal
- Beneficios para las empresas de transporte que incorporen vehículos eléctricos a sus respectivas flotas
- Facilidades para la instalación de fábricas de baterías y otros componentes
Un punto clave para Desarrollo Productivo está en alcanzar un acuerdo con ADEFA y AFAC, las entidades que integran a los fabricantes de automóviles en la Argentina, para avanzar con la reconversión tecnológica en las plantas de producción.
La "Ley de Electromovilidad" se articularía, además, con otra propuesta del Frente de Todos impulsada por el diputado salteño Lucas Godoy. A principios de febrero, el legislador elevó ante la Cámara baja un proyecto que, de resultar aprobado, declarará a las reservas de litio existentes en territorio argentino como "recurso natural estratégico".
La iniciativa, a la que tuvo acceso iProUP apenas fue presentada, fija "como política de Estado el estudio, investigación del recurso natural mineral litio y sus derivados, el agregado de valor a los procesos productivos y su producción final".
Propone, también, la creación de un instituto oficial, bajo control de Desarrollo Productivo, para avanzar con la explotación e industrialización del litio.
"De los tres países que integramos el 'Triángulo del Litio' –Argentina, Chile y Bolivia-, solamente en el nuestro no se ha avanzado en el tratamiento de forma estratégica. Continúa considerándolo como un mineral más y tratándolo de manera fragmentaria a nivel provincial sin articulación con ninguno de los centros de desarrollo e investigación científica con los que cuenta el país", expone Godoy.
"Actualmente nuestro régimen legal en materia minera regula al litio como un elemento más dentro de los comprendidos en la 1° categoría según los artículos 2 y 3 del Código Minero, el cual, si bien lo considera como perteneciente al Estado, no hace más que establecer que su extracción requerirá de una mera concesión legal, fomentando la extracción directa del producto primario al exterior", añade.
Mientras tanto, Kulfas avanza sin pausa: a principios de marzo se reunió con la directiva de la china Jiangsu Jiankang Automobile (JJA), compañía con la que el Gobierno abrochó un acuerdo ligado al mineral. En concreto, el oficialismo terminó por darle prioridad a la firma para utilizar el litio en el desarrollo de baterías y su aplicación en vehículos urbanos.
A cambio, de acuerdo al Gobierno, JJA "se compromete a realizar las inversiones necesarias para la construcción de una nueva planta de producción de baterías para movilidad sustentable y una planta de chasis completos de buses de pasajeros urbanos, unidades de aproximadamente 12 metros de longitud, en territorio argentino".
Las provincias, disgustadas
Semejante movimiento por parte de Nación lejos está de despertar el mayor entusiasmo en las provincias que acumulan las mayores reservas de litio en la Argentina.
En efecto, desde el entorno del Consejo Federal de Minería (COFEMIN), indican a iProUP que las autoridades mineras de Jujuy, Salta y Catamarca se oponen a la intención oficial de declarar al metal como "estratégico".
En concreto, los distritos no ven con buenos ojos propuestas como la de Godoy, a la que interpretan como un intervencionismo estatal que alejará el ingreso de capitales internacionales.
"La pretensión de declarar al litio como mineral estratégico va en contra del trabajo que se está realizando desde la Nación y las provincias para atraer inversiones que requiere el sector para su desarrollo, y que puede perjudicar la explotación y exportación del mineral", indican desde COFEMIN.
La Argentina es considerada uno de los tres mayores productores de
Litio del mundo
Y añaden: "La concentración de ideas legislativas, que podrían terminar en leyes, obligó al armado de una división de asuntos legales para dar una debida interpretación a los alcances de todos los instrumentos que hoy están en el Congreso o podrían desembarcar en el mismo".
El aspecto que alienta el nerviosismo entre las provincias radica en que el proyecto de Godoy, del Frente de Todos, también contempla la creación de una empresa estatal con prioridad para la extracción y el procesamiento del "oro blanco". Hoy, Catamarca, Jujuy y Salta tienen potestad absoluta sobre el manejo de reservas y la entrega de permisos de explotación.
Un ingreso de Nación en el sector implicará el fin de ese control total, además de que obligaría a las gobernaciones a brindar detalles respecto del tenor de sus yacimientos.
Este último aspecto es objeto de polémica: en tanto la ley actual establece que las provincias son dueñas de sus subsuelos, el Gobierno nacional carece de precisiones respecto de cuánto es el mineral que poseen dichos territorios. Dicho de otra forma: Jujuy, Salta y Catamarca son, hasta el momento, los únicos grandes beneficiados de los negocios que genera la extracción de litio.
Extractivismo foráneo
Que el recurso está y es económicamente aprovechable para los gobiernos y las empresas es algo que no se discute.
"El 80% del litio está en esta región, en salares de fácil extracción. Argentina es uno de los que posee estas condiciones, con evaporación en piletones. Sumado al menor costo que implica su extracción es lo que genera el interés internacional", confía a iProUP Germán Lener, investigador del CONICET y experto en el desarrollo de nuevas tecnologías basadas en litio.
El especialista remarca que "a nivel local es difícil estimar cuánto mineral existe en las reservas, sobre todo porque las provincias no le entregan esta información concreta a la Nación".
"Ese aspecto es dramático porque, en definitiva, no deja conocer con exactitud cuánta materia prima y qué tipo de litio se están llevando las compañías que ya extraen el mineral. La única certeza es que Argentina ya es el cuarto exportador mundial", afirmó.
Para Lener, la inestabilidad política y económica es un aspecto que hoy preocupa a los países que demandan el mineral, aunque "vemos cómo China y Canadá ya tienen control de varios salares en el Norte".
"Eso marca que es un material que es visto claramente como estratégico. En tanto la extracción en otros territorios, como es el caso de Australia y la misma China, siga siendo cara, la expectativa en torno a las reservas de Argentina continuará siendo muy elevada", comentó.
En el país, los trabajos de búsqueda y explotación del litio se concentran en la Puna. Un aspecto acallado por las compañías es el impacto ambiental que la extracción genera en los salares. En simultáneo, su producción consume una enorme cantidad de agua, recurso que no abunda en esa zona.
Entre las comunidades también hay malestar porque, a excepción de determinadas tareas iniciales, el grueso de las firmas extranjeras que interviene en el negocio en el norte no suele contratar mano de obra local.
En cuanto al movimiento de los capitales provenientes del exterior, la presencia china y su comportamiento expansivo es una de las confirmaciones del interés foráneo por garantizarse la provisión del compuesto.
A tono con esto, hace escasas semanas la firma Jiangxi Ganfeng Lithium, gigante del procesamiento del mineral para la industria automotriz, confirmó que inyectará al menos 100 millones de dólares para expandir el emprendimiento Cauchari Olaroz en la provincia de Jujuy.
La compañía en cuestión, que bajo la figura de Exar comparte proyecto con la canadiense Lithium Americas, pretende activar el yacimiento a mediados de este año.
En la actualidad, Jiangxi Ganfeng Lithium cuenta con contratos vigentes de provisión de litio con "pesos pesados" de la producción de automóviles como Tesla, Volkswagen y BMW, para la entrega permanente de material para el desarrollo de vehículos híbridos o directamente eléctricos.
Entre los chinos y BMW
La también china Hanaq Group, con operaciones en el salteño Salar de Diablillos, concretó en el último bimestre de 2020 su primera exportación de cloruro de litio desde la aduana de la localidad de General Güemes –a 55 kilómetros de la capital provincial– justamente hacia la potencia oriental.
De octubre del año pasado a esta parte, la demanda del mineral volvió a ganar ritmo a partir de una recuperación en la demanda de los fabricantes de automóviles.
El mercado interno de China es el que mueve la aguja: el gobierno local viene de iniciar un nuevo programa de estímulo para la compra y uso de vehículos que no requieran de combustibles fósiles.
El gigante oriental fijó como objetivo que al menos 20% de su parque automotor esté integrado por unidades eléctricas a más tardar en 2025. De ahí su renovado interés por pisar fuerte en la extracción y el procesamiento del mineral local.
Claro que los asiáticos no son los únicos que se mueven a gran escala. Con vistas a incrementar la producción de baterías, BMW Group acaba de anunciar una inversión superior a los u$s300 millones para impulsar la explotación de litio en Catamarca.
BMW apuesta a la explotación del
Litio en la Argentina
El anuncio fue realizado por Andreas Wendt, responsable del área de Compras y Proveedores del grupo alemán. Los desarrollos a partir del mineral local serán incluidos en todas las marcas del holding: BMW, Mini, Rolls-Royce y BMW Motorrad.
La extracción del litio en esa provincia estará a cargo de la minera estadounidense Livent y BMW se encargará de procesar el material para producir las baterías de iones en Alemania.
La mencionada Livent controla el yacimiento Fénix, uno de los dos únicos proyectos de litio en fase de explotación concreta en la Argentina. El restante es Olaroz, operado de forma conjunta por la australiana Orocobre, la japonesa Toyota Tsusho y la estatal jujeña JEMSE.