La reciente escalada del precio de criptomonedas como el bitcoin –que en septiembre de 2020 se cotizaba a u$s 10.000 la unidad y en febrero de este año alcanzó un techo superior a los u$s 57.000–, y las declaraciones públicas hechas por personajes como Elon Musk y Bill Gates sobre el tema, elevaron el interés en el mundo entero por estos activos digitales, y en especial en Latinoamérica, una región donde la discusión sobre su adopción aún es muy incipiente.
Musk sugirió que podría lanzar su propia criptomoneda, y además una de sus empresas, Tesla, anunció la compra de u$s 1.500 millones en bitcoin y aceptará este activo como medio de pago. En el otro extremo se ubicó Gates, quien dijo no ser "fanático" del Bitcoin y que quien quisiera invertir en él "debería tener cuidado".
La turbulencia que los dos multimillonarios generaron alrededor de las criptomonedas suscitó que en Latinoamérica los ojos en la región se hayan posado sobre México y Colombia, los dos países que dieron un paso al frente en los últimos años con la habilitación de escenarios regulatorios controlados donde se está experimentado la adopción de estos activos en las transacciones financieras dentro de sus sistemas bancarios y que esta herramienta pueda ser utilizada de la misma forma como se administra una cuenta de ahorros o corriente, una tarjeta débito, entre otros servicios.
Ese crecimiento del interés se hizo evidente en estudios recientes como el que publicó este 1 de marzo Binance Research, grupo de investigación y desarrollo en blockchain de la compañía Binance, líder mundial en el intercambio de estos activos, que en su Índice Global de Criptoactivos 2021 registró que el 52 % describe esta inversión como un medio para obtener ingresos mientras que el 15% de los usuarios encuestados la considera su principal fuente de ingresos. La encuesta fue hecha a 61.000 usuarios de todo el mundo.
¿Qué está pasando en la región?
Bryan Benson, director de operaciones de Binance en Latinoamérica, conversó con Yahoo Finanzas acerca de la situación regulatoria de las criptomonedas en la región. En su concepto, éstas aún se encuentra un paso atrás en la evolución regulatoria respecto a lo que ocurre en otros países del mundo donde estos activos circulan por sus sistemas financieros (Reino Unido, Suiza, Japón, entre otros), una razón para que el foco se concentre en lo que pueda pasar, por ejemplo, en México, pues lo que allí ocurra servirá como espejo para muchos otros países en los que estas discusiones aún ni siquiera están sobre la mesa.
En México, según Benson, está vigente desde 2018 la Ley para Regular a las Instituciones de Tecnología (LRITF). De acuerdo con lo publicado por el Gobierno de México, esta norma "propone considerar el uso de activos virtuales, con previa autorización del Banco de México (Banxico)".
Además, crea el Comité Interinstitucional de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), que estará integrada por funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), del Banxico y de la misma CNBV, "que intervendrá en la toma de decisiones de mayor importancia, como el otorgamiento de autorizaciones, imposición de sanciones, entre otros".
El Banco Central de México insistió en que la única moneda legal en el país es el peso mexicano y que los criptoactivos no pueden ser considerados aún con el carácter de una divisa, a pesar de la citada ley vigente.
Benson describe el escenario como un "monopolio" ya que hay muy pocas entidades con licencia de operación, lo cual restringe el alcance. Por eso están a la espera de que se puedan emitir más licencias a otras entidades financieras para que estas acepten depósitos de criptomonedas y se hagan desembolsos desde las casas de cambio hacia las cuentas bancarias.
La situación en Colombia
En cuanto a Colombia, desde marzo de este año se está ejecutando una prueba piloto avalada por la Superintendencia Financiera, entidad de vigilancia de ese país, que creó el sandbox o arereno, un escenario controlado en el que, con su autorización, nueve alianzas entre bancos tradicionales y exchanges están haciendo pruebas de transacciones con criptomonedas.
La entidad aclaró que esta prueba no significa que las divisas virtuales estén avaladas para su uso dentro del sistema financiero, y por ahora se siguen considerando como un activo más, recibiendo por ende el mismo trato regulatorio que cubre a otros como el oro, por ejemplo. Mientras, el Banco de la República, banco central de ese país, ratificó al peso colombiano como la única moneda legal en su territorio.
Alejandro Beltrán, cofundador de la exchange Buda, que tiene operaciones además en Colombia, Chile, Perú, y la Argentina, celebra que esto ocurra en Colombia, dado que es uno de los países en el mundo con más transacciones de este tipo, y en Latinoamérica sólo lo supera Venezuela.
"Esta prueba piloto es un paso importante para reconocer el ecosistema y entender este fenómeno global que se aceleró por la pandemia. Este ejercicio puede dar resultados interesantes siempre que las entidades financieras vigiladas entiendan la economía cripto, y creemos que es una antesala de lo que puede ser un marco regulatorio en el futuro, porque el Banco de la República y el Gobierno nacional vienen explorando estas tecnologías", sostiene Beltrán.
Fuente: Yahoo! Finanzas