Twitter, con 192 millones de usuarios activos diarios y 330 mensuales, ha sido el miembro más retraído de la familia de las redes sociales. La página del pájaro azul no está en el foco de las grandes acusaciones monopolísticas contra su gremio ni se sienta en la cabecera del poder junto a Google, Facebook, Apple y Amazon (las GAFA), aunque sí ha sido parte en la polémica sobre la libertad de expresión y el cierre de cuentas por instigar la desinformación y la violencia. Además, siempre se le ha achacado cierto inmovilismo. Hasta ahora. En apenas unos meses Twitter ha emprendido una revolución apostando por el audio, por los boletines y por los contenidos pautados. El motivo: necesita crecer, conquistar públicos más jóvenes y ser más rentable.
"La relevancia de Twitter no reside precisamente en su volumen de audiencia en comparación con otras plataformas —Instagram tiene mil millones de usuarios y Facebook, el doble—, sino en el rol que cumple dentro del ecosistema digital que gira en torno a la política, los medios y las noticias de actualidad", explica David Álvarez, consultor de redes sociales. "En Twitter está esa burbuja de gente relevante como políticos, autoridades, periodistas y tecnológicos vinculados a la actualidad", agrega Ana Aldea, especialista en redes sociales y mercadeo. Pero esa burbuja, o más bien el nido, le queda cada vez más pequeña.
En plena pandemia global de coronavirus COVID-19, el CEO de Twitter, Jack Dorsey, junto a parte del equipo ejecutivo de la firma, compartió información sobre el desempeño financiero de la compañía, y reveló cuál será su nueva propuesta de valor y objetivos a largo plazo (2023).
A continuación un detalle y análisis del discurso de Dorsey:
Mejoras constantes en la plataforma: velocidad e innovación
Twitter es lo que está pasando. Las personas llegan a la plataforma para informarse de lo que está ocurriendo en el mundo y para conectar con temas que les son de interés. Crear nuevas features y herramientas que potencien el seguimiento de estos temas es un aspecto prioritario para Twitter. Esto implica aumentar la inversión en tecnología y en equipos.
Redes de código abierto y confianza
Twitter mejorará sus prácticas de moderación de contenido para que sean más transparentes, para brindar a las personas más controles para moderar sus interacciones, habilitar un enfoque de mercado para los algoritmos de relevancia y financiar un estándar de redes sociales de código abierto llamado @bluesky.
Nuevo modelo de negocios: Apoyo a creadores de contenido y sus comunidades
El CEO de Twitter apuesta a la mejora continua de la plataforma para darle más servicios a los usuarios
Twitter presentó Super Follows, una nueva función que permite que los creadores puedan gestionar sus contenidos exclusivos para una audiencia dispuesta a pagar por ello. También lanzó Communities, una nueva función dentro de la plataforma que busca agrupar a usuarios con intereses en común.
Más voz y nuevas formas de comunicar en la plataforma.
Twitter lanzó Spaces, una nueva función para comunicarse al estilo salas de reunión. Cada usuario podrá crear su propia sala de conversación y elegir quiénes participarán, incluso, quienes pueden sumarse como oradores o como oyentes. Esta herramienta es una apuesta fuerte hacia el formato podcasts, con audiencias segmentadas.
¿Cuál es el objetivo de Twitter?
Twitter se propone duplicar sus ingresos a u$s 7.500 millones para 2023 y crecer 20% o más mDAU (Usuarios activos diarios monetizables) por año, alcanzando así 315M o más mDAU en el Q4 de 2023.
¿Cómo logrará Twitter estos objetivos financieros? Con una estrategia clara: ganando participación de mercado con anuncios de desempeño, haciendo crecer la publicidad de marca y expandiendo los productos a pequeñas y medianas empresas en todo el mundo.
Esto significa, por caso, duplicar la cantidad de funciones por empleado que generan directamente mDAU o ingresos. Twitter se centrará en adoptar soluciones tecnológicas externas, modularizar su arquitectura y aumentar el ritmo de experimentación y aprendizaje. Que la seguridad y la privacidad sean más fluidas y escalar en su infraestructura reducirá la complejidad operativa a medida que Twitter crece.
"Está claro que Twitter tiene tres objetivos: seguir creciendo en usuarios y mejorar el tiempo que pasan los usuarios en la plataforma y hacer la red más rentable. Spaces responde a los primeros dos objetivos, pues nada mejor que las salas de audio para hacer que los usuarios echen el rato de charla dentro de la aplicación", apunta Aldea. La compañía quiere alcanzar al menos 315 millones de usuarios activos diarios y monetizables para 2023. "Y parece que la compra de Revue ha sido para cumplir con el tercer objetivo", agrega Aldea. Y es que Twitter, que también quiere duplicar sus ingresos para 2023 hasta los 7.500 millones de dólares (6.200 millones de euros, aproximadamente), parece haber encontrado dos maneras de hacerlo: con boletines y suscripciones.
Lo más importante del discurso de Jack Dorsey
El fundador y CEO de Twitter dejó varias frases interesantes en su discurso: "La mayor parte de las conversaciones públicas de hoy son posibles gracias a Internet. Trasciende todas las fronteras, todos los idiomas y todas las culturas. Tiene el potencial de llegar a todas las personas de este planeta y, algún día, a múltiples planetas."
"Twitter forma parte de la capa de conversación pública de Internet desde hace 15 años. Es nuestro propósito y nuestra razón de ser. Creemos que la conversación pública es importante, y si estás aquí viendo esto, probablemente también lo creas", añadió.
Twitter quiere cambiar para convertirse en la plataforma más utilizada de comunicaciones del planeta
El CEO fue directo y habló de las críticas que Twitter recibe como compañía y del por qué la gente "no cree en nosotros. Se reduce a tres críticas: somos lentos, no somos innovadores y no se confía en nosotros".
Con respecto a la innovación, el CEO aseveró que "estamos de acuerdo en que no hemos sido innovadores". "Esto está muy relacionado con la crítica a nuestra lentitud. Si no podemos enviar el código rápidamente, no podemos experimentar e iterar, y cada lanzamiento conlleva una gran expectativa y un gran coste. Hace unos años, podíamos tardar entre 6 meses y un año en ofrecer una sola función o un nuevo producto a nuestros clientes. Aunque hoy estamos en una posición mejor, nuestro objetivo es reducirlo a menos de unas pocas semanas", precisó.
Algunos pasos ya dados
La primera apuesta ha sido Spaces, que funciona exactamente igual que Clubhouse, la aplicación que apostó por el audio al crear una especie de chat de sonoro controlado sin texto, ni fotografías y vídeos.
Un mes después de Spaces, anunció la adquisición de Revue. Se trata de una conocida herramienta que permite a sus usuarios generar y enviar boletines (newsletters, en inglés) a listas de suscripción, así como ganar dinero a través de un servicio de pago incorporado en la plataforma.
De la mano de Revue también ha nacido SuperFollow, el primer producto de pago de la red para acceder a contenido exclusivo.
Pero Twitter no fue capaz de contener las jugadas agresivas de importantes competidores como Snapchat e Instagram que terminaron por comerse la tarta del mercado que había cocinado. En 2016, la red social anunció el cierre de la aplicación. Cuatro años después, vería con desdén el surgimiento de TikTok, que poco tiene de distinto a Vine.
Pero Vine no ha sido el único frankenstein del pájaro azul. Este mes, la compañía llevará a cabo la clausura de Periscope, su aplicación enfocada en los directos. La razón es simple: ya casi nadie la utiliza. En los últimos dos años, el consumo ha caído —Periscope no ha especificado cuánto— y el mantenimiento de la aplicación ha resultado ser "insostenible". Twitter compró Periscope en 2015 por 86,6 millones de dólares (72,6 millones de euros). Ahora, cinco años después, Twitter seguirá apostando por la transmisión de vídeo en vivo, pero con una herramienta integrada con la aplicación de su red social y no externa: Twitter Live.
La compañía de Jack Dorsey está dispuesta a dejar de ser "solo Twitter" aunque renovar el nido del pájaro azul no sea tarea fácil. "El Twitter que conocíamos no tendrá nada que ver con el que veremos —y estamos viendo— en los próximos meses", augura Moreno. Y es que para cobijar, retener y monetizar a millones de pajaritos perdidos por internet, harán falta más de 280 caracteres, indicó El País.