La Cámara Argentina de la Construcción anunció que formará parte de Blockchain Federal Argentina, una iniciativa en la que distintas partes representan al sector público, la academia y el sector privado, para conformar una infraestructura sobre la que corre la primera plataforma nacional de uso público basada en Blockchain, una innovadora tecnología de validación de transacciones de distinto tipo.
Blockchain Federal Argentina es una plataforma multiservicios abierta y participativa pensada para integrar servicios y aplicaciones sobre blockchain.Una iniciativa confiable y completamente auditable que permita optimizar procesos y funcione como herramienta de empoderamiento para toda la comunidad.
Blockchain Federal Argentina fue concebida dentro de un espacio de trabajo colaborativo, y apunta a reproducir ese patrón como columna vertebral de la plataforma.
Diseñada para potenciarse a través de los aportes de sectores públicos, privados, académicos y de la sociedad civil, BFA opta por una estrategia donde la participación de toda la comunidad es esencial, desde la ingeniería organizacional hasta el despliegue de la infraestructura.
Siguiendo el modelo de Múltiples Partes Interesadas, Blockchain Federal Argentina mantiene un modelo de gobernanza que asegura la representación de todos los sectores en la toma de decisiones. Pero al ser una plataforma pública, su uso no estará restringido a las organizaciones que participen del consorcio. Toda la comunidad tiene las puertas abiertas para participar en BFA.
Individuos, organismos, instituciones o empresas de cualquier sector interesados en desplegar aplicaciones y servicios aprovechando todas las características de la plataforma, o simplemente contribuir al primer desarrollo de esta índole en el país, pueden sumarse a la iniciativa y comenzar a participar.
Sin embargo, mucha gente todavía nunca escuchó este término, y otro grupo aún más grande desconoce lo que es el Blockchain. Sin embargo, solo es cuestión de tiempo porque se trata de un cambio de paradigma en la forma de entender el mundo digital.
Además, tarde o temprano terminará integrándose en la vida cotidiana, según afirman los expertos. La idea es intentar explicar qué significa blockchain y por qué será clave en el futuro de las redes digitales.
Primero se debe contextualizar este término. Blockchain significa "cadena de bloques", su propio nombre será muy ilustrativo más adelante para comprender cómo funciona. Nació como actor secundario en la revolución del Bitcoin, ya que se trata de la tecnología o el sistema de codificación de la información que está por detrás de la moneda virtual y que sustenta toda su estructura.
Pronto se vio el potencial que tenía por sí misma y la cantidad de aplicaciones que permite en otras áreas más allá de las transacciones financieras, como la administración pública o el Internet de las cosas.
Blockchain contra la centralización
Blockchain es una tecnología que permite la transferencia de datos digitales con una codificación muy sofisticada y de una manera completamente segura. Sería como el libro de contabilidad de una empresa en donde se registran todas las entradas y salidas de dinero; en este caso sería un libro de hechos digitales.
Pero además, esta transferencia no requiere de un intermediario centralizado que identifique y certifique la información, sino que está distribuida en múltiples nodos independientes entre sí que la registran y la validan sin necesidad de que haya confianza entre ellos.
Con este sistema,
blockchain eliminaría la centralización que imponen aplicaciones como Facebook o Twitter
Una vez introducida, la información no puede ser borrada, solo se podrán añadir nuevos registros, y no será legitimada a menos que la mayoría de ellos se pongan de acuerdo para hacerlo.
Junto al nivel de seguridad que proporciona este sistema frente a hackeos, se encontra otra ventaja; aunque la red se cayera, con que solo una de esas computadoras o nodos no lo hiciera, la información nunca se perdería o el servicio, según el caso del que se hable, seguiría funcionando.
Un ejemplo que ilustra la importancia de la red distribuida está en las redes sociales. Con este sistema, blockchain eliminaría la centralización que imponen aplicaciones como Facebook o Twitter a la hora de identificar al usuario o validar la procedencia de sus mensajes, y la integridad de los mismos sería garantizada por la red de nodos.
¿Quién es quién en el blockchain?
El blockchain, como su nombre indica, es una cadena de bloques. Cada uno de esos bloques contiene la información codificada de una transacción en la red.
Blockchain se comporta igual que el libro contable citado anteriormente, pero será la red de nodos distribuidos quienes tengan que certificar que esos datos son verdaderos
Y cómo se hace eso. Es simple, cada bloque de la cadena porta el paquete de transacciones y dos códigos, uno que indica cuál es el bloque que lo precede (excepto el bloque origen, claro), y otro para el bloque que le sigue.
Entonces, estos bloques que están entrelazados o encadenados por lo que se llaman códigos o apuntadores hash. Ahora entra en juego el concepto de minado que realizan los nodos, es decir, el proceso de validación de la información.
En este proceso de minado o comprobación, cuando hay dos bloques que apuntan al mismo bloque previo, sencillamente gana el primero en ser desencriptado por la mayoría de los nodos.
Esto significa que que la mayoría de puntos de la red deben ponerse de acuerdo para validar la información. Por eso, aunque blockchain genera múltiples cadenas de bloques, siempre será legitimada la cadena de bloques más larga.
¿Cuál es su futuro?
Los expertos comparan la llegada del blockchain con hitos como la integración de las computadoras al uso doméstico o el desarrollo de Internet, es decir, un sistema que cambiará la forma de entender los negocios y la sociedad.
Uno de sus mayores potenciales está en los llamados smart contract o contratos inteligentes, es decir, con la tecnología del blockchain se podrán hacer acuerdos y transacciones de forma confiada sin revelar información confidencial entre las dos partes y sin la necesidad de "árbitros", como pagos a distribuidores o, por ejemplo, el alquiler de un auto online.
Pero no solo esto, basado en el mismo concepto, blockchain será esencial para el Internet de las cosas. Los electrónicos podrán comunicarse entre sí de forma segura y transparente, y pronto veremos a la heladera comprando yogures en el supermercado online en cuanto detecte que se han terminado.
La administración tendrá una baza incomparable con este sistema de criptografía. Cuestiones como la del voto electrónico que, a pesar de los intentos realizados con otras tecnologías, no ha resistido a los hackeos, ahora podría ser una opción viable para los votantes con la seguridad de que su identidad no será suplantada y la comodidad de no tener que desplazarse hasta el colegio electoral.
Actualmente son muchos los proyectos y aplicaciones en los que se está investigando para implantar el blockchain como estructura que los respaldan, así que pronto se verá si realmente se convierte en la tecnología del futuro.