Hay un sinfín de rumores acerca de las tan esperadas y deseadas Apple Glass, las futuras gafas de realidad aumentada de Apple, que realizarían un cambio de paradigma importante en muchos aspectos, y la interacción con ellas es uno de los más importantes.
Algunas de las especulaciones de las Apple Glass serían que podrían tener funciones como tocar las varillas, mover la mano enfrente nuestro o usar Siri son formas de navegar por el contenido y se les añade la que Apple acaba de patentar, convertir cualquier superficie en una pantalla táctil.
Bajo el nombre de: "Método y dispositivo para detectar el contacto entre un primer objeto y un segundo objeto", Apple solicitó esta patente en 2016 y apunta a que los dispositivos, suponemos las Apple Glass, usarían un sistema de superposición de controles en objetos del mundo real.
Cómo se daría esta nueva interacción
La forma más normal de interacción de los humanos con los objetos es mediante el tactos. Por otro lado, las pantallas que permiten detectar y localizar los toques en su superficie se conocen comúnmente como pantallas táctiles y son hoy en día parte común de, por ejemplo, smartphones y computadoras tablets.
Sin embargo, una tendencia actual es que las pantallas para RA se están haciendo más pequeñas y/o se acercan más a la retina del ojo del usuario. Este es, por ejemplo, el caso de las pantallas montadas en la cabeza, y hace que el uso de las pantallas táctiles sea difícil o incluso inviable.
Ante un objeto virtual que un dispositivo RA pueda mostrarnos, la forma más común para interactuar con él es mediante controladores, guantes o sensores que mediante un cable indiquen al dispositivo de nuestros movimientos. Pero tal como dice la patente "la limitación de este tipo de enfoques es que requieren modificaciones del objeto o del cuerpo humano".
Mediante la oclusión de objetos virtuales, ya conocida en ARKit y que se puede apreciar en los iPad Pro (2020) que disponen de sensor LiDAR, las gafas podrían detectar dónde el usuario está tocando.
Realmente este sistema está listo
No obstante, el sistema es poco preciso. Por ejemplo, en un teclado de una calculadora no es posible tocar el botón 5 sin pasar antes por el 9 o el 8 haciendo creer al sistema que los estamos tocando. El sistema detecta cuándo pasamos el dedo enfrente del botón, sin poder percibir si lo hemos tocado.
La propuesta de Apple ante semejante reto es el calor. Con dos objetos a diferentes temperaturas el área en donde se toquen cambiará de temperatura y lentamente se recuperara a la temperatura de antes del toque, informó el sitio AppleSfera.
Así los píxeles correspondientes al punto donde se ha producido el contacto se marcan claramente al medir el incremento o disminución de la temperatura. Un sistema donde la medición de la temperatura puede ocurrir tras el toque, cuando levantemos el dedo de la superficie.
Por otro lado, este sistema puede distinguir los toques u oclusiones causados por un cuerpo humano (que ocurrieron a propósito) de los toques u oclusiones por cualquier otra cosa (que podría ocurrir por accidente). Es capaz de localizar con precisión un toque y puede identificar los eventos de toque después de que ocurrieron (es decir, incluso si no había ninguna cámara, ordenador o cualquier otra cosa presente en el momento del toque).
Si Apple finalmente apuesta a la construcción de unas gafas de realidad aumentada como las Apple Glass, deberá atravesar muchos desafíos técnicos. En su presentación, en teoría se verá algo tan sencillo como unas gafas, pero tal como muestran patentes como esta, la cantidad de tecnología que habrá dentro y detrás de ellas podría ser un hito tecnológico.